Una cosa es segura: rupturas nunca son fáciles, incluso cuando eres tú quien se aleja de una relación.
Dejar atrás a alguien a quien quieres, sabiendo que es algo que tienes que hacer por tu propio bien, es una de las decisiones más difíciles que tendrás que tomar.
Sin embargo, cuando pasa el dolor inicial, te das cuenta de que en realidad fue una de las mejores decisiones de tu vida y aquí tienes 4 razones por las que es así.
1. Has visto tu fuerza
Si no hubiera sido por esta ruptura, nunca habrías tenido la oportunidad de descubrir lo dura que eres en realidad y lo mucho que puedes aguantar.
Nunca habrías visto tu verdadera fuerza y todo el potencial que llevas dentro.
Dicen que la vida nos da exactamente lo que podemos aguantar.
Sin embargo, a veces suponemos erróneamente que algo a lo que podemos sobrevivir nos aplastará por completo.
Esto es exactamente lo que te pasó a ti.
Estabas convencida de que alejarte del hombre que aún amabas te mataría espiritualmente, cuando en realidad, saliste de ello más fuerte de lo que nunca has estado.
Esta ruptura te ayudó a convertirte en tu propio héroe y salvador.
Te ayudó a ver que no necesitas a nadie para completarte y que siempre puedes confiar en ti misma para ser feliz.
2. Has aprendido lo que mereces
Mientras conformarse con menos, nunca tienes la oportunidad de darte cuenta de lo que realmente mereces.
Por eso tienes que alejarte de todos los que te frenan para comprender qué es lo que realmente quieres y necesitas.
Eso es exactamente lo que has hecho: has roto con un tipo que te trataba mal y eso ha ampliado tu perspectiva.
Te ayudó a aprender qué es lo que no quieres y qué tipo de chico no está hecho para ti.
Te ayudó a ver que estás hecho para cosas más grandes y para ser un hombre mejor.
Y esto nunca habría pasado si no hubieras tomado la decisión correcta de dejarlo.
3. Has abierto un camino al tipo adecuado
Puede que ahora no lo creas, pero lo cierto es que en algún lugar existe un hombre que está destinado a ser tuyo.
Un hombre que corresponda a todo el amor que reciba de ti y que siempre te trate bien, pase lo que pase.
En algún lugar ahí fuera, te espera un hombre que es tu alma gemela y persona para siempre.
Sin embargo, nunca podrías haberte dado la oportunidad de conocer a alguien para ti, y mucho menos de tener una relación sana con él, si no hubieras terminado las cosas con tu ex.
Al fin y al cabo, nunca podrás conocer al hombre adecuado hasta que te deshagas de los equivocados.
Así que, básicamente, cuando rompiste con ese hombre de tu pasado, despejaste el camino para alguien nuevo, para un hombre de tu futuro que está a la vuelta de la esquina.
4. Puedes centrarte en ti mismo
¿Recuerdas cuánta energía has estado gastando en hacer que tu relación funcione?
¿Cuántas noches sin dormir ha pasado devanándose los sesos pensando a qué atenerse y adónde conduce todo esto?
¿Recuerdas cuánto tiempo pasaste esperando a que este tipo cambiara de actitud?
¿Para que se convierta en el hombre que te mereces y para que vuestra relación salga por fin de un punto muerto?
¿Cuánta energía has gastado en librar sus batallas e intentar ahuyentar sus demonios?
¿En intentar sacarlo del fondo y salvarlo, aunque obviamente nunca quiso ser salvado?
¿Cuánto esfuerzo unilateral has malgastado en algo que estaba condenado al fracaso desde el primer día?
Lo abrumado y consumido que estabas en este relación tóxica? ¿Cómo te estuvo drenando durante años?
Bueno, por suerte para ti, esto por fin ha llegado a su fin.
Ahora tienes todo este tiempo y energía en tus manos que puedes utilizar de la manera adecuada -para hacerte mejor persona en lugar de intentar arreglar algo que estaba roto sin remedio.
Y lo más importante, ahora tienes todo ese amor que has estado dando al hombre equivocado y puedes redirigirlo a quererte a ti misma más que nunca.