Hurra, ¿estás preparado para otro gran hito en tu relación? Pero, espera... ¿cuándo es demasiado pronto para irse a vivir juntos?
Mudarse con la pareja es un gran paso en cualquier relación, pero saber cuándo es el momento adecuado puede ser una decisión difícil de tomar.
Si te mudas demasiado pronto, corres el riesgo de arruinar tu relación incluso antes de que empiece oficialmente.
La decisión de irse a vivir juntos depende de muchos factores, desde los económicos hasta la forma de afrontar (o no) los problemas de pareja.
La relación de cada pareja es única y se desarrolla a un ritmo diferente, por lo que saber cuándo es demasiado pronto para irse a vivir juntos es algo individual.
Normalmente, las parejas acuerdan irse a vivir juntas después de conocerse durante seis meses o un año.
La cohabitación ofrece muchas ventajas, como dividir las tareas domésticas, compartir la economía, poder abrazar a la persona amada siempre que se quiera y muchas más.
Ahora bien, no sería realista por mi parte si sólo me centrara en los pros de la cohabitación, así que seré sincera contigo: Vivir con tu pareja puede ser (a veces) una auténtica pesadilla.
PERO, no es nada que no se pueda arreglar con una conversación abierta y honesta.
Verás, La convivencia consiste en comprometerse, respetar las diferencias, apoyarse mutuamente y estar dispuesto a trabajar para mejorar.
¿Cree que usted y su pareja están preparados para todo eso? Averigüémoslo juntos.
5 señales de advertencia de que es demasiado pronto para irse a vivir juntos
Lo estás usando como una forma de probar la fuerza de tu relación
¿Sientes en el fondo de tu corazón que irte a vivir con él o ella podría ser una mala decisión porque es demasiado pronto, pero sigues decidido a hacerlo?
¿La razón por la que queréis iros a vivir juntos es vuestro deseo de poner a prueba la solidez de vuestra relación?
Si la persona de la que estás enamorado te está dando señales contradictorias o si tenéis algunos problemas subyacentes en vuestra relación, es natural que empieces a sospechar que las cosas no son como parecen o como deberían ser.
Aun así, esto no significa que debas forzarte a irte a vivir con alguien sólo para poner a prueba vuestra relación.
Si lo haces, lo más probable es que ambos acabéis decepcionados cuando empecéis a enfrentaros a todas esas banderas rojas que deberíais haber abordado de antemano.
No habéis tenido una conversación sobre vuestros objetivos financieros
Sé lo que piensas: Hablar de finanzas es muy aburrido y nada sexy. Pero, ¿adivina qué? Si tienes intención de vivir con tu pareja, es necesario mantener una conversación sobre vuestros objetivos financieros.
Si evitas este tipo de conversaciones, te arriesgas a tener muchas discusiones futuras con tu pareja en caso de que decidáis vivir juntos.
Configuración objetivos de pareja es la clave de toda relación feliz.
No hace mucho, estaba salir con un jugador chico durante seis meses. Pasábamos mucho tiempo juntos.
Era mi mejor amigo, amante y compañero de fechorías, pero cuando hablamos de irnos a vivir juntos, por primera vez, yo era escéptica en todo (sobre todo cuando pensaba en las finanzas).
Como su trabajo principal consistía en jugar 24 horas al día, 7 días a la semana, sabía que no podría contar con él cuando se tratara de objetivos económicos, así que rechacé educadamente la idea de irnos a vivir juntos.
El caso es que toda nueva relación está llena de emoción, pero también de presión. Cuando la fase de luna de miel termina, la realidad empieza a golpear.
Todavía no has tenido tu PRIMERA gran discusión
¿Cuándo es demasiado pronto para irse a vivir con alguien? Bueno, si aún no habéis tenido vuestra primera discusión, siento decepcionarte, pero eso significa que es demasiado pronto para irse a vivir con alguien.
Cuando empiezas a vivir con alguien, tendréis más discusiones que nunca porque pasaréis más tiempo juntos que nunca. Esto es totalmente saludable e incluso deseable.
Cada uno de nosotros tiene un enfoque diferente a la hora de discutir. Algunos somos testarudos hasta la médula, mientras que otros son más realistas y están dispuestos a transigir.
Si aún no habéis tenido vuestra primera gran discusión, es difícil saber cómo será. Lo último que necesitas es tener que poner fin a una relación duradera justo después de haber discutido.
Ambos miembros de la pareja tienen que estar dispuestos a admitir cuando se equivocan y afrontar las cosas de una forma sana (o debería decir no tóxica).
Lo utilizas como una forma de arreglar los problemas de tu relación
¿Usted o su pareja tienen problemas de confianza ¿porque ya te han hecho daño antes y ahora se refleja en tu relación actual?
¿Tiene usted cuestiones de compromiso o cualquier otro problema característico de las relaciones modernas?
Si la respuesta es afirmativa, no hay que precipitarse a la hora de irse a vivir juntos. Si crees que la cohabitación arreglará mágicamente todos tus problemas, piénsalo otra vez.
Basándome en mi experiencia personal, puedo asegurarte que irse a vivir juntos antes de afrontar problemas en tu relación es lo peor que podrías hacerte a ti mismo y a tu pareja.
Si te apresuras a irte a vivir con él, a pesar de que sabes que hay algunas cosas en tu relación que debes resolver primero, estás huir de los problemas.
Sus problemas no desaparecerán, sino que serán aún mayores y más complejos que antes.
Te sientes presionado a hacerlo
Normalmente, cuando uno de los miembros de la pareja está preparado para irse a vivir juntos y el otro no, los niveles de presión aumentan considerablemente.
Si tu pareja te recuerda constantemente que deberías empezar a vivir con él o ella y tú no estás muy seguro de si es una buena idea, entonces te está presionando inconscientemente para que tomes una decisión.
Si éste es tu caso, olvídate por un momento de lo que quiere tu pareja y piensa qué es lo que realmente quieres tú.
¿Quieres irte a vivir con ellos? ¿Crees que no estás preparado? ¿O necesitas más tiempo para tomar una decisión?
Sea cual sea tu respuesta, ten en cuenta que no debes mudarte sólo porque te sientas obligado a hacerlo.
Sé sincero contigo mismo y encontrarás una respuesta a la pregunta: ¿Cuándo es demasiado pronto para mudarse?
10 señales de que estás listo para mudarte con tu pareja
Habéis mantenido una conversación sincera sobre vuestro presupuesto y vuestras finanzas.
Mucha gente evita tener esta conversación porque puede resultar muy incómoda, pero la convivencia no es sólo Netflix y relax.
Hay muchas cosas serias que deben discutirse de antemano.
Una de esas cosas es hablar de presupuesto y finanzas. Si vas a buscar una nueva vivienda, primero tienes que acordar un precio. Como siempre, llegar a un compromiso es la mejor opción.
Sé realista y piensa si la convivencia será posible o no teniendo en cuenta tus ingresos. ¿Su pareja gana más dinero que usted? ¿Vais a compartir gastos?
Hay muchas otras preguntas que debes hacerte antes de decidir irte a vivir juntos.
No lo haces sólo por finanzas
No soy una experta en relaciones, pero puedo asegurarte que mudarse sólo por motivos económicos es una forma segura de arruinar tu relación.
Sí, compartir tus gastos con otra persona es una gran ventaja, pero no deberías basar tu decisión en eso.
¿Estás realmente interesado en vivir con tu pareja porque crees que es lo correcto? ¿Crees que iros a vivir juntos es la secuencia natural de vuestra relación? Tómate un tiempo para reflexionar sobre todo esto.
Ya habéis practicado la convivencia durante unos días
¿Es una persona a distancia que conociste en las redes sociales o has estado saliendo con ella en la vida real hasta ahora? Hay una gran diferencia entre las dos cosas.
Si lleváis tiempo saliendo, lo más probable es que ya hayáis pasado algún tiempo viviendo juntos. Por ejemplo, ellos van a tu casa o tú vas a la suya y pasáis allí algunas noches.
¿Cómo te sentiste cuando te despertaste a su lado? ¿Sentiste ansiedad por tenerlos cerca o te pareció totalmente natural y como debe ser?
Antes de decidirte a irte a vivir con alguien, es aconsejable pasar unos días de prueba.
Te sorprendería saber cuántas cosas puedes aprender sobre tu pareja en tan sólo un breve periodo de tiempo que pases con ella.
Véase también: Los 6 problemas de pareja más comunes que no tienen arreglo
Habéis viajado juntos con éxito
Viajar es mi parte favorita de una relación. Imagino al instante la emoción en los ojos de ambos al descubrir cosas nuevas, visitar nuevos lugares y hacer cosas divertidas juntos.
Pero, a veces, viajar con tu pareja puede ser frustrante. Por ejemplo, supongamos que a tu pareja le interesa visitar un lugar y a ti otro.
¿Qué haría usted? ¿Comprometerías o les obligarías a hacer lo que deseas?
Si habéis viajado juntos con éxito, sabéis cómo afrontar ésta y otras situaciones similares, y no hay nada de lo que debáis preocuparos.
Sois completamente honestos el uno con el otro
La sinceridad es la mejor política. Seguro que has oído este dicho muchas veces y por algo es tan popular. La sinceridad y la confianza son las dos cosas más importantes en toda relación.
Piensa si tienes algún secreto financiero como deudas, préstamos estudiantiles, etc., o algún otro secreto que tu pareja deba conocer.
Mucha gente piensa: Oh, esto no es gran cosa y no es asunto de mi compañero. Pero bueno, viviréis juntos y, en ese caso, también es asunto suyo.
Si tiene dificultades para ser sincero con su pareja, o si tiene otros problemas de pareja, considere la posibilidad de acudir a un terapeuta.
No te sientes presionado para vivir juntos
Hay muchos factores que pueden hacer que os sintáis presionados a iros a vivir juntos, como el bloqueo mundial debido al coronavirus, vuestras finanzas y otros.
A veces, tu pareja puede ser quien te presione para compartir espacio vital.
Si no sientes ningún tipo de presión para irte a vivir juntos, es una buena señal. Significa que quieres hacerlo porque crees que es lo correcto y no porque TIENES QUE HACERLO.
No hay nada peor que tomar decisiones sobre la marcha. Sea lo que sea lo que estés experimentando en la vida en este momento, debes saber que irse a vivir juntos no es la solución a tus problemas personales o de pareja.
Has tenido tu primera gran discusión (y has sobrevivido)
Cuando se trata de citas y relaciones, una cosa es segura: no experimentarás tu primera discusión en tu primera cita, ni en la segunda, ni siquiera al cabo de unas semanas.
Pasaréis mucho tiempo juntos antes de que surja la primera gran discusión.
Y, cuando ocurra, querrás asegurarte de que eres capaz de sobrevivir a ella y afrontarla de forma saludable.
Vivir juntos significa enfrentarse a muchas discusiones a diario (o semanalmente), así que es bueno saber que esto no afectará a la calidad de tu relación.
Puede que a tu pareja le guste ducharse durante más tiempo, lo que puede molestarte, sobre todo cuando tienes prisa. O tiene hábitos de cuidado personal diferentes que a ti te resultan molestos.
Discutir una y otra vez por las mismas cosas no es la solución. Así que, antes de empezar a buscar una nueva vivienda, pregúntate una de las cuestiones más importantes preguntas sobre relaciones:
¿Tenéis estilos de discusión saludables? ¿Discuten de forma sana o de forma tóxica?
No escondes tus problemas de pareja bajo la alfombra
¿Cómo sabes que estás preparado para irte a vivir con tu pareja? Bueno, si no escondes los problemas de tu relación debajo de la alfombra, sino que te enfrentas a ellos, entonces definitivamente estás preparado para la convivencia con tu pareja.
Muchas parejas creen que negarse a reconocer sus problemas hará que desaparezcan por arte de magia. Esto nunca ocurre.
Si no abordas los problemas de tu relación, inconscientemente estás ayudando a que crezcan más y más hasta que exploten y se conviertan en una gran discusión tóxica. No dejes que eso ocurra.
Si estás dispuesto a ser abierto y sincero con todo, no tienes de qué preocuparte.
Véase también: Guía sobre cómo afrontar los estados de ánimo difíciles en una relación
Has tenido una conversación sobre tu futuro
¿Has hablado con tu pareja del gran paso que vais a dar: iros a vivir juntos? La decisión de vivir juntos no es algo que se tome por impulso.
Antes de vivir juntos, tenéis que mantener una conversación sobre vuestro futuro y vuestras expectativas de convivencia.
¿Por qué me voy a vivir con otra persona? ¿Qué significa para mí vivir juntos? ¿Cuáles son nuestros planes de futuro?
Estas son las preguntas que debes hacerte. Si tú o tu pareja queréis empezar a vivir juntos por motivos equivocados, entonces es mejor hablarlo a tiempo.
Tienes un plan B
Mucha gente piensa que tener una estrategia de salida o un plan B es para personas pesimistas. Yo no lo veo así, y he aquí por qué.
Por mucho que os queráis, no hay garantía de que no os enfrentéis a algunas dificultades en vuestra relación.
Problemas de pareja que no tienen arreglo puede arruinar incluso las relaciones más sólidas.
Cuando eso ocurre, es bueno saber que tienes un plan B. Habla con tu pareja sobre lo que pasaría en caso de que las cosas no funcionaran.
Quizá tú o tu pareja os quedéis en el piso o uno de los dos decida ahorrar algo de dinero para comprar uno nuevo.
Lo peor que te puede pasar es quedarte atrapado en el mismo piso sólo porque no tienes otras opciones debido a un mal plan financiero.
¿Estáis preparados para iros a vivir juntos o necesitáis más tiempo para tomar una decisión?
Entonces, ¿cuándo es demasiado pronto para irse a vivir con tu nueva pareja? Decidir cuándo es el momento adecuado para empezar a convivir con tu pareja es algo individual.
Algunas parejas están preparadas a los pocos meses de estar juntas, mientras que otras (por diversas razones) necesitan más tiempo para tomar esa decisión.
Si estás dudando si irte a vivir con tu pareja, tienes que ser sincero contigo mismo y analizar todos los aspectos de tu relación.
Tienes que centrarte en la razón o razones por las que te sientes inseguro sobre ese traslado. Es perfectamente normal que necesites más tiempo para pensar en todos los pros y los contras de una decisión tan importante.
Al fin y al cabo, la convivencia no es algo que pueda decidirse de la noche a la mañana. Hay muchos factores que pueden influir en la calidad de tu relación y convivencia.
Si los dos sois responsables, estáis dispuestos a llegar a acuerdos y a afrontar los problemas cotidianos en lugar de esconderlos debajo de la alfombra, podéis estar seguros de que iros a vivir juntos es la decisión correcta.