No te arrepientas de nada. Por fin eres libre. Sé que duele en este momento. Sé que parece que no podrás enamorarte nunca más. Lo sé porque he estado donde tú estás. Me han roto antes y he dejado al hombre que me rompió, pensando que estaba cometiendo un error. Todo mi cuerpo quería volver con él, pero mi mente sabía que era una idea terrible esperar el hombre que me rompió para ayudarme a sanar.
Créeme, estarás bien. Has huido de las garras del hombre que te mantuvo secuestrada en un juego constante que confundiste con amor. No eras una jugadora, eras una figura que él manipuló desde el momento en que vio que te habías enamorado de él. Pero hiciera lo que hiciera, supiste ver a través de su cara de póquer y pudiste escapar.
Eres libre. Por fin eres libre.
Estás libre del dolor y la miseria. Sé que parece difícil en este momento porque tus pedazos rotos duelen como el infierno. Pero recuerda la miseria por la que te hizo pasar. Recuerda cuánto ansiabas ser amada por él. Ansiabas su afecto y un toque suave. No obtuviste nada de eso, sólo seguías sufriendo más y más.
Estás libre de sus suposiciones y sus celos. Que tuvieras compañeros de trabajo y amigos no significa que fueras a engañarle. Pero, seamos honestos. La forma en que actuaba cuando hablabas con otro hombre era inaceptable. Hacía berrinches y te insultaba, sin detenerse ni un minuto a escuchar lo que tenías que decir.
Eres libre de ser tú mismo. Nunca más habrá alguien que te diga que tu forma de ser no es suficiente o que tienes que cambiar. Por fin eres libre de ser como eres. Puedes reír tan alto como quieras y ponerte las cosas más coloridas que te hagan sentir cómoda. Esto es lo que significa ser libre-tener la capacidad de ser como realmente eres.
Eres libre para convertirte en una versión mejor de ti mismo. No se acercará a ti esperando masacrar tus ambiciones y tu motivación para triunfar. Ahora mismo tienes todos los hilos en tus manos y ése es el primer paso para ser mejor. Este es el momento adecuado para retomar esas aficiones que dejaste atrás por su culpa, el momento adecuado para hacer todas las cosas que te aportan alegría y felicidad.
Eres libre para amar. Eres completamente libre para amar al mundo, para amarte a ti misma, para amar tu vida. Puedes amar a quien quieras y nunca más preocuparte si tu amor va a ser maltratado porque sabrás por lo que pasaste, y que no volverás a dejarte caer por ese tipo de hombre.
Eres libre de encontrar a tu persona para siempre. Si quieres, claro. Has dejado atrás todo lo que te hacía sentir triste, enfadada y desgraciada, y tienes la posibilidad de empezar una vida totalmente nueva. Si eso significa encontrar una nueva pareja que te haga sentir querida y apreciada, ¡que así sea! Ya no hay nada que te frene.
Eres libre para empezar una nueva vida. Empezar de nuevo. Recoger los pedazos y seguir adelante con todo lo que te ha sucedido y que ya no te sirve. Eres libre para empezar de nuevo y para nunca vuelvas a mirar a tu pasado.
Eres libre de ser feliz. ¿No es la libertad lo que se necesita para ser verdaderamente feliz? Libertad. Eres libre de sus garras, eres libre de sus juegos mentales y eres libre de él.