El abuso verbal es la forma más rápida de disminuir y finalmente destruir la autoestima de alguien. Los juegos mentales y el control consumen tu vida por completo y, al cabo de un tiempo, tu vida pierde hasta el último ápice de belleza que tenía.
Después de haber sido maltratado verbalmentela oscuridad desciende sobre ti. Empiezas a ver el abuso aunque el abuso no esté presente porque es el tipo de vida al que ya te has acostumbrado.
El miedo se apodera de ti y te pones en modo protección, levantando muros a tu alrededor muy altos. Todo eso por culpa de una persona pobre e insegura que tenía que hacerte sentir como una mierda, para poder tener un sentimiento de superioridad.
La verdad es que, en casi todos los casos de abuso verbal y emocional, la víctima es mucho mejor que el abusador en todos los sentidos posibles. Esa es la razón principal por la que se abusa de la víctima en primer lugar.
Un maltratador verbal es capaz de hacerte sentir que pierdes la cabeza y que desaparece cualquier sensación de estabilidad.
Antes de que entres en modo curativo, tienes que admitir que la persona con la que vives o con la que sales es un maltratador.
No te avergüences de ello. No te culpes porque no hay nada que pudieras haber hecho para evitarlo, y no hay manera de que pudieras saber que él es esa clase de persona.
Tienes que hacer las paces con el hecho de que has sufrido abusos. Sé que esos problemas y el trauma por el que has pasado parecen insoportables, pero créeme, no lo son.
Ahora, piensas que nunca te vas a recuperar. Piensas que vas a permanecer dañado por el resto de tu vida. Pero, eso no es verdad. Eso es sólo el reflejo del estado en el que te encuentras actualmente.
Pero créeme, esto también pasará.
Cómo curarse después de haber sufrido abusos emocionales y verbales:
1. No te creas la mentira
Todo lo que te diga una persona tóxica es mentira. No creas esas palabras porque sólo las dicen para hacerte daño. Ese es su principal objetivo: hacer te sientes inútil. Porque las personas sin autoestima son personas más fáciles de controlar.
Pero nadie es de piedra e incluso las palabras de un completo desconocido pueden colarse en tu corazón y pretender ser ciertas.
Tienes que luchar contra esas mentiras, eligiendo activamente qué palabras llevarás a tu corazón y a cuáles darás la espalda.
2. Pedir apoyo y amor
Después de haber sufrido abusos emocionales y verbales, necesitas grandes cantidades de amor. Necesitas que alguien te abrace o te escuche. Necesitas que alguien te tranquilice y te diga que todo va a ir bien.
Si no lo pides, nadie te dará lo que quieres. La gente no puede leer la mente y, a veces, cuando estás dolido, puede que los demás no lo reconozcan de inmediato.
Así que pide ayuda. Pide amor cuando lo necesites, y la persona adecuada reconocerá tu grito de ayuda.
3. Empieza a creer que eres lo suficientemente bueno
Haz lo que sea necesario para olvidar la relación en la que estuviste y trabaja para recuperar tu autoestima. Quédate solo. Llora mil lágrimas. Grita, chilla, o vete entre la gente y pasa el rato. Haz lo que te parezca correcto en ese momento.
Todos somos diferentes y no funcionamos de la misma manera. Algunos necesitamos soledad; otros, compañía. Necesites lo que necesites, tómalo y recupera tu autoestima porque eres lo bastante bueno.
4. Tómate tiempo para perdonarte a ti mismo
Perdonar es difícil, y cuando tienes que perdonarte a ti mismo, aún más. Tienes que aceptar que la persona en la que confiabas te traicionó y te llevó por el mal camino. Ya es bastante difícil imaginar que eso te ocurra a ti, por no hablar de aceptar que realmente fue así.
La persona traicionada se pone en guardia y construye muros a su alrededor, tratando de aislarse de las emociones que la hacen vulnerable. Cerrarse en sí mismo sólo puede traer más daño. Es mucho más sano abrirse al dolor y aceptarlo. Te perdonarás más fácilmente y podrás seguir adelante.
5. Utilizar la naturaleza como herramienta curativa
Sal a pasear. Respira la fuerza que te ofrece la naturaleza. Relaja la mente y el cuerpo. Vive ese momento y deja ir todo lo demás que te ronda por la cabeza.
Cuando la negatividad te consuma, recurre a los árboles y al aire fresco, porque la naturaleza siempre estará ahí para relajar tu mente y mostrarte lo hermoso que puede ser el mundo.
6. Perdona a tu agresor
Sé que esto es casi imposible de leer y mucho menos de hacer. Pero los maltratadores son personas que necesitan ayuda. Al principio, estás furiosa por las cosas que te hizo tu maltratador, pero de lo que tienes que darte cuenta es de que el mal planta su semilla en el terreno más adecuado.
Esos maltratadores son personas perdidas que se han extraviado y están descontentas consigo mismas. Buscan aprobación y poder torturando a los demás. Y para ellos, ese es el camino a seguir. No conocen otra cosa. Necesitan ayuda profesional.
Perdónales. Deshazte de la mala semilla que llevas dentro y sigue adelante con tu vida.
7. Céntrate en otra cosa y elige el amor
Concéntrate en mejorar y olvídate del maltrato que sufriste. Siempre que la vida te sacuda y empieces a dudar de ti mismo, recuerda que quieres mejorar; quieres recuperar tu antiguo yo.
Y al final, depende de ti si vas a curarte o no. Todos nos enfrentamos a una elección. Podemos elegir el amor propio o podemos elegir el odio a nosotros mismos.
Entonces, ¿qué va a ser?