Esto no significa que las mujeres deban ser siempre las que den el primer paso, pero es sólo un ejemplo de que los hombres adoran a las mujeres que no tienen miedo de tomar la iniciativa y hacer lo que quieren.
La idea de que a una mujer le importa un bledo ser humillada o rechazada les resulta totalmente atractiva porque dice que una mujer así grita confianza en sí misma.
Los hombres saben por experiencia propia lo difícil que es acercarse a una mujer que les gusta y si ven que una mujer se les acerca como una jefa, se quedarán totalmente hipnotizados.
Saben que hace falta valor para dar el primer paso y por eso apreciarán que una mujer se atreva a hacerlo.
¡Pensarán en ella como una verdadera y valiente diosa!