Taurus
Podría pensarse que la terquedad de este signo se interpondría en su camino para hacerse adicto a algo. Pero no es así. Cuando desean algo con todas sus fuerzas, nada les impide conseguirlo, y es entonces cuando la terquedad entra en acción.
Lo más probable es que Tauro se vuelva adicto a la comida o la bebida. Simplemente no pueden resistirse a una buena cena. Café, helados, aperitivos y comidas... todas estas son las cosas por las que Tauro siente debilidad. Es su forma de lidiar con el estrés.
Libra
A los Libra les gusta tener cosas bonitas y no pueden pasar por un escaparate sin comprar algo a lo que le han echado el ojo. Les gusta ser superiores a los demás y tener cosas que los demás no tienen. Por eso van a gastarse todo el dinero que haga falta para estar guapos y hacerse notar.
Otra de sus adicciones es ligar con éxito. Cuando ven que pueden tener a la persona que desean, entonces han terminado.
Leo
Los Leo se vuelven adictos a la gente. Les gusta estar rodeados de gente para elevar su ego. Los cumplidos sobre su aspecto son algo sin lo que no pueden vivir.
También son muy posesivos. Si no les perteneces sólo a ellos, su afecto se convierte en celos. Esto puede llegar a ser aterrador, porque un Leo luchará por tu atención con todo lo que tiene, lo que también se percibe como pegajoso.
Piscis
Ocupan un lugar destacado en la lista de adicciones, pero sus adicciones no siempre se centran en cosas tangibles, como ocurre con otros signos. Se vuelven adictos a los sentimientos y emociones, especialmente a los suyos propios. Lo más frecuente es que les guste ganarse la compasión de los demás.
Como son tan emocionales y a menudo oscuros, cualquier problema que se les presente, se sentarán en un rincón oscuro de una habitación con un vaso de alcohol en la mano. De esta forma suprimen los sentimientos negativos y se hacen olvidar de sus problemas.
Escorpio
Por supuesto, el signo más adictivo del zodiaco es Escorpio. Sea lo que sea lo que hayan planeado dejar, casi nunca lo conseguirán, o les llevará mucho tiempo incluso intentar dejarlo.
Una de sus mayores adicciones es ligar con chicas o chicos guapos en el bar. Tienen un extraño apetito sexual que necesitan satisfacer. Es una adicción; no es que sean malos, al menos no tanto.