Este artículo trata de las mujeres que sufren violencia. Ninguna mujer debería sufrirla. En los medios de comunicación, en las redes sociales, en los medios de comunicación, en el periódico, leerás o verás al menos un caso de violencia cada día. La mayoría de las veces, leemos sobre la violencia en la familia. La violencia no es sólo contacto físico, sino también violencia psicológica.
Las mujeres sufren la violencia en silencio, sobre todo por miedo o por los niños. Nadie habla de ello, por vergüenza; ¿qué dirán tus vecinos, tus amigos, tu familia? Es un gran problema, porque la gente juzga.
Muy a menudo oímos a alguien decir: "Es culpa suya, ella se lo ha buscado". Por eso, las mujeres prefieren sufrir en silencio y ocultarlo con maquillaje, una sonrisa falsa, etc. Eso está mal. La gente siempre será así, siempre juzgará, pero debemos pensar en nosotras mismas.
Otra razón para su silencio es el miedo. La mayoría de las mujeres piensan que si dicen algo, la cosa irá a peor. Cuando ocurre la primera vez, ya sea violencia física o psicológica, hay que reaccionar inmediatamente. Todos pensamos que sólo ha ocurrido una vez y que no volverá a ocurrir. Pero si ocurrió una vez y nadie reaccionó, lo más probable es que se repita.
Por eso, lo más importante es reaccionar inmediatamente. Hoy existen casas seguras que ayudan a las mujeres en situaciones así. Hay muchos casos de mujeres que fueron víctimas de la violencia y se pusieron en contacto con la policía o acudieron a un piso franco, y eso les salvó la vida.
Las mujeres deben ser fuertes y decir no a la violencia. No tengas miedo, eres mujer y eres fuerte. Mereces dirigir tu vida como quieras.