Esta es una de las cosas que te niegas a admitir incluso a ti misma, pero cuando te quitas las gafas de sol color de rosa y empiezas a observar las cosas con realismo, ves que este hombre apenas se esfuerza en vuestra relación.
Cuando te pones a pensarlo, eres el único que lo intenta la mayor parte del tiempo.
Tú eres la única que lucha por esta relación y, sin duda, significa mucho más para ti que para él.
Es tu pareja y crees que es natural que sea tu prioridad. Pero es como si él no sintiera lo mismo por ti.
Es como si esta relación simplemente no fuera tan importante para él como lo es para ti.
Es más que obvio que tú eres el que más quiere en esta relación y con el tiempo, te has acostumbrado a que las cosas sean así.
Pero cuando te pones a pensarlo, empiezas a preguntarte si este tío te quiere de verdad.