Es todo lo que un hombre puede soñar: es guapa, sexy, divertida y cae bien a todo el mundo. Sólo hay una cosa que es bastante mística en ella: no tiene a nadie, sigue soltera y lleva así un tiempo.
Puede que haya muchas personas que saldrían con ella, pero su actitud les intimida un poco y temen el rechazo, así que se quedan quietos y la admiran desde la distancia.
Sus días transcurren entre su plena dedicación al trabajo, la compañía de sus amigos y el tiempo que pasa con su familia.
Lo más precioso de ella es que, aunque todas las noches vuelve a casa a una cama fría, no se siente sola.
Se levanta cada mañana con el firme propósito de aprovechar al máximo el día, sin pensar ni por un segundo que es menos por no tener un hombre a su lado.
Cada vez que se le pregunta por su vida sentimental, encuentra la manera de eludir el tema sin dar nunca una razón concreta. Tiene muy buenas razones, pero tiende a guardárselas para sí misma.
Se rompió antes de
Amaba tan ferozmente y con tanta fuerza que nunca pensó en lo que podría ocurrirle si ese amor resultaba ser tóxico. Ni por un segundo se detuvo a pensar en ello, simplemente hizo lo que su corazón le dijo que hiciera.
Y, por desgracia, le dio su corazón a la persona equivocada. Le rompieron el corazón. Las cicatrices de su amor pasado están grabadas profundamente en su mente y en su corazón y por eso siempre está con un pie fuera cuando se trata de nuevas relaciones.
Es demasiado pronto para comprometerse con alguien de nuevo
Tiene que pasar más tiempo antes de sentirse preparada para volver a comprometerse con alguien. Aunque ha pasado tiempo, sus heridas no cicatrizaron, las cicatrices siguen ahí y se está tomando todo el tiempo que puede para volver a enamorarse de sí misma.
Está construyéndose a sí misma y aún está remendando sus pedazos rotos. Es demasiado pronto para hablar de un nuevo amor cuando aún están presentes las secuelas del anterior.
Permanecer soltera es mucho mejor que salir con alguien que no puede ver su valor.
Dar todo de sí misma parece aterrador
Ya lo hizo una vez, ¿y cómo crees que acabó? Bueno, no muy bien. Ya no es capaz de dar todo de sí misma sin contenerse.
Porque siempre quedará esa pequeña duda latente en su interior, recordándole tiempos pasados. Aún no ha superado esa historia, por eso elige seguir soltera.
Siempre es mejor esperar que destruir a otra persona con tus dudas.
En realidad le encanta su independencia
Algo bueno surgió de su ruptura. Si no hubiera estado rota, ¿habría elegido realmente permanecer soltera durante tanto tiempo y dedicar su tiempo a descubrir quién es realmente y qué es lo que realmente ama?
Ahora sabe que la independencia sienta bien, sabe lo que se siente al ser la dueña de tu propia vida. Y le encanta.
Trabaja para dar lo mejor de sí misma y no espera menos a cambio.
No quiere iniciar una relación hasta estar segura de ser la mejor versión de sí misma.
Por eso se esfuerza tanto por mejorar cada día, por crecer, por ser alguien de quien se sienta orgullosa y no espera menos a cambio.
Quiere que su hombre sea alguien que nunca deje de trabajar en sí mismo, alguien con quien pueda crecer juntos. Quiere prefiere quedarse soltera a conformarse con menos.
Sabe que estar soltera siempre es mejor que ser tratada como una mierda.
Ella lo sabe muy bien, lo ha experimentado en su propia piel.
Cuando estás soltero, puedes disfrutar de todos los aspectos de tu vida, puedes regalarte lo que tu corazón desee y lo más importante es que tu felicidad no depende de nadie.
Y nunca cambiaría nada de esto por que la dieran por sentada, la utilizaran, la manipularan o la maltrataran constantemente. Quiere respeto y no lo va a cambiar por nada en este mundo.
No le asusta esperar
El amor verdadero y puro lleva su tiempo y ella está dispuesta a esperar. Está dispuesta a esperar lo que haga falta porque ha cultivado su soltería. Está completamente feliz y satisfecha con su situación actual.
No se precipitará en una relación sólo para callar a toda esa gente. Ella va a esperar por el amor que se merece y ella va a vivir simultáneamente su vida y hacer lo mejor de ella. Porque ella puede.
La verdad es que no necesitas saber por qué prefiere mantenerse alejada. No le debe explicaciones a nadie. Hay un tiempo para cada estación y ella prefiere no precipitarse más.
Ella está tomando un día a la vez y ella está tomando todo lo que su vida tiene que ofrecer. No dudes de que una vez que encuentre lo que busca, lo alcanzará y lo cogerá.
Pero por ahora, deja de juzgarla y déjala disfrutar de su soltería.