Los chicos van y vienen, pero un hombre de verdad se queda, incluso cuando todo le dice que no lo haga.
Me tomó un mar de hombres equivocados...chicos inmaduros y absolutos imbéciles que pretendían ser hombres de verdad para darse cuenta de algunas cosas sobre el amor.
Cosas que antes eran tan poco claras y vagas.
Cosas que solía ignorar para hacérmelo más fácil cuando me dejaban.
¿Sabes esas mentirijillas que te dices a ti mismo después de una ruptura de mierda para poder superarla con más tranquilidad?
Cosas como, "Oh, fue culpa mía, estaba siendo demasiado autoritaria y necesitada," o, "Debería bajarle los humos al siguiente tipo, o voy a asustarlo como éste".
¿Y sabes qué? Yo solía ser así.
Solía creer que siempre era yo.
Me dije que o bien pedía demasiado o que simplemente estaba siendo demasiado para el tipo.
¡Como si pedir amor y esfuerzo fuera algo de lo que avergonzarse!
¿Adivináis qué? No lo es.
Estaba harta de venderme por chicos débiles que no eran lo bastante hombres para tratar con una mujer de verdad.
Así que finalmente decidí que ya era suficiente.
Me cansé de recibir un golpe cada vez.
Ya me cansé de echarme la culpa de todo.
Si yo tengo la culpa, seré la primera en admitirlo, pero que me aspen si alguna vez dejo que un tío me haga sentir que soy demasiado mujer.
No, eso ya no funciona.
Me he dado cuenta de que es muy sencillo.
NUNCA serás demasiado para un chico que no se cansa de ti.
Si eso es lo que sientes, cariño, tengo noticias para ti... ¡Estás con el hombre equivocado!
El hombre adecuado nunca te haría sentir como una carga.
El hombre adecuado nunca te haría sentir que no puedes ser tú misma a su lado.
Y el hombre adecuado seguro que nunca se aburriría de ti.
Porque cuando amas a alguien, y quiero decir realmente amas a alguien... no te cansas de él.
No decides que ya has tenido suficiente por hoy.
Eso no es amor, es conveniencia.
Y eso es algo con lo que nunca deberías conformarte.
Te lo dice una chica que se ha conformado con "conveniente" demasiadas veces.
Cuando encuentres al tuyo, créeme, te lo hará sentir.
Todo será diferente. Lo que sentiste con todos esos chicos no se te volverá a pasar por la cabeza.
Este hombre sabrá cómo tratar a una mujer que ama, una mujer de verdad.
Este hombre no tendrá suficiente de ti.
Incluso en los días en que una mala racha y os estáis peleando, siempre se asegurará de que sepas que te quiere a pesar de todo.
Un hombre de verdad siempre te enviará un mensaje de buenas noches para que sepas que no estás sola.
Un hombre de verdad nunca te dejará irte a la cama sola, pensando que todo se está desmoronando.
Aquí nadie vive en una burbuja.
Todos somos conscientes de que las cosas pasan y de que las relaciones requieren mucho trabajo y esfuerzo.
Pero cuando es con el chico adecuado, nunca sentirás que estás siendo demasiado o que todo es culpa tuya.
¡No te dejará!
Y ese es el único tipo de relación aceptable en el que deberías meterte.
No dejes que esos chicos inmaduros que aún viven de sus padres dicten tus sentimientos.
No dejes que te quiten la confianza ni la autoestima.
Eres demasiado fuerte y poderosa para dejar que alguien te deprima así.
Conoce tu valor. Conoce tu fuerza.
Una vez que lo hagas, lo comprobarás por ti mismo.
A el hombre que te ama te amará a TODA.
Le encantará tu personalidad parlanchina y tu franqueza.
Le encantarán tus pequeños arrebatos de celos porque sabrá que sólo significa que te preocupas.
Le encantará saber que ha llegado bien a casa.
Le encantará cómo le abrazas y no le sueltas durante lo que parece una eternidad cada vez que os separáis unos días.
Y es que un hombre de verdad sabe lo que implica el amor.
Y es todo el desorden, la locura y los celos.
Y él está totalmente de acuerdo con eso porque sabe que TÚ vales cada segundo de eso.
Y ese sentimiento es algo que guardarás como un tesoro en tu corazón.
No se trata de que todo sea perfecto todo el tiempo.
Se trata de saber que puedes ser tu yo verdadero, inédito, a su lado y seguir sintiéndote jodidamente querida.
Se trata de dar un salto de fe porque sabes que va a hacer que valga la pena.
Así que la próxima vez que sientas la necesidad de ser menos habladora, menos opinadora y menos censurada delante de un chico, vete.
Un hombre que no se cansa de ti nunca dejará que te menosprecies así.
O eres tu auténtico yo o te vas.
Depende de él.
Y créeme, un hombre de verdad tomará la decisión correcta.