Quiero liberarme de mi pasadode mis miedos. Quiero perdonarme por todos los errores cometidos, aunque ninguno de ellos haya sido mío.
Quiero que todos me entiendan cuando digo que no puedo entregarme a nadie por completo.
Quiero admitir que no soy fuerte. Quiero admitir que soy vulnerable. Quiero admitir que estoy completamente bien con eso.
Quiero seguir adelante y luchar sin esas cadenas de hierro enredadas en mi corazón y mi mente.
Lo menos que puedo decirte es...
Siento haberlo intentado tanto.
Siento haber dejado pasar tantas cosas.
Siento haberte perdonado la primera vez.
Siento que me hayas perdonado.
Siento haberme quedado tanto tiempo.
Siento no haber visto lo que estaba en juego, al menos un poco antes...
Siento haber dejado que esa relación tóxica tuviera tal impacto en mí que fui incapaz de pensar o de recomponerme durante meses.
Durante tanto tiempo, he estado soportando tus frustraciones y el hecho de que fueras infeliz con tu vida. Y ahora, cuando por fin soy libre, no encuentro el camino correcto por el que caminar a causa de mis propias frustraciones, porque tú veías cosas que no existían y porque soy incapaz de confiar en nadie.
El tiempo es una mierda. Ha pasado tanto tiempo y va a pasar, pero aún así, mis heridas no sanarán tan fácilmente. No sanarán porque yo, desafortunadamente, te amé.
Siento que me rompieras emocionalmente. Siento haber empezado a confiar en cada palabra que decías.
Empecé a creer en las cosas que decías de mí, en lo que significaba para ti y en la pobre y débil silueta de mujer que era para ti.
Siento que hayas dicho sólo lo peor de mí mientras yo hacía exactamente lo contrario.
Siento que otros compraran tu historia. Siento no haber hecho nada al respecto porque sólo quería gustar a tus amigos.
Siento que hayas exagerado cada una de nuestras historias.
Siento no haberte dejado correr en brazos de otra mujer.
Siento no haber soportado tus amenazas.
Siento haberte dejado poner límites.
Siento no haberte permitido esconderme y hacerme prisionero en mi propia casa.
Siento no haber visto que eras malo para mí.
Lamento que hayas encontrado la fuerza para seguir insultándome. Día tras día, una y otra vez...
Siento haber dejado que tus palabras me hirieran.
Siento haber llegado a casa derrotado y cansado.
Siento no haberte contestado en el mismo instante en que me mandaste el mensaje.
Siento no haber contestado al teléfono en el momento en que me llamaste para saber con quién y dónde estoy.
Siento que te haya enfadado.
Siento que me gritaras todos los días porque hice algo mal. Algo que pensabas que estaba mal. Algo que no te convenía.
Siento que no haya encontrado lo que buscaba.
Siento haberme hecho creer que todo pasará, que estamos atravesando una mala racha.
Siento haber dejado que me trataras así.
Lucho cada día. Lucho con mis propios pensamientos. No quiero pensar en ti y en toda la gente que perdí cuando te perdí.
Ya me cansé de mentirme a mí misma diciéndome que todo está bien y que no estoy sufriendo. Y créeme, me duele mucho.
Supongo que todo lo que quería decir es que siento no haberme dado cuenta antes de que se me permite decirte "NO". Se me permite alejarme de ti y nunca mirar atrás.
