Eres mi deseo oculto que no me deja en paz. Siempre estás en mi mente. No importa lo que haga o donde esté, siempre estás en algún lugar de mi mente.
Sé que tú también debes sentirlo. ¿No estás harto de fingir que sólo somos amigos cuando somos mucho más? Hay tanta tensión sexual entre nosotros que siento que me estoy volviendo loca.
Quiero ser paciente, no quiero estropearlo precipitándome. Pero cada vez es más difícil. Quiero sentir tus brazos a mi alrededor. Quiero probar tus labios. Te deseo tanto.
Por ti me tiembla el cuerpo y me tiemblan las rodillas. Cada vez que estás cerca me siento como una niña pequeña que acaba de sufrir un flechazo, aunque hace mucho que superé esa etapa.
Hace años que no siento lo que siento por ti. Es como si una fuerza invisible me atrajera cada vez más hacia ti y no pudiera resistirme.
No me lo estás poniendo nada fácil. Me tranquilizo, pienso que "debe ser cosa mía". Pero tiras mis pensamientos racionales por el desagüe cuando empiezas a flirtear conmigo.
Tus ojos me siguen todo el tiempo. A veces están sobre mí, otras veces nos miramos a los ojos, encerrándolos en esta tensión.
Para poner las cosas aún más tensas, me dices algo bonito sin venir a cuento y totalmente ajeno a la conversación que acabamos de tener. Halagas mi vestuario, mi pelo, mi sonrisa e incluso mi culo.
Tienes facilidad de palabra. Tú y tu sonrisa bonita y diabólica no me dejáis en paz. Protagonizas la mayoría de mis sueños y fantasías.
Quiero que tú des el primer paso. Sé que yo también podría hacerlo. Pero hay algo dentro de mí que me dice que no lo haga. Hay algo que me dice que te dé tiempo para venir a mí.
Quiero que hagas el primer movimiento porque quiero que amor de la vieja escuela. Quiero sentirme femenina. No quiero ser la que mueve todos los hilos y hace todos los esfuerzos. Ahora quiero algo diferente.
Quiero que me cortejes. Quiero que seas un hombre que no huye de lo que siente. Quiero que seas tú quien reconozca esta química entre nosotros y esté dispuesto a ver si hay algo más.
Yo también quiero saberlo. Quiero saber si esto es sólo lujuria o si podríamos darle más sentido. Quiero saber conoce tu verdadero yo. Quiero saber lo que escondes en tu interior. Quiero hablar contigo de cosas serias y de cosas dulces.
Quiero sentir tus manos sobre mí. Quiero arrancarte la ropa. Quiero que nuestra piel se toque. Quiero embriagarme con el olor de tu piel. Quiero sentir tus labios apretados sobre los míos.
Quiero ser tu todo. Quiero ser tu amante y tu mejor amigo.
Te deseo tanto que no sé qué hacer. Tengo tanto miedo de hacer algo mal. Tengo miedo de que nuestro coqueteo terminará si me atrevo a hacer un movimiento. Tengo miedo de que todo termine o siga igual si me quedo sentada sin hacer nada.
De cualquier manera, parece que estoy en desventaja. Pero si voy a ti, mataré la fantasía. Mataré mi sueño de tener ese amor de la vieja escuela. Terminaré decepcionado.
Por eso cuento contigo. Por eso me aferro a la esperanza de que vengas a mí y me digas que te gusto tanto como a mí. Voy a esperar un poco más, pero no demasiado porque creo que la espera merece la pena.