La mayoría de la gente asume que las chicas suelen ser las que les gusta jugando duro y a los que les gustan los juegos.
Sin embargo, hay muchos reyes del drama a los que les gusta más la persecución que la captura.
Así que, si crees que el chico con el que estás tratando es uno de estos hombres, lee estas señales y comprueba por ti misma si realmente le gustas o sólo disfruta con la persecución.
Su ego es frágil
Una de las primeras señales de que no le gustas a un chico con el que estás liada, sino que sólo disfruta con la persecución, es su frágil ego.
Sin embargo, el hecho de que su ego pueda quebrarse con facilidad es algo que oculta cuidadosamente y algo que probablemente no veas a primera vista.
Sin embargo, si observas las cosas de cerca, verás que este hombre se deja insultar con facilidad y que antepone su orgullo a sus sentimientos.
Verás que le cuesta aceptar las críticas y que hará todo lo que esté en su mano para parecer un gran hombre delante de todos, incluido tú.
Siempre le preocupa pasar vergüenza delante de los demás y que alguien piense que no es suficiente.
La verdad es que las inseguridades y la baja autoestima de este tipo lo controlan por completo.
Aunque sienta algo más profundo por ti, nunca expondrá su lado vulnerable porque le aterroriza que le hagan daño o le rechacen, algo que su ego no podría soportar.
Sólo te quiere cuando no puede tenerte
Lo más importante que puede ayudarte a ver las verdaderas intenciones de un hombre es su forma de actuar cuando sabe que te corresponde.
¿Se esfuerza aún más por mantener vivo tu amor por él o actúa como si su trabajo estuviera hecho y no tuviera que esforzarse más por ti ahora que te ha conquistado?
Un hombre inmaduro sólo te querrá cuando no pueda tenerte.
Mientras intenta meterse en tu piel y en tus pantalones, finge ser ese hombre perfecto de tus sueños que puede darte todo lo que necesitas.
Él te bombardea con amorTe hace promesas y finge ser alguien que no es sólo para gustarte más.
Sin embargo, en cuanto se da cuenta de que te has enamorado de él, cambia radicalmente. De repente, se vuelve frío y distante.
Sus mensajes de buenos días y buenas noches, sus cumplidos y su esfuerzo desaparecen de la noche a la mañana.
Sin más, pierde todo su interés y se convierte en el hombre que nunca imaginaste que podría ser.
Por desgracia, esta farsa no termina aquí porque en el momento en que ve que su comportamiento te aleja de él, este tipo cambia milagrosamente y vuelve a ser el hombre que era al principio de la historia.
Por supuesto, de esta forma consigue volverte loca y, antes de que te des cuenta, estás enganchada a él y a este interminable círculo de juegos fríos y calientes al que te ha arrastrado.
No sabes a qué atenerte con él.
Cuando te pones a pensarlo, nunca sabes exactamente a qué atenerte con su chico.
¿Vino para quedarse en tu vida o sólo te ve como algo temporal?
¿Realmente siente algo por ti o sólo ha estado jugando todo este tiempo?
A pesar de todos tus esfuerzos por arreglar las cosas con él, lo cierto es que este hombre no es consecuente con vuestra relación.
Hay momentos en los que estás segura de su amor, momentos en los que te sigue demostrando que puedes contar con él y en los que siempre está cerca.
Por otro lado, también hay momentos en los que no aparece por ninguna parte, en los que actúa como si le importaras un bledo y como si nunca hubieras sido una parte importante de su vida.
Juega juegos mentales
Nada es sencillo cuando se trata de este tipo.
Nunca tiene claras sus emociones, y no puede evitar enviarte un montón de señales contradictorias.
Lo que quizá no sepas es que a ese chico le excita que pases noches en vela releyendo sus mensajes, tratando de encontrar el significado oculto tras sus palabras y acciones, descifrando y descifrando las señales que te envía.
La verdad es que en realidad te está engañando y perdiendo el tiempo mientras finge ser misterioso.
No quiere comprometerse pero no permite que otro te tenga
Aunque el tipo del que estamos hablando no quiera etiquetar las cosas entre vosotros y se niegue a comprometerse, al mismo tiempo muestra signos de celos.
Cada vez que ve que algún otro hombre podría llamar tu atención, aparece de repente y hace todo lo que está en su mano para que vuelvas a centrarte en él.
Con el tiempo, has empezado a confundir este comportamiento suyo con amor, cuando en realidad es todo menos eso.
La verdad es que sólo quiere saber que siempre estás disponible.
El hecho de que pueda tenerte siempre que quiera le sube el ego y le hace sentirse mejor consigo mismo.
Sin embargo, recuerda que lo último que deberías permitir es que alguien te trate como su plan de respaldo, por muy loca que estés por él.