La verdad es que este tipo te ha estado tratando como una mierda durante años.
Que no es ni de lejos el hombre que te mereces y que nunca te trató como debería.
Si lo piensas bien, desde el primer día no has sabido a qué atenerte con este hombre.
¿Eres su amiga con derecho a roce, no eres más que una aventura ocasional o eres su novia?
A pesar de todos tus esfuerzos por hacer las cosas oficiales y definir vuestra relación, él nunca quiso etiquetarla realmente.
Nunca ha estado totalmente comprometido contigo y eso te ha estado comiendo viva.
No hay duda de una cosa: todo esto es exclusivamente culpa suya.
Tú no tienes la culpa de que este gilipollas no se decida y se ponga las pilas.
Sin embargo, supongo que no puedes evitar preguntarte por qué no puedes ser suficiente para este hombre.
¿Qué es lo que no tienes y por qué no puede quererte lo suficiente?
¿Eres tú el que ha estado haciendo algo mal todo este tiempo?
¿Por qué este hombre no puede tener la decencia de elegirte?
Bueno, déjame decirte una cosa: no debes culparte por las acciones de este imbécil y por su maltrato.
Créeme, no hay nada que puedas hacer para que cambie de actitud o para que se comprometa contigo.
Después de todo, debe ser consciente de que nunca puedes hacer que un chico te ame hasta que él mismo decida hacerlo.
No obstante, lo que deberías reprocharte es haberle dejado jugar contigo todo este tiempo.
Por permitirle malgastar años de tu vida, por dejar que te trate como no te mereces y por conformarte con alguien a quien le importas un bledo.
Tú eres la única responsable de darle luz verde a este hombre para que siga haciéndote daño y rompiéndote el corazón.
El único culpable de que aún tenga un lugar en tu corazón, después de todo lo que ha hecho.
Seamos sinceros: eres una chica lista y no existe la posibilidad de que no veas quién es realmente este chico.
Sé que piensas que sólo necesita una oportunidad más y que un día de estos, las cosas se pondrán en su sitio.
Sé que quieres creer en sus promesas vacías y que piensas que te arrepentirás de haberle dado la espalda sin darle otra oportunidad ahora que has estado tan cerca de tenerlo por completo.
Pero afrontémoslo, en el fondo sabes muy bien que nunca cambiará y que nunca se convertirá en el hombre que necesitas a tu lado.
Eres muy consciente de que te seguirá engañando mientras se lo permitas.
Sin embargo, a pesar de todo esto, a pesar de todo el dolor que te ha estado causando, eres tú quien sigue dándole infinitas segundas oportunidades.
La que sigue perdonándole y la que espera pacientemente para volver a acogerle cada vez que se aleja de ti.
Tú eres la que sigue justificándole y poniendo excusas a su comportamiento de mierda, la que sigue mintiéndose a sí misma diciendo que las cosas acabarán mejorando y la que sigue huyendo de la verdad.
La que sigue esperando que ese chico te haga feliz aunque en el fondo, eres muy consciente de que algo así no ocurrirá ni en un millón de años.
La que profundiza en sus propias heridas y cicatrices emocionales.
La que sigue aferrándose a él, sabiendo que tiene que soltarlo.
Odio ser cruel pero la verdad es que este tipo te sigue rompiendo el corazón pero eres tú la que se lo sigues permitiendo.
Sí, eres víctima de sus acciones pero también eres víctima de tu propia debilidad para mirar la verdad a los ojos y aceptarla finalmente.
La víctima de tu debilidad para marcar la diferencia en tu vida y alejarte de alguien que nunca podrá darte el amor que mereces.
Así que, por favor, en lugar de esperar a que este hombre entre en razón, entiende que eres tú la que tiene que recomponerse.
En lugar de esperar a que finalmente te elija, elígete a ti misma por encima de su casi amor.
En lugar de esperar a que aprecie todo lo que has hecho por él, respétate a ti misma lo suficiente como para dejar su lamentable culo.
En lugar de esperar a que él empiece a valorarte, comprueba tu propia valía y date cuenta de que mereces más que alguien que no está seguro de ti.
En lugar de esperar a que te quiera de verdad, quiérete lo suficiente como para decirle tu adiós definitivo.