"Lo que más odio de las citas es que siempre se espera que un chico dé el primer paso. No me malinterpretes, no me importa acercarme a las mujeres y no es que esté demasiado nervioso para hacerlo.
Pero lo cierto es que a un chico también le gusta sentirse deseado. No tiene que comprarme flores ni nada por el estilo, pero cuando una chica toma la iniciativa, basta para sellar el trato.
Al fin y al cabo, las chicas queréis igualdad en todo, ¿no? Entonces, ¿qué os cuesta invitar a salir a un chico? Créeme, todos estarán encantados con tu valentía".