Le has enviado un mensaje hace unas horas, unos días (o quizá un mes) y aún no te ha contestado.
Cuanto más esperas, más ansioso te pones, y sientes que no puedes hacer nada más que me siento frustrado y muy confuso.
Y probablemente no sea la primera vez que le ocurre.
No importa si tienes pareja, si es tu ex, si acabáis de empezar a salir o si aún no os conocéis (en persona), siempre llegará un momento en el que esperarás junto a tu móvil su respuesta.
Siempre llegará un momento en el que pienses que no eres lo suficientemente bueno o digno de su tiempo, y siempre que empieces a sentirte así, ten en cuenta las siguientes 6 cosas que te ayudarán a superar la fase de espera.
1. "Soy digno!"
Cada vez que sientas que estás pidiendo demasiado y que no mereces que te contesten, borra esos pensamientos inmediatamente.
Recuerda que eres un ser humano valioso y que las acciones de los demás no definen tu valía.
Que no te conteste no tiene nada que ver con tu verdadero valor.
No te lo tomes como algo personal, porque hay muchas razones por las que no te ha contestado.
Tal vez se olvidó, tal vez estaba atrapado en un lugar donde no tenía señal o tal vez ha perdido su teléfono.
O tal vez es un gilipollas manipulador que sólo se hace el duro.
Sea lo que sea, sigue sin tener nada que ver contigo.
Si le impidieron contestarte, seguro que en el futuro te avisa, y si es gilipollas, aún mejor.
No volverás a saber de él ni a verlo.
2. "En lugar de esperar, elijo vivir mi vida ahora".
Es muy fácil perderse cuando se trata de esperando a que alguien te devuelva el mensaje.
Pero, en lugar de esperar, ¡deberías elegir vivir tu vida ahora!
Sal con tus amigos, tómate tu(s) bebida(s) favorita(s), relee tu libro preferido, escucha música inspiradora, dibuja, baila o lo que más te apetezca.
Lo peor que puedes hacer es esperar junto al móvil, porque eso es una receta para perder la cabeza y pensar demasiado.
¿Por qué malgastas tus valiosos segundos esperando a que te responda cuando puedes tener las dos cosas?
Puedes pasártelo como nunca mientras esperas "imaginariamente" a que te responda. (Y seguro que no te pierdes nada).
3. "Probablemente sea una razón estúpida o simple, y le estoy dando demasiadas vueltas".
Si crees que no te contesta porque ya no le gustas, porque está pensando en romper contigo o quizás porque te está engañandopiénsatelo otra vez.
¿Cuál es la probabilidad de que lo que crees que está ocurriendo sea realmente cierto?
Hay miles de razones posibles, y la mayoría de las veces es una estupidez o una simple razón la que hay detrás de que no te devuelva los mensajes.
Sé consciente de que probablemente le estás dando demasiadas vueltas, y no hace falta que te tortures porque, al final, todo saldrá bien, ¡y probablemente te reirás cuando sepas por qué no pudo contestarte!
4. "Tiene vida propia".
Entiendo que probablemente le has dicho muchas cosas importantes y te mueres por ver su reacción, pero tienes que entender que él también tiene su propia vida (igual que tú).
A menudo olvidamos que la razón por la que no nos han contestado es que tienen algo importante entre manos, que están ocupados y que simplemente no han tenido tiempo de ocuparse de los mensajes.
5. "Es normal tener que esperar a veces para recibir mensajes de texto".
Es normal tener que esperar a veces para recibir mensajes de texto (si la espera es razonable).
Cuando esperamos impacientes a que ocurra algo, los segundos se convierten en horas, y por eso probablemente tengas la sensación de que está tardando una eternidad en contestar.
Es importante ser paciente y recordar que a veces es normal esperar un SMS.
Y si nunca responde, ¡que se joda! Estarás mejor sin él.
6. "Pase lo que pase... ¡todo va a salir bien!".
Pase lo que pase, si al final te devuelve el mensaje o no, todo va a ir bien y no hay de qué preocuparse.
Como ya se ha dicho, si te devuelve el mensaje y se disculpa por haberte hecho esperar demasiado, perfecto.
Si todavía no te ha contestado y estás convencida de que no lo hará, es perfecto de nuevo porque sabes que es un gilipollas, y definitivamente no te merece.
Pase lo que pase, seguirás siendo la misma mujer fuerte y guapa que eras, así que respira hondo (deja de mirar el móvil) y vive tu vida como una jefa.
Véase también: 7 cosas que hacer cuando no te contesta