Seguramente estarás pensando: para qué te vas a tomar la molestia de intentar conquistar a un chico, porque o le gustas o no le gustas.
Como ya sabes y habrás aprendido a estas alturas, las cosas nunca son tan fáciles.
Nada es blanco o negro y hay una gran zona gris en la que no sabes qué hacer.
Bueno, en realidad esa es la belleza de la vida. Sería muy aburrida si supieras en todo momento lo que tienes que hacer.
Si vivieras según las reglas y esas reglas trajeran exactamente los mismos resultados que te prometieron.
La emoción desaparecería y la persecución no existiría. Y creo que todos estaremos de acuerdo en que la persecución es demasiado buena para tirarla por la borda tan fácilmente.
Si un chico no demuestra enseguida que está interesado en ti, no tiene por qué significar que sea verdad.
Tal vez tiene miedo de acercarse a ti, tal vez acaba de salir de una relación terrible.
No obstante, sea cual sea el motivo de sus dudas, hay algunas formas de ayudarle a decidir qué hacer.
Pero tengo que advertirte. Utilizar estas tácticas puede ser muy útil, pero también muy perjudicial si las usas de la forma equivocada.
No presiones demasiado ni exageres porque parecerás una loca acosadora que no le deja respirar.
Juega a esto de ser "mujer" con inteligencia y decencia, y obtendrás justo el resultado que esperabas.
A veces tienes que esforzarte un poco para conseguir lo que quieres y créeme, a los chicos les encanta que les persigan, pero no lo admiten.
He aquí algunas maneras perseguir a un chico sin que lo sepa y ganarte su corazón:
1. Hacer preguntas
A nadie le gusta la gente que habla constantemente de sí misma. Vale, entiendo que estés orgulloso de ti mismo, pero dale la oportunidad de preguntar antes de decírselo.
Y para hacer las cosas más interesantes, hazle preguntas sobre su trabajo o sus aficiones y muestra interés.
Sería estupendo que realmente te interesara lo que hace y si no es así, probablemente deberías alejarte de él porque esa relación no tendrá un futuro brillante.
2. Demuéstrale que sois el uno para el otro
Esto es un poco furtivo y bordea la manipulación, pero si lo haces de la forma correcta y "dulce", seguro que lo consigues.
Por supuesto, no hace falta que te repita que si realmente crees que no quieres pasar el resto de tu vida con esa persona, no le manipules haciéndole creer que sí.
Si no está seguro de lo que quiere, déjelo hasta que sepa exactamente qué hacer.
Si de verdad creéis que estáis hechos el uno para el otro, entablad una conversación informal y llamar su atención mencionando cosas que tengáis en común. No te las inventes, porque no tiene sentido.
3. Nunca intentes cambiarle
Muchas personas cometen este error al principio de la relación. Intentan cambiar a la persona con la que están.
No hablo de pequeños cambios que no importan porque se puede vivir con ellos.
Hablo de grandes cambios: cambios en su personalidad o en su forma de pensar.
Ese tipo de pensamiento es tóxico para la relación y si intentas hacerlo, él podría frustrarse y enfadarse, y tú te sentirás terriblemente infeliz y decepcionada.
Por no hablar de que tu relación se irá al garete, tarde o temprano. O lo aceptas como es, o no te molestes en salir con él.
4. Enséñale que está bien ser vulnerable
No sólo tienes que demostrarle que el espacio que te rodea es una zona segura en la que puede ser exactamente lo que es sin tener que fingir ni ponerse una máscara de macho valiente, sino que sería perfecto que también le mostraras tu lado vulnerable para que confíe en ti y en tus intenciones.
Demuéstrale que no le juzgarás ni le regañarás, pero que siempre se lo dirás si crees que ha hecho algo mal, pero no para humillarle, sino para ayudarle.
Muéstrale que tiene un hombro sobre el que llorar porque todo el mundo necesita uno. Todo el mundo llora.
5. Hacerle reír
La risa lo cura todo. No hay nada mejor que esa sensación positiva cuando te levantas por la mañana y el día empieza entre risas o alguien te regala una sonrisa de camino al trabajo o al colegio.
¿No te alegra eso el día? Cuéntale un chiste estúpido, avergüénzate si es necesario, pero hazle reír.
Le hará sentirse mejor y quedará grabado en su memoria, porque las cosas positivas son las que permanecen más tiempo en nuestra mente.
6. Aceptar a sus amigos y familiares
No puedes elegir a tu familia ni a la de tu novio, y por eso lo mejor que puedes hacer es hacer las paces con el hecho de que existen y no hay nada que puedas hacer al respecto.
Si no te gusta su familia, mala suerte, tienes que aguantarlos, y si te gustan, entonces el problema se resuelve solo.
Y en cuanto a los amigos, tienes que entender que sus amigos estaban a su lado mucho antes de que tú entraras en escena.
Son como su familia, gente a la que quiere y respeta. Si no respetas a la gente que él respeta, automáticamente no le respetas a él.
Si no te gustan, demuéstrale que puedes vivir con el hecho de que salga con ellos y nunca se lo prohíbas porque si lo haces, se acabó.
Y si te gustan de verdad, demuéstraselo también, pero no te pases porque podría ponerse un poco celoso si intentas establecer una relación demasiado estrecha con sus amigos.
7. Conseguir que cambie de opinión sobre algo
Nada le impresionará más que esto, sobre todo si es testarudo y no quiere escuchar las sugerencias de nadie sobre nada.
Todos tenemos cosas que nos gustan. Él tiene algo que le hace feliz y tú también.
Puede que tengas algunas cosas iguales o parecidas que te hacen feliz, pero no todo.
Intenta convencerle para que pruebe tu comida favorita o vea tu programa favorito. Quién sabe, a lo mejor le gusta y le impresionas de verdad.