Seamos sinceros. ¿Cuántas veces hemos encontrado todos un gazillion excusas para un ex de mierda y su trato aún más de mierda hacia nosotros?
Seré el primero en levantar la mano. El amor te hará eso.
He caído de cabeza por chicos que eran todo tipo de cosas malas para mí y en lugar de afrontarlo de frente, he aguantado tanta mierda, encontrando siempre una excusa para él; en el fondo sabiendo la verdad real y dolorosa y sintiéndome tan avergonzada de mí misma por dentro.
Eso no me impidió repetir ese error unas cuantas veces más, hasta que un día decidí por fin que soy mejor que eso. Pero hasta ese día, esta era mi triste verdad...
Recuerdo a un ex en particular que era un ejemplo perfecto de lo que nunca se debe caer ( lo que por supuesto hice ).
Era un verdadero hablador suave. Parecía un millonario y lo sabía. Era el tipo de hombre que nunca diría abiertamente lo bien que lo pasaba, pero se aseguraba de que la gente lo supiera... Era así de presumido.
Tenía su manera de tratar a las mujeres y no puedo imaginarme a ninguna chica inmune a sus maneras encantadoras y a esa sonrisa preciosa y autosuficiente.
Me enamoré de él al instante. Al principio todo fue muy informal... Salíamos a tomar café, nos reíamos mucho, pasábamos las tardes en su lujoso apartamento y me sentía como en las nubes. No quería irme nunca.
Las cosas empezaban a ponerse serias y empecé a sentir algo de verdad por él. Ya no se trataba de una aventura sexy y divertida con un semental extremadamente sexy, sino que se estaba convirtiendo en una relación real en la que podía verme con este chico a largo plazo.
Durante un tiempo, parecía estar de acuerdo conmigo y yo era literalmente la chica más feliz del mundo. ¿Qué podía salir mal?
Mucho...
Lo que no sabía era lo poco que le conocía en realidad.
En cuanto empezó a ser real, se convirtió en una persona completamente distinta y ya no pude reconocerle. Yo estaba completamente involucrada en esto y él lo daba todo por sentado.
Estaba a su disposición siempre que me necesitaba, pero ¿era recíproco? Claro que no.
Le di mi corazón y mi alma, pero ¿qué recibí a cambio? Pedazos de su supuesto amor y sólo cuando era conveniente.
Yo era la mejor novia pero cuando estaba pasando por un periodo oscuro, él no estaba ahí para mí. Y lo peor es que yo seguía poniendo excusas en mi cabeza.
Si yo estaba pasando por una mierda y él no estaba allí, me decía a mí misma que él también debía estar pasando por algo, que no debía presionarle... Si necesitaba que me recogiera después de un largo día y no contestaba a mis llamadas, debía estar atrapado en el trabajo.
Si le decía que le quería (cosa que realmente hacía...) y él respondía: "Sí, tú también", yo sabía que lo que realmente quería decir era: "¡Yo también te quiero, cariño!".
Tenía todo un escenario en mi cabeza de lo que realmente significaba su tratamiento de mierda y por un minuto, me sentí mejor... Me convencía de eso para no perderlo por completo.
Estaba tan locamente enamorada que no podía afrontar la verdad. No podía decirlo en voz alta. Si lo hacía... se volvería demasiado real y no estaba preparada para eso.
Salía con un hombre que sólo me daba la mitad de lo que yo le daba. Nunca estaba allí del todo, pero siempre lo suficiente para mantenerme allí.
Él sabía que yo no necesitaba mucho. Sólo lo suficiente para hacerme sentir que había esperanza para nosotros y me enganché.
Me avergüenzo de lo poco que pensaba de mí misma. Me avergüenzo de lo poco que creía que valía. ¡Realmente apesta que nos menospreciemos por tipos que no valen nuestro tiempo!
Es un asco sacrificarte a ti mismo y tu tiempo por alguien que nunca va a ser lo que te mereces.
Me costó muchas lágrimas y muchas conversaciones serias conmigo misma admitir finalmente que ya no funcionaba.
¿Por qué seguí buscando excusas para un tipo que desperdició todas las oportunidades que tuvo de demostrarme que me quería? ¿Por qué me dejé tratar tan mal por alguien que tan claramente no me merecía?
¡Si me amara, habría estado allí! Si me amara, no tendría que cuestionármelo cada doloroso día.
Si me quisiera, no tendría que seguir buscando razones para justificar el trato que me daba.
¡No lo era! Y por fin había llegado el momento de ponerme en primer lugar, ¡así que lo hice!
Me dolió mucho... pero dejé su lamentable culo. Sólo me estaba agobiando.
Y por aguantar tanta mierda, estaba sufriendo en silencio tan profundamente que era sólo cuestión de tiempo que explotara...
Ningún hombre merece esto, créeme. Si sientes que no estás recibiendo lo que mereces...-irse. Si tu chico da por sentado todo lo que haces por él...-¡no lo dejes pasar!
¡Tú eres una diosa y él no es más que un gilipollas egoísta e inmaduro!
Y cuanto antes lo digas en voz alta, mejor te sentirás.
No está emocionalmente dañado, ¡sólo es un gilipollas! Y cuando por fin seas lo suficientemente valiente para darte cuenta de esto, créeme, ¡nunca te conformarás con menos!
Una vez que te das cuenta de lo que vales, no hay vuelta atrás.