Admitámoslo: probablemente no exista una chica que nunca haya preguntado a sus amigas: "¿Es un jugador o le gusto de verdad?" con respecto a algún chico, a pesar del amor que comparten.
Una chica que nunca se preguntó: "¿Está jugando conmigo o sus intenciones son honestas después de todo?".
No obstante, es perfectamente natural que cosas como éstas pasen por tu cabeza de vez en cuando, pero otra cosa es que te obsesiones con estas cuestiones.
Cuando eres un sobrepensador y también sobredimensionadorsiempre sospechas de las intenciones de todos.
Temes constantemente que te rompan el corazón, y dudas incluso de aquellos en quienes deberías confiar.
Sin embargo, cuando tu intestino te está diciendo algo, quizá sea el momento de escucharlo.
Al fin y al cabo, si pasas la mayor parte del tiempo haciéndote preguntas como: "¿Va en serio conmigo o sólo está jugando?" o "¿Me quiere de verdad o está jugar a juegos?" o buscando constantemente un cuestionario de "¿Está jugando conmigo?", es hora de reconsiderar toda tu relación.