Puede que ni siquiera seas consciente de ello. Puede que pienses que todo es culpa tuya.
Cuando, en realidad, está jugando peligrosamente con tu mente. Es él quien tiene sus dedos enredados en tu inseguridad.
Él es el responsable de que te sientas como te sientes.
Piénsalo: antes no eras esta persona. Antes sonreías. Solías disfrutar de las cosas de la vida. Pero, ahora todo eso ha desaparecido, y él es quien te lo ha quitado.
Jugaba con tu mente para controlarte y convertirte en su marioneta obediente.
Quería estar al mando de vuestra relación apartándote de todas las decisiones y quitándote el derecho a decir algo o a tener cualquier tipo de aportación en general.
¡Tienes que ponerle fin! Detén esta locura que ocurre a tu alrededor.
La vida es demasiado corta para pasarla con un gilipollas manipulador al que le importan un bledo tus sentimientos.
Probablemente emocionalmente dañado e inseguro, por lo que está buscando el control en su relación.
Por eso se comporta como un imbécil manipulador, porque en el fondo es inseguro.
Pero eso no es excusa para ese comportamiento. El hecho de que sea inseguro no puede justificar su comportamiento y el hecho de que te haya convertido en una mujer insegura y frustrada, a la que lavan el cerebro a diario.
Eso no justifica cómo destruyó tu autoestima y su amor propio. Hizo todo eso sólo para sentirse mejor. Lo siento, pero eso no es amor, es comportamiento psicopático.
Si sospechas que tu mente ha sido manipulada, lee estos juegos mentales para ver si tu chico te está haciendo esto y si es así, simplemente corre hacia las colinas y no mires atrás.
1. El juego de la culpa
Te culpa de todo lo que va mal. La culpa es un comportamiento tóxico que le da un impulso de ego porque consigue la atención de sí mismo, por lo que se siente mejor y te sientes como una mierda.
No quiere reconocer sus errores, así que te obliga a cargar con la culpa en vez de a él.
Y lo más triste es que esto te afecta. Al cabo de un tiempo, dejas de luchar contra ello porque no puedes hacer nada. De alguna manera, siempre eres tú el culpable.
Así que dejas de luchar y, al cabo de un tiempo, empiezas a creer en él. Él plantó esa semilla en tu cabeza y la ha alimentado hasta que ha crecido y te ha obligado a creer que es verdad.
2. El juego de la luz de gas
Gaslighting es un término psicológico definido como: "Una forma de abuso emocional en la que el agresor manipula situaciones repetidamente para engañar a la víctima y hacer que desconfíe de su propia memoria y percepciones...".
[El término procede de la obra de teatro británica convertida en película "Luz de gas", en la que un marido intenta volver loca a su mujer utilizando una serie de trucos que la llevan a cuestionarse sus propias percepciones y su cordura".
Verás, no es culpa tuya. Nunca lo fue. Te hacía creer en cosas que no son reales para joderte la autoestima y el respeto.
Su plan era sacudir tu confianza en ti misma, para que pudieras ponerla completamente en él. Entonces, él podría hacer lo que quisiera contigo.
3. El juego de la culpa
De alguna manera hará que todo gire en torno a él. Cuando necesite algo de ti, algo que no es tan razonable, te hará sentir culpable para que se lo des.
Te chantajeará con sus emociones, sólo para que te doblegues y le des lo que quiere.
Lamentablemente, sigues sintiendo algo por él y en algún momento te da pena, así que cedes.
No tiene ningún problema en rebajarse a la posición más baja posible sólo para conseguir lo que quiere.
No tiene moral en absoluto. Por eso puede hacer esto. Por eso tiene el poder de destruirte.
Véase también: Carta abierta al hombre que me destruyó
4. El juego del cebo
Cuando os peleáis y os gritáis, él sabe dar la vuelta a la situación de repente.
Digamos que habéis estado hablando de algo en particular, habéis discutido sobre ello y, tras diez minutos de gritos, te encuentras defendiéndote mientras él te echa toda la culpa a ti.
Y no sólo eso, ya no estáis peleando por lo mismo. Ahora, estáis peleando por algo que tú fastidiaste hace un año y él nunca dejó pasar.
Además, estaba guardando tu metedura de pata específicamente para un momento como éste: un momento en el que mete la pata en algo, para poder darle la vuelta a las cosas echándote en cara tu antiguo error.
5. El juego de la montaña rusa
Este es un movimiento clásico de todo hombre tóxico en una relación. Todos ellos cambian su comportamiento en cuestión de minutos sin previo aviso, sin ninguna razón.
Eso es lo que te hace. Un día es el mejor novio que has tenido y al día siguiente es un auténtico imbécil.
Así que esto te hace preguntarte: ¿El origen del problema eres tú? ¿Has hecho algo que le haya molestado?
La respuesta es muy sencilla. No has hecho nada malo. Él sólo está tratando de manipularte para lo siguiente que quiera de ti. Ignóralo y déjalo tan pronto como puedas.