Está más que bien echarle de menos.
No puedes evitar haber visto a alguien que te recordaba a él. No es culpa tuya que olieras exactamente el mismo perfume que él solía llevar.
No es culpa tuya haber pasado del restaurante donde tuvisteis vuestra primera cita.
Pero no te dejes engañar. No desees lo que luego vas a lamentar.
No vuelvas con él. Sé que estás luchando con todas tus fuerzas para olvidarle, pero de alguna manera te encuentras echándole de menos.
Intentas ocupar tus pensamientos. Intentas no pensar en él.
Tu día está repleto de actividades sólo para que tu mente tenga algo mejor que hacer que pensar en él.
Una vez más, está bien echarle de menos, pero no vuelvas con él.
A veces estás a punto de volver atrás. No lo hagas. Has olvidado que las cosas no eran tan bonitas como las recuerdas ahora.
Has olvidado que te hizo daño. Has olvidado que te traicionó. Lo hará de nuevo.
Sólo recuerdas las cosas buenas que pasaron. Has bloqueado por completo todo lo malo que te hizo y todas las lágrimas que derramaste por su culpa.
Recuérdate a ti misma el dolor y nunca más querrás volver con él.
No ha cambiado. Es el mismo idiota sin corazón que era antes. Sólo está tratando de atraerte de nuevo a su trampa.
No caigas en la trampa. Échale de menos, pero no vuelvas con él.
Esto es sólo una debilidad temporal. Pasará. Volverás a vivir tu vida feliz sin él. Él era incompetente para amarte.
No sabía cómo. No es el tipo equivocado, es sólo el tipo equivocado para ti.. No supo amarte como te mereces.
Todo eso está ahora en el pasado. Y tienes que dejar que se quede ahí. No rasques las viejas heridas porque nunca cicatrizarán.
No vas a beneficiarte de ello. Lo único que puedes conseguir volviendo con él es dolor y sufrimiento. Todo otra vez.
No te aferres a tu pasado. No te causes más dolor.
Súbete al viaje hacia el futuro. Tú eliges qué camino tomar.
Está bien echarle de menos, pero nunca jamás volver a él.
Nada vale la pena.