No importa la edad que tengas o la experiencia que tengas en relaciones, lo cierto es que mucha gente tiene problemas para determinar qué es el verdadero amor.
Nuestros corazones y nuestras mentes juegan con nosotros y nos convencen de que nuestra elección equivocada es en realidad la verdadera.
No se preocupe, no es nada inusual. Sin embargo, no significa que no deba aprender a diferenciar entre un accesorio tóxico y una conexión genuina con otra persona.
A primera vista, podría pensarse que estos dos conceptos no tienen nada en común.
Sin embargo, por desgracia, es increíblemente fácil confundir una cosa con la otra.
Por eso estamos aquí para darte 4 cosas cruciales que marcan toda la diferencia del mundo.
Desinteresado frente a egocéntrico
Cuando se tiene un vínculo sano con alguien, no hay lugar para el egoísmo.
No, esto no significa que tengas que querer a esta persona más de lo que te quieres a ti mismo. Sin embargo, sus necesidades también importan.
Quieres que sea feliz y nunca podrías tener una sonrisa en la cara mientras él está llorando.
Sois un equipo y lo compartís todo.
Hay compromisos de por medio y ambos estáis dispuestos a hacer sacrificios por el bienestar de la otra persona.
Por otro lado, cuando hablamos de un apego tóxico, estás centrado en ti mismo. Lo único que os importa a los dos son vuestras propias necesidades.
A un compañero tóxico le importan un bledo las consecuencias de sus actos.
Le importa un bledo si su comportamiento te hace daño, mientras él esté bien y sea feliz.
Sólo se pone a sí mismo en primer lugar, mientras que tú no apareces en su lista de prioridades.
En lugar de empujarte hacia adelante, este hombre compite contra ti. En lugar de disfrutar de tus logros, le intimidan.
Calma frente a mariposas
"Los budistas dicen que si conoces a alguien y te late el corazón, te tiemblan las manos y te tiemblan las rodillas, no es la persona adecuada. Cuando conozcas a tu 'alma gemela', te sentirás tranquilo. Sin ansiedad, sin agitación". Monica Drake
Bueno, esta cita resume bastante bien una de las principales diferencias entre una conexión genuina y un apego tóxico.
Lamentablemente, aquí es donde mucha gente se equivoca.
Crees que has encontró a su alma gemela cuando te mareas cada vez que te mira y cuando sientes mariposas en el estómago montando una auténtica fiesta.
Sientes una excitación insoportable que no puedes controlar, por mucho que lo intentes.
Sin embargo, esto es probablemente un signo de un apego tóxico.
De hecho, todos estos sentimientos suelen ir seguidos de angustia, dudas y ausencia de tranquilidad en general.
Por otro lado, cuando conozcas al amor de tu vida, sentirás paz. Por primera vez, te sentirás completamente en calma.
Sabrás que has encontrado tu puerto y tu hogar. Sabrás que este es tu lugar.
Apoyo frente a codependencia
Estar involucrada con un hombre tóxico conlleva dependencia emocional.
Sientes que no podrías vivir sin esa persona a tu lado y como si tu vida no tuviera ningún sentido si la perdieras.
Al fin y al cabo, eso es lo que quiere tu pareja. Quiere que pienses que es él quien da sentido a tu existencia y el único propósito que tienes en este mundo.
Al contrario, cuando sea de verdad, no necesitarás a este hombre a tu lado.
Sin embargo, lo elegirás conscientemente para que forme parte de tu vida y lo querrás allí.
Será tu mayor apoyo y el viento bajo tus alas.
El que te inspirará para ser mejor y el que te empujará hacia la independencia.
Este hombre no se sentirá amenazado cuando vea que te estás volviendo autosuficiente. Al contrario, se sentirá orgulloso de tu fuerza y tu poder.
No pondrá todo su empeño en hacerte adicta a él, como sin duda intentará hacer un novio tóxico.
En lugar de eso, los dos creceréis como dos individuos sanos que se completan el uno al otro sin ser mutuamente codependientes.
Felicidad frente a tristeza
Verdadero hay que luchar por el amor-de eso no hay duda. Quien te diga que no requiere mucho esfuerzo y energía probablemente esté mintiendo.
El hecho es que todas las piezas de su puzzle no pueden encajar mágicamente sin que usted mueva un dedo.
En el amor verdadero tampoco todo son rosas y mariposas. Toda relación tiene sus altibajos.
Por mucho que tú y tu pareja os queráis, no podéis evitar tener días malos de vez en cuando.
Sin embargo, una conexión genuina con otro ser humano debería hacerte feliz.
Por otro lado, un apego tóxico te hace sentir miserable la mayor parte del tiempo.
Te intranquiliza, te entristece y te produce más sufrimiento que alegría real.
Por lo tanto, Si aún tienes dudas sobre en qué categoría entra tu relación, hazte esta sencilla pregunta: ¿Estoy feliz o triste la mayor parte del tiempo?
Así obtendrá todas las respuestas que necesita.