Es fácil querer a alguien cuando se porta bien contigo.
Es fácil querer a la gente que te quiere. Es muy fácil enamorarse de alguien que te da lo mejor de sí mismo y está ahí para ti siempre que lo necesitas.
Nunca es un problema querer a alguien cuya risa es contagiosa o que nunca está de mal humor o deprimido.
Es lo más fácil del mundo amar a alguien que te cuida, con quien siempre puedes contar, pase lo que pase.
Pero nadie es siempre sol y arco iris.
La persona que no ha visto los días oscuros no existe. La persona a la que siempre le salen las cosas como quiere no existe.
No hay persona en este mundo a la que la vida no le haya puesto un peso encima.
Así que, cuando alguien te dice que te quiere y sólo le has mostrado tus días buenos, no es amor, es la ilusión del amor.
Te mereces a alguien que entienda tu lado mundano.
Quererte en tus mejores días nunca será un problema para nadie. Amarte cuando sonríes, amas la vida y aprovechas el día será lo más fácil que existe.
Todo el mundo querrá estar contigo en esos días.
Pero no todo el mundo se quedará cuando las cosas se pongan feas. No todo el mundo estará a tu lado cuando la vida decida derribarte.
Te mereces a alguien que entienda tu lado mundano y decida quedarse.
Lo que mucha gente no comprende es que la vida debe ponerse dura en algún momento. Las cosas deben dar un giro y probablemente te caerás unas cuantas veces antes de brillar.
Así son las cosas y no se puede hacer mucho para cambiarlas, excepto aceptarlas y sacarles el máximo partido.
Puedes perder tu trabajo. La depresión puede venir con todas sus maletas e instalarse en tu cabeza sin el menor signo de irse.
Puedes perder a alguien cercano a tu corazón o simplemente puedes hartarte de la vida que llevas ahora y desear tener más. De hecho, puede pasar cualquier cosa.
Puede que te impida ser la persona más amable y te haga olvidar lo feliz que fuiste una vez. Los días brillantes podrían desaparecer un día y lo único que te quedaría sería oscuridad.
No pasa nada, todos hemos pasado por eso al menos una vez.
Pero tienes que entender que sólo aquellos que están a tu lado en tus noches más oscuras son aquellos con los que merece la pena pasar tus días más brillantes.
Con suerte, en esos momentos más oscuros, verás quién es "tu persona". En esos momentos más oscuros, serás capaz de diferenciar entre los que aman la idea de ti y de los que te quieren entera.
Porque los que te quieren de verdad por lo que eres, que ama incluso en tus días más oscurosson los que se quedan, y eso es lo que te mereces.
Te mereces a alguien que vea tu lado oscuro y decida quedarse.
Cuando te sientes la menos atractiva de tu vida, mereces tener a alguien que te vea como la persona más bella de este mundo.
Te mereces a alguien que vea tus grietas y no huya de ellas. Te mereces a alguien que vea tus grietas y no las considere feas, sino espacios en los que verter su amor.
Te mereces a alguien que no espere que seas perfecta, sino que te acepte con todas tus imperfecciones y te quiera a pesar de todo.
Te mereces a alguien que no te crea cuando dices que no eres lo bastante bueno.
Te mereces a alguien que diga adiós a tus inseguridades y que te haga arrepentirte de dudar de ti misma.
Cuando tu depresión sale a flote, te mereces a alguien que no te vea como un loco.
Te mereces a alguien que no te deje ahogarte, sino alguien que te enseñe a nadar de nuevo.
Cuando decides rendirte, te mereces a alguien que te empuje hacia adelante. Y cuando decidas alejarlo, te mereces a alguien que te devuelva el empujón y luche por quedarse.
Te mereces a alguien que sabrá que en realidad no quieres que se vaya, pero de alguna manera estás haciendo cosas irracionales, así que decidirá esperar a que pase la tormenta.
Te mereces a alguien que ame lo mundano de ti. Alguien que entienda que has tenido un día o una semana duros. Alguien que entienda que no tienes ganas de salir de la cama.
Alguien que entienda que no te apetece arreglarte, alisarte el pelo y maquillarte, pero que siga viéndote tan guapa como si estuvieras lista para un viernes por la noche en la discoteca.
Te mereces de verdad a alguien que ame tanto a tu yo desordenado como a tu yo de los "días más brillantes". Porque sólo entonces sabrás que el amor es completo.
Véase también: Al hombre que debió marcharse: gracias por quedarse
Y cuando eres el más difícil de amar, te mereces a alguien que te ame con más fuerza.
Así que no te conformes con menos. Espera a alguien que te quiera por lo que eres, no por una ilusión de ti.
Espera a alguien que alivie tus días oscuros y con quien esperes los brillantes.
Este tipo existe y un día, si no te conformas, lo conocerás. Espera a este chico porque un día te alegrarás de haberlo hecho.