Así que has estado jugando juegos coquetos con alguien desde hace tiempo y, en este proceso, has desarrollado sentimientos más profundos hacia esa persona.
Esto no significa que ames a esa persona, pero sí que te gustaría intentarlo con ella, y aquí tienes exactamente cómo hacerlo de forma eficaz.
Decide qué es lo que quieres
Cuando te encuentras en este tipo de situación, lo primero que tienes que hacer es averiguar qué es lo que realmente quieres.
¿Realmente disfrutas de esta situación de flirteo que no pasa a otra cosa y es posible que seas tú el que está saboteando esta posible relación porque eres lo suficientemente feliz con la situación tal y como está?
Si esto es cierto, no hay nada malo en ello porque es posible que subconscientemente sepas que ahora no estás preparado para una relación.
Pero si estás seguro de que quieres que ese flirteo se convierta en algo más, tienes que decidir qué es eso más que quieres.
¿Quieres una relación de verdad o sólo esperas que sea una aventura casual?
Tenga confianza
Después de saber qué es lo que quieres, el siguiente paso es aumentar su propia confianza.
Tienes que demostrar que no tienes dudas sobre qué y a quién quieres y, lo que es aún más importante, tienes que demostrar que no tienes miedo de conseguirlo.
Pero para que este método sea completamente eficaz, no puedes limitarte a intentar convencer a la otra persona de ello: tienes que creértelo tú mismo.
Es hora de dejar de compararte con otras personas y de dejar de tener miedo o vergüenza de dar el primer paso y de intentar llevar esto, lo que está pasando entre vosotros dos, al siguiente nivel.
No te voy a mentir: siempre existe la posibilidad de que te rechacen y de que acabes decepcionado, pero nunca sabrás lo que puede pasar hasta que lo intentes, ¿verdad?
Deja que tu lenguaje corporal haga el trabajo
Lo que quizá no sepa es que nuestro signos del lenguaje corporal a menudo dicen a los demás mucho más que nuestra propia comunicación verbal. Así que es algo que sin duda debes aprovechar.
Eso significa que no puedes limitarte a decirle a esa persona que te gusta: primero tienes que demostrárselo.
Asegúrate de estar cerca de ella y aprovecha cualquier oportunidad para tocarla. Cuando hables con esta persona, no pasa nada si le tocas la mano o te sientas muy cerca de ella.
Asegúrate de mantener siempre el contacto visual con ellos y no te avergüences de mirarles profundamente a los ojos. Y, por supuesto, no te olvides nunca de sonreír.
Esto no significa que debas estar siempre al lado de esta persona ni que debas asfixiarla, porque eso te hará parecer demasiado pegajoso y necesitado.
Tiempo a solas
Cuando quieras que tu flirteo pase al siguiente nivel, nunca podrás hacerlo cuando tú y el objeto de tu afecto estéis con mucha gente. Por lo tanto, lo que tienes que hacer es tener un poco de tiempo de uno-a-uno con esta persona.
Puedes simplemente pedirles que queden, sin describirlo como una cita real. Si te da vergüenza hacerlo directamente, siempre puedes buscar una excusa para pasar un rato con esa persona.
Si los dos sois compañeros de trabajo, siempre puedes pedirles que te ayuden con alguna cosa del trabajo fuera del horario laboral o algo así.
Haz lo que sea necesario para pasar tiempo a solas con esa persona, porque sólo así tendrás la oportunidad de empezar a salir con ella.
Sea directo
Cuando hayas cumplido todo lo anterior, es hora del siguiente paso, el más importante. Es hora de que seas lo más directo posible, sin señales ni mensajes contradictorios.
No estoy diciendo que tengas que decirle a esa persona que la quieres ni que tengas que darle mucha importancia, haciendo grandes gestos románticos, porque eso sólo conseguirá ahuyentarla. Basta con decirle que te gusta o pedirle una cita.
También puedes intentar besarles cuando sea el momento adecuado, lo que haga que tus intenciones sean obvias y claras.