Si alguna vez se ha parado un momento a pensar: Mi marido elige a su familia antes que a mí...sepa que no está solo. Formar tu propia familia es algo hermoso, pero también puede ser complicado.
El matrimonio no sólo incluye a dos personas: la familia política también entra en la ecuación.
El problema surge cuando tu suegro, tu suegra y otros familiares traspasan los límites y se convierten en intrusos.
Para ser más concretos, el problema surge cuando uno de los cónyuges empieza a sentirse desatendido en el matrimonio (mentalmente, económicamente o de cualquier otra forma). Así es exactamente como te sientes ahora, ¿verdad?
Sientes que tu marido ya no te elige y que su familia es su prioridad número uno.
Por eso, puede que decidas enfrentarte a él (o a la familia de tu marido) o retraerte y pasar mucho tiempo contemplando las razones por las que lo hace.
Déjame decirte una cosa. Hagas lo que hagas, enfrentarte a él u obligarle a elegir entre tú y su familia nunca es una opción.
Debéis esforzaros siempre por evitar cualquier tipo de conflicto con vuestras respectivas familias e intentar resolver las cosas de forma pacífica como matrimonio.
Como ya he dicho, no estás solo en esto.
A continuación encontrará algunos consejos útiles para ayudarle a afrontar el problema, tras lo cual encontrará una lista de razones comunes que explican por qué los hombres (a veces) eligen a su familia antes que a su cónyuge.
11 cosas que hacer cuando tu marido elige a su familia antes que a ti
No dejes que tus sentimientos heridos se conviertan en resentimiento
Sí, tienes todo el derecho a sentirte traicionado, herido y abandonado.
No debes fingir que no te ofende la decisión de tu marido de dar prioridad a su familia sobre ti, pero ¿sabes qué más no debes hacer?
No deberías dejar que tu sentimientos heridos se convierten en resentimiento. Esto significa guardarle rencor, rebobinar constantemente los acontecimientos pasados, fantasmear con él, etc.
Todo esto es extremadamente tóxico para tu salud mental y física. Te sorprendería saber lo poderosos que son nuestros pensamientos.
Atraemos aquello en lo que pensamos. No, no acabo de inventar esa idea, se llama la Ley de la Atracción.
Otra razón por la que no debe dejar que su sentimientos heridos a su vez tóxico es porque sólo empeorará las cosas.
Ni una sola alma en la Tierra ha resuelto sus problemas pensando únicamente en lo herida que se siente (créeme).
Lo he intentado varias veces, pero nunca ha funcionado. Como ya he dicho, está bien sentirse herido, pero no debes dejar que se convierta en "un año de resentimiento". En lugar de eso, deberías hacer lo siguiente:
Comunicarse abierta y honestamente
Si algo he aprendido hasta ahora es lo siguiente: Resolver siempre las cuestiones matrimoniales relativas a familia ampliada y mejores amigos sólo con tu pareja.
Considéralo el mejor consejo matrimonial que jamás recibirás. (De nada.)
La comunicación. Como ya sabrás, es la base de toda relación sana, desde la amistad hasta el matrimonio (ESPECIALMENTE el matrimonio).
Lamentablemente, las mujeres tendemos a creer que nuestras parejas son capaces de leernos la mente.
Por desgracia, no lo son. Otra cosa impagable que he aprendido es lo siguiente: Si no se lo dices a un hombre, no lo sabrá.
Me gusta comparar esto con los gatos. Si no demuestras que algo te molesta, tu gatito seguirá haciéndolo porque no sabe que está haciendo algo mal.
Si no te comunicas abierta y honestamente, tu marido nunca sabrá que te sientes desatendida porque está eligiendo a su familia antes que a ti.
Así pues, el primer paso es compartir con él cómo te sientes y qué es exactamente lo que te pasa por la cabeza.
Una vez que lo hagas, te sentirás diez veces mejor. Lo más importante es que tu marido esté dispuesto a cooperar y a escucharte con atención.
Esto demuestra que sigues siendo su prioridad, pero que, por alguna razón, no te lo ha demostrado.
Trabaje en equipo con su cónyuge
Recuerda que lo peor que puedes hacer en esta situación es poner a su familia en su contra, discutir constantemente con él y cosas similares.
En lugar de involucrar a su familia y pelearse con su cónyuge, trabaje para crear un espíritu de equipo en su matrimonio.
¿Qué significa esto? Significa escucharse mutuamente y trabajar juntos para encontrar una solución a este problema concreto.
Implicar a toda la familia en el asunto sólo creará más confusión y complicaciones.
Recuerda que el matrimonio es un trabajo en equipo y que ambas partes deben esforzarse, proponer soluciones y apoyarse mutuamente pase lo que pase.
Después puedes decidir compartir tus conclusiones con los miembros de tu familia. Así entenderán que habéis llegado a un acuerdo como pareja y esto evitará posibles conflictos.
Además, recuerda que no nacemos jugando en equipo y que tenemos que trabajar constantemente en esta habilidad.
Cuando aprendas a activar la compasión, la comprensión y la capacidad de compromiso, desactivarás al instante todos los aspectos negativos que podrían destruir tu matrimonio.
No hay nada mejor que trabajar en equipo con tu cónyuge, porque eso significa que sois amigos, colegas, compañeros de fechorías y cónyuges, todo en uno.
Significa que os cubrís las espaldas y que estáis dispuestos a enfrentaros juntos a cualquier problema en lugar de ser adversarios.
Dale a tu marido algo de tiempo y espacio para tomar la decisión
Sé lo que estás pensando. Probablemente pienses que me refiero a que deberías darle a tu marido algo de espacio para que elija entre tú y su familia. Siento decepcionarte, pero no me refiero a eso.
Lo que tienes que hacer es darle a tu marido algo de tiempo y espacio para que tome la decisión de CAMBIAR. Probablemente hayas oído muchas veces hasta ahora que todo cambio empieza en nuestro interior.
Esto significa que ni tú ni sus familiares podéis influir en su decisión de mejorar y cambiar las cosas en su matrimonio.
Es él quien puede tomar la decisión de empezar a trabajar en sí mismo y mejorar su rendimiento como marido.
Esto significa que no debes forzarle, regañarle ni exigirle que elija enseguida entre tú y su familia.
Hay que tener en cuenta que tanto su familiares y tú eres importante para él y no se trata de elegir entre dos bandos.
Es una cuestión de acuerdo, comprensión y compromiso. Su familia y la tuya siempre formarán parte de vuestro matrimonio y te corresponde a ti establecer los límites e informarles de ello si es necesario.
Pero, antes de todo eso, tienes que esperar a que tu marido inicie el proceso. Si no está dispuesto a cooperar, no hay mucho que puedas hacer tú sola.
Hay que actuar como jugadores de equipo: es la única forma correcta de afrontar este tipo de situaciones.
Véase también: Cómo arreglar un matrimonio roto: Un plan de rescate en 15 pasos
Tener en cuenta las circunstancias
Cuando nos sentimos desatendidos y menospreciados, tendemos a reaccionar de forma exagerada y a pensar sólo en cómo nos sentimos en ese momento.
Nos olvidamos de prestar atención a otras cosas y circunstancias que podrían ser la clave de toda la situación.
Por ejemplo: si uno de los familiares de su marido está enfermo o necesita ayuda y apoyo de algún modo, se trata de una situación de emergencia. En ese caso, no deberías sentirse abandonado porque es una situación temporal.
Entiendo que es más fácil decirlo que hacerlo, pero tener en cuenta las circunstancias es una necesidad y no una opción.
En lugar de juzgar, te ayudará a ver las cosas desde otra perspectiva y a comprender la situación.
Cuando sabes que algo no va a durar para siempre, es más fácil mantener la calma y aceptar las cosas como son en ese momento.
Así que, en lugar de centrarte únicamente en tus propios sentimientos, presta atención al fondo y a todos los demás detalles que te rodean.
También puedes pedirle a tu marido que te confirme que no hay nada de lo que debas preocuparte y que sigues siendo su prioridad, sólo que esta vez hay cosas más importantes de las que tiene que ocuparse.
Esto me recuerda a un chico con el que me escribo desde hace tiempo.
Me dijo que le gustaría salir conmigo, pero que de momento no puede porque tiene un montón de obligaciones para la universidad.
Dijo que estaría más que contento si le esperaba, pero que si no lo hacía, también lo respetaría.
Ahora imagina que yo no supiera nada de todo esto y él simplemente me dijera que no puede salir conmigo sin ninguna explicación lógica.
Sería muy confuso, ¿verdad? Pero, cuando tienes en cuenta las circunstancias, cada situación se vuelve más clara y fácil de soportar.
Hacer concesiones
En primer lugar, ¡salud a la persona que inventó el compromiso! No hay nada mejor en el mundo que llegar a un acuerdo utilizando una herramienta llamada compromiso.
Significa que estás dispuesto a dar y tomar (sacrificar y ganar) para que las cosas funcionen. A decir verdad, no todos sabemos ceder, pero como todo, esto se puede aprender.
Comprometerse es exactamente lo que debe hacer cuando su marido elige a su familia antes que a usted. Digamos que siempre lleva a los miembros de su familia de vacaciones contigo.
Si tú te vas de vacaciones dos veces al año, podrías acordar llevarte a los miembros de su familia una vez al año. O si él les ayuda económicamente, podríais llegar a un plan presupuestario razonable.
Lo mismo se aplica a cualquier otro problema al que te enfrentes ahora o en el futuro. Así tu marido no se verá obligado a elegir entre su familia o tú.
Al comprometerse, puede hacerles saber que siguen siendo una parte importante de su vida, pero que no puede desvivirse cada vez por ellos porque ahora también tiene su propia familia a la que cuidar.
Establecer un calendario
¿Su marido pasa mucho tiempo con su familia cada fin de semana o cada dos días?
¿O es que los miembros de su familia vienen a su antojo, sin ser invitados, a tu casa si no vivís ya bajo el mismo techo?
En estas y otras situaciones similares, lo más importante y lógico es establecer un calendario.
En ese horario, debe haber tiempo para ti y tu marido como pareja, tiempo a solas para ambos y tiempo para pasar con los miembros de tu familia.
El acento se pone en crear equilibrio, porque ésa es la clave de todo matrimonio feliz y exitoso. Cuando establezcas un horario, recuerda informar a los miembros de tu familia al respecto.
Esa voz dentro de tu cabeza que te dice Mi marido elige a su familia antes que a mí se silenciarán porque sabrás exactamente cuándo estás a punto de pasar tiempo con ellos, juntos como pareja, y tener algo de tiempo "para mí".
Yo misma soy una maniática de la organización, lo que significa que todos y cada uno de los eventos y cosas tienen que formar parte de mi agenda.
He probado las dos formas (casual y programada) y puedo asegurar que la segunda es diez veces más productiva y eficaz.
En caso de que necesites recordar un horario, puedes guardarlo en tu cartera o en la nevera. Además, si incumples las normas puedes pensar en algo parecido a un castigo.
No tiene por qué ser un castigo real, sino algo con lo que os compensaréis mutuamente en caso de que os olvidéis de vuestro trato y hagáis algo en contra del horario intencionadamente.
Véase también: Cómo salvar un matrimonio: 10 Métodos Probados Que Siempre Funcionan
Toma todas las decisiones en pareja
Hagas lo que hagas, nunca des por sentado que tu marido piensa una cosa o está de acuerdo contigo en algo si no lo has hablado con él.
Tenéis que tomar todas las decisiones en pareja porque comunicación saludable es la base de un matrimonio.
Que tú hayas decidido que quieres que ignore a su familia el resto de su vida (o por el momento), no significa que él tenga que aceptarlo.
Como ya se ha dicho, tu marido es el que tiene que tomar la decisión de cambiar y actuar en consecuencia.
La cuestión es que si ambos cónyuges no están dispuestos a trabajar en su matrimonio, están condenados.
Me atrevería a decir que el hecho de que tu marido elija a su familia antes que a ti no es realmente un problema si se da cuenta de ello y decide hacer algo al respecto.
Si no lo hace, entonces tienes un problema mayor y es el egoísmo. No hay necesidad de acentuar lo cansado y agotador que es estar con alguien que piensa que siempre tiene la razón pase lo que pase.
La verdad es que el matrimonio no consiste en equivocarse o acertar, sino en admitir cuando uno se equivoca y estar dispuesto a rectificar cuando sea necesario.
Siempre habrá situaciones críticas y si decidís atravesarlas en pareja, las resolveréis en un tiempo récord y con el mínimo esfuerzo.
Haz que tu familia también sea una prioridad
Si tu marido elige a su familia antes que a ti y apenas metes a ninguno de tus familiares en la ecuación, tal vez sea hora de cambiar eso.
Tu familia también debe ser tu prioridad, así que no debes preocuparte sólo de pasar tiempo con la suya.
Por ejemplo, si los miembros de su familia van regularmente de vacaciones con usted, usted tiene todo el derecho a invitar también a los suyos.
Si tu propia madre, padre u otro familiar tiene problemas de salud, no deberías pensártelo dos veces antes de pasar más tiempo con ellos y estar a su disposición en caso de que te necesiten.
Recuerda que no hay nada malo en hacer de tu familia una prioridad. El problema surge cuando se convierten en tu única prioridad.
Esta es una buena lección también para tu marido.
Si suele pasar mucho tiempo con los miembros de su familia y espera que estés allí cuando él quiere, puedes decirle que ahora es tu momento de pasar tiempo con tu familia también.
Aprenderá que no puede elegir a su familia antes que a ti porque, si lo hace, tú harás exactamente lo mismo. Esto le ayudará a comprender la necesidad de equilibrio en el matrimonio y en las relaciones en general.
Mostrar compasión y comprensión
En lugar de juzgarle y hablar mal de su familia y de su carácter y similares, haz lo posible por mostrar compasión y comprensión.
Ten en cuenta que sigue siendo un niño para sus padres y comprende que las cosas no pueden cambiar de la noche a la mañana.
Si le demuestras que comprendes cómo se siente, él hará lo mismo por ti. No se ofenderá, no te llamará friki ni nada parecido.
En cambio, demostrará que entiende por qué te sientes así e intentará por todos los medios cambiar las cosas en el futuro.
El matrimonio funciona según el principio de dar y recibir.
Si demuestra que está dispuesta a hablar abierta y honestamente con comprensión sobre la relación de su marido con los miembros de su familia, él le corresponderá.
Los problemas familiares son una situación delicada que requiere mucha paciencia y comprensión. No quieras convertirlo en un juego en el que gana el más afortunado o el más audaz.
Queréis pasar por ello juntos, respetar las perspectivas del otro y trabajar para encontrar la mejor solución para ambos y vuestras familias.
Buscar asesoramiento profesional
Si puede, considere la posibilidad de buscar ayuda profesional, ya que no sólo resolverá su problema actual, sino que mejorará su comunicación y su matrimonio en general.
A veces es difícil explicarle a tu marido por qué es un problema que elija a su familia en lugar de a ti, porque puede que él no lo vea como un problema.
Hablar de ello con un profesional le ayudará a entender las cosas con más claridad. Quizá haya algunas causas subyacentes a su comportamiento que ni tú ni él podáis detectar.
Por ello, siempre es aconsejable buscar una tercera opinión (opinión profesional) sobre el asunto.
Si resuelve las cosas parcialmente y descuida la cuestión central de un determinado problema, lo más probable es que con el tiempo las cosas vuelvan a su estado inicial.
En otras palabras, lo más probable es que al cabo de un tiempo vuelva a elegir a su familia antes que a ti. Si quieres evitarlo, busca ayuda profesional y afronta el problema paso a paso.
8 razones comunes por las que los hombres eligen a su familia antes que a su cónyuge
Tiene remordimientos de conciencia por no pasar tanto tiempo con su familia.
Antes de casarse, tu hombre vivía solo o con sus padres, como el resto de la población masculina y femenina. Lo más probable es que pasara la mayor parte de su tiempo libre con sus padres (sobre todo si vivían juntos).
Ya sabes lo que hay que hacer. Comidas familiares, juegos, copas, viajes por carretera... la lista es interminable.
No me malinterpretes: esto es estupendo y es exactamente como debería ser. El problema surge cuando tu hombre decide casarse y formar su propia familia.
De repente, se da cuenta de que ya no pasa tanto tiempo con su familia como antes. Su rutina ha cambiado drásticamente y es entonces cuando empieza a estar confuso sobre su lista de prioridades.
Quiere pasar tiempo contigo, pero al mismo tiempo se siente culpable por no pasar tanto tiempo con su familia.
Por eso, inconscientemente empieza a descuidarte, haciéndote sentir menos digna y como si tuvieras que competir por su atención.
A menudo, los hombres ni siquiera son conscientes de ello porque no es algo en lo que puedan influir. Su conciencia les corroe y les obliga a hacer cosas que normalmente no harían.
Así es como acaban pasando más tiempo con su familia que con su cónyuge.
Quiere ser un pacificador
Si alguna vez ha visto Monstruo-en-ley o Conoce a los Fockersentonces sabes de lo que estoy hablando.
Estas dos películas son sencillamente increíbles y, aunque son un poco exageradas, describen a la perfección y de forma hilarante los problemas matrimoniales y los conflictos con las respectivas familias.
Yendo al grano: la mayoría de los hombres se convierten en pacificadores para evitar conflictos.
Puede que te apetezca: Mi marido elige a su familia antes que a mí, pero en realidad, lo hace para evitar cualquier posible conflicto entre vosotros y su familia.
Así que, cuando decide aceptar todas y cada una de las invitaciones de sus padres, lo más probable es que lo haga sólo para satisfacerlos y mantener la paz entre vosotros. Pero, ¿cómo puedes saberlo, verdad?
Si no te lo dice, sólo puedes adivinar lo que pasa por su cabeza. La verdad sea dicha, los hombres son criaturas misteriosas y les gusta reservarse sus estrategias, lo que a menudo nos vuelve locas a las mujeres.
Tal vez debería reformular esto: Los hombres podrían hacer esto para volvernos locas. (Bueno, espero que no.)
Sufre el síndrome del "niño de mamá".
Todos conocemos al menos a un niño de mamá famoso. O es uno de nuestros amigos o, si no tenemos tanta suerte, es nuestro ser querido.
Es interesante que a menudo ni siquiera nos damos cuenta de que estamos con un niño de mamá hasta que alguien nos lo señala.
O no queremos clasificarlos como tales porque no suena tan bien y secretamente esperamos que no dure para siempre. Sea como sea, estar con un hombre así puede ser una verdadera lucha.
Este tipo de relación entre madre e hijo incluye lo siguiente:
Llamadas telefónicas incesantes (la mayoría sobre asuntos triviales como si han comido y similares).
No estar dispuesto a mudarse lejos de donde vive su madre.
Tiene problemas para tomar decisiones (tanto sobre cosas menores como mayores) sin la ayuda de su madre.
Depender económicamente de su madre
Elegir constantemente a su madre antes que a ti, a tus hijos o a ambos.
Estas madres no ven a sus hijos como adultos. Por el contrario, siguen pensando en ellos como niños pequeños y, al hacerlo, crean una relación madre-hijo poco saludable.
Sienten que su hijo es incapaz de hacer nada sin ellos y que deberían seguir estando disponibles para él las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
Y su hijo piensa lo mismo. Está convencido de que su madre debe ser siempre parte activa de su vida, tanto si vive solo como si está casado.
Es realmente difícil romper este patrón porque sus raíces son profundas. Tratar con un niño de mamá requiere mucha paciencia y comprensión.
Como siempre, el matrimonio es cuestión de trabajo en equipo y si tu pareja está dispuesta a trabajar en sí misma y mejorar vuestro matrimonio, entonces la mitad de vuestros problemas ya están resueltos.
Véase también: Las 7 cosas que los hombres hacen para destruir su matrimonio
Los hombres viven más tiempo con sus padres
Estudios recientes han demostrado que es más probable que los hombres (de 18 a 34 años) sigan viviendo con sus padres que con su pareja o cónyuge. Cuando lo analizo más detenidamente, esto tiene sentido. ¿Por qué?
Porque todos sabemos que las mujeres son las que maduran más rápido que los hombres, tanto mental como físicamente, lo que significa que se independizan y deciden casarse antes que la población masculina.
Ahora bien, ¿cómo afecta esta analogía a los matrimonios, o a su matrimonio para ser más exactos?
La fuerte relación de su marido con sus padres puede haber sido lo primero que realmente le gustó de él, pero con el tiempo puede convertir su vida matrimonial en una verdadera carga.
Si ha vivido mucho tiempo con sus padres, puede que tenga dificultades para cambiar sus prioridades ahora que es un hombre casado.
Todavía siente que tiene que elegir a su familia antes que a ti (o lo está haciendo inconscientemente) porque su conexión con ellos sigue siendo fuerte.
Aunque es deseable y está bien pasar tiempo con la familia, los amigos y la pareja, dar excesiva prioridad a uno de ellos nunca es una opción saludable.
Todos viviendo bajo el mismo techo
Otra razón común por la que un hombre elegiría a su familia antes que a su cónyuge es la situación en la que todos viven bajo el mismo techo. Hablando de una situación realmente complicada.
Por desgracia, no todo el mundo tiene la posibilidad de mudarse a su propia casa con su cónyuge. A veces, nos vemos obligados a vivir en un hogar multigeneracional porque no tenemos otra opción.
Además, a veces los hombres eligen vivir bajo el mismo techo aunque tengan otras opciones. Esto suele estar relacionado con el síndrome de los niños de mamá.
Si vives bajo el mismo techo, los conflictos y las situaciones potencialmente incómodas son inevitables.
La intimidad empieza a escasear y la relación con su cónyuge experimenta múltiples desafíos.
En algún momento, tu marido sentirá que tiene que elegir entre su familia o tú (sobre todo si su familia le presiona).
Para apaciguarlos, empezará a bailar a su son y, como resultado, acabará descuidándote.
Podríamos decir que las parejas casadas que viven bajo el mismo techo están casadas con toda la familia y no sólo con su cónyuge. En tales situaciones, siempre habrá pequeñas o grandes fricciones y toma de partido.
Quiere darte celos
Sí, lo creas o no, hay algunos cónyuges que eligen a su familia antes que a su pareja simplemente para darles celos.
Cuando se trata de la población masculina, podríamos estar hablando de narcisistas que quieren hacerte luchar por su atención.
Digamos que sabe que te sentirás desatendida si pasa todos sus fines de semana o su tiempo libre con su madre y/o su padre en lugar de contigo.
Aunque es consciente de ello, sigue optando por hacerlo porque su principal objetivo es hacerte competir por su atención y su tiempo.
Es entonces cuando empiezas a pensar que tú eres el problema y que debes haber hecho algo malo para merecer ese trato.
Si crees que éste puede ser tu caso, presta también mucha atención a otros detalles (su lenguaje corporal, cualquier cambio en su comportamiento y similares).
La mayor señal de que está intentando ponerte celosa eligiendo a su familia antes que a ti es que no haya actuado así antes.
En otras palabras, si no ha pasado mucho tiempo con ellos en el pasado y ahora son literalmente inseparables, entonces sabes que algo raro está pasando.
Como siempre, la mejor manera de averiguar lo que realmente ocurre es simplemente preguntando, explicando la situación y cómo te sientes al respecto.
Véase también: 10 preguntas que debe hacer a su cónyuge antes de acudir a terapia matrimonial
Atados por la tradición
A veces los maridos deciden elegir a su familia antes que a su cónyuge por tradición.
Esto es especialmente cierto para las parejas casadas de la India, donde los maridos sienten que es su deber cuidar y dar prioridad a su familia.
Por eso, deciden vivir más cerca de sus padres o bajo el mismo techo.
Esto está en estrecha relación con su cultura y tradición, y en tales casos establecimiento de límites es extremadamente difícil, si no imposible.
En vida familiar se convierte en número uno prioridad, el matrimonio queda eclipsado.
Cuando una mujer siente que su marido elige deliberadamente a su familia antes que a ella, puede desesperarse y pensar en hacer algo que normalmente no haría, como obligarle a elegir entre la primera mujer de su vida y su cónyuge.
Si tu marido siente que le obligas a elegir entre su madre y tú, las cosas pueden complicarse aún más. La verdad es que no se puede luchar contra la tradición, pero siempre se puede transigir.
Otras razones (emergencias, finanzas, etc.)
Hay montones de otras razones por las que un marido elegiría a su familia antes que a su cónyuge y algunas de ellas son emergencias (problemas de salud), finanzas y similares.
Cuando se trata de emergencias, me remito a mi madre y a mi padre, que estaban en una situación similar.
No hace mucho, mi tía tuvo algunos problemas de salud mental, así que vino a vivir con nosotros y básicamente toda la casa giraba en torno a ella porque era una emergencia.
Ahora bien, mi madre podría haber dicho que no quería vivir así y culpar a mi padre por dar prioridad a su familia, pero no lo hizo.
Al contrario, aceptó cuidarla cuando mi tía se quedó inmóvil. Siempre admiraré la fortaleza de mi madre y su abnegación.
Lo que intento decir es que a veces dar prioridad a un miembro de la familia no es una opción, sino una necesidad.
En tales situaciones, tenemos que adaptarnos y sacar lo mejor de nosotros mismos.
Lo mismo ocurre con el aspecto financiero.
Si la madre y el padre de tu marido u otros familiares están atravesando una crisis económica y él les ayuda, desde su punto de vista, está haciendo algo bueno y es algo que tiene que hacer.
Sin embargo, si su pareja se desvive constantemente por satisfacer todas sus necesidades y, como resultado, descuida las suyas y las de su matrimonio, es una señal de alarma.
Como siempre, el equilibrio es la clave y los cónyuges deben esforzarse por establecerlo siempre que puedan.
Por ejemplo, el hecho de que su marido pague siempre las vacaciones familiares (de sus padres y otros parientes) no es una situación de emergencia, por lo que requiere un enfoque diferente y sus acciones no están justificadas.
Reflexiones finales
Cada vez que la siguiente frase invada tu cerebro Mi marido elige a su familia antes que a míRecuérdate a ti mismo que no debes actuar por impulso.
No te pongas en contacto con su familia y les amenaces o le hagas elegir entre tú y sus familiares.
Mantén la calma y háblalo abiertamente con él. Te sugiero que lo hagas cuanto antes porque cuanto más lo prolongues, más te lo pensarás.
Todos sabemos lo que ocurre cuando pensamos demasiado las cosas. En nuestra cabeza, las hacemos diez veces peores de lo que son en realidad.
Recuerda crear un espíritu de equipo en tu matrimonio y céntrate en llegar a compromisos. Además, si puedes, busca ayuda profesional.
Si haces todo eso, no hay ninguna posibilidad de que no consigas resolver este problema concreto.
Como resultado, ambos os haréis aún más fuertes y sabios, así como vuestro matrimonio. Y recuerda:
"El objetivo del matrimonio no es pensar igual, sino pensar juntos". - Desconocido
Véase también: 5 maneras eficaces de devolver la chispa a su matrimonio