No es momento para cobardes. No es el momento de renunciar al amor. Este es el momento de ser valiente.
Es el momento de creer en el amor. Cree que algún día te encontrará y todo tendrá sentido.
Todas las malas rachas, todos los amores pasados, los rechazos, los fracasos amorosos, todas las angustias y el dolor, todas las noches en vela, las mañanas pésimas y los días insoportables, todo eso desaparecerá cuando te encuentres en los brazos adecuados.
Puede que ahora te estés cuestionando la existencia del amor. Puede que dudes de que nunca llegue el día en que encuentres el amor.
Y lo único que hay que hacer en estos tiempos difíciles es tener paciencia y un poco de fe en que todo saldrá bien.
Cree en el amor, ten el corazón y la mente abiertos y el amor te encontrará cuando menos te lo esperes.
Cuando llegue ese momento de "tú eras el que estaba esperando", te darás cuenta de que tu paciencia ha merecido la pena.
No te limites poniendo límites temporales al amor. Llegará cuando tenga que llegar y ni un momento antes.
Ocurrirá con quien menos te lo esperes. Puede que no ocurra la primera vez que os miréis.
Pero tendrás ese momento en el que simplemente lo sabrás. Y puede ocurrir en cualquier momento de tu vida con alguien que acabas de conocer o con alguien que ya está en tu vida.
La belleza es el misterio. Mantén el corazón y la mente abiertos. Te sorprenderá y te dejará sin aliento.
Así que desecha todas esas ideas poco realistas sobre cómo debería ser y cómo debería comportarse. Fíjate en la diferencia entre el auténtico y alguien que te está haciendo perder el tiempo.
La forma más fácil de hacerlo es tener normas. No permitirás la toxicidad ni el maltrato en tu vida.
No te conformarás con alguien que te trate como si fueras indigna. Eso pertenece al pasado y "el elegido" nunca actuaría así.
"El elegido" no será todo lo que imaginabas; será perfectamente imperfecto y más de lo que puedas desear. No te leerá la mente y no hará las cosas como te las imaginas, pero las hará a su manera y serán extraordinarias.
Lo reconocerás porque tendrá bondad en su interior. Será cariñoso y atento.
También te molestará a veces con pequeñas tonterías, pero de la forma más dulce posible. A veces olvidará cosas que te gustaría que recordara, pero compensará esos momentos con cosas maravillosas y te dejará sin palabras.
Será perfectamente imperfecto y será todo tuyo.
Todas las dificultades por las que has pasado, todas las decepciones amorosas, él las convertirá en recuerdos lejanos. Se concentrará en hacerte sonreír y en secarte las lágrimas, haciendo todo lo posible por no ser él quien te las hizo llorar.
Te amará con ternura y eso será lo único que importe.
Sabrá amar y no tendrá ningún problema en corresponder a todo lo que le des. En su humildad, verás que está tan agradecido de tenerte como tú de tenerlo a él.
Nunca tendrás que mendigar su tiempo, su afecto o su atención. Desde su punto de vista, hacerlo será lo más natural del mundo.
Un día lo conocerás y encontrar sentido a todo el lío por el que has pasado. Te darás cuenta de que todo fue por algo.
Todo fue para que él pudiera amarte, apreciarte y quererte por la persona que eres hoy, por la persona en la que aún estás por convertirte.
Así que lo mejor que puedes hacer ahora mismo es darte cuenta de una simple verdad: Las cosas buenas llevan su tiempo. Sé valiente, ten paciencia y espera a "aquel" que le dé sentido a todo.