En 2025, quiero sentir amor de verdad.
Quiero sentir la paz interior. Y quiero que todas las cicatrices de mi alma se desvanezcan. Lucharé contra cada pensamiento de no ser capaz de hacer algo.
Porque ya he tenido suficientes pensamientos negativos y eso no es algo que quiera seguir haciendo en el próximo año.
Así que, en 2025, aquí estoy, más fuerte que nunca, más guapa que nunca y un año más lista.
He cambiado, pero me parece muy bien. Por fin, Aprendí a quererme. Aprendí a respetarme a mí misma y a preocuparme menos por lo que digan los demás.
No seré la que no se arriesga porque cree que no puede con ello. En lugar de eso, lo intentaré.
Intentaré hacer cosas que nunca he hecho y, si fracaso, aprenderé la lección. Pero una cosa es segura: seguiré intentándolo hasta que llegue a donde quiero.
En 2025, dejaré mi pasado donde pertenece... .
No quiero pensar en los errores que cometí ni en cómo afectaron a mi vida. En lugar de eso, quiero centrarme en lo que tengo delante. No quiero ser duro conmigo mismo solo porque no hice algo bien.
Ya no quiero sentirme mal por ello. Sólo quiero dejarlo ir.
Hablando de dejar ir, quiero dejar ir algo más: todas las personas tóxicas que hicieron de mi vida un infierno.
No quiero tener ningún contacto con ellos porque amo mi vida y no quiero que la arruinen. No quiero escucharlos chismorrear sobre los demás porque seguramente también lo harán sobre mí.
Sólo quiero estar lejos de ellos porque no tienen la energía positiva que yo anhelo. Dejaré ir a cualquiera que me haga pensar que no valgo la pena.
En 2025, queríat dejar de intentar ser alguien que no soy sólo para encajar.
No quiero ser alguien a quien la gente moldee a su gusto. Esta vez, quiero ser mi verdadero yo, aunque eso signifique que los demás me den la espalda.
Hasta ahora he aprendido que es mejor estar solo que mal acompañado.
En 2025, aprenderé a respetarme más a mí mismo.
Haré lo que sea para llegar a donde quiero y pensaré en mí más que en los demás. Esta vez, me convertiré en una prioridad y no en una opción. Creo que ése es el camino hacia la felicidad y tarde o temprano lo conseguiré.
En 2025, aprenderé no molestarme la cabeza con opiniones ajenas .
I no dejaré que nadie afecte a mi vida. Al final, soy yo quien sufrirá en esta piel, o será feliz, según la situación. Y esa es una buena razón para que los demás me dejen en paz.
No toleraré que la gente entre en mi vida para hacerme sentir triste. Si van a formar parte de mi vida, tienen que ganarse su lugar en ella. De lo contrario, no tiene ningún sentido.
En 2025, aprenderé a quererme de nuevo.
Me aceptaré con todos mis pros y mis contras. Porque así soy yo y todas las cosas que me han pasado y que me han convertido en la persona que soy hoy.
Me demostraré a mí mismo que no hay persona más valiosa que yo. Y cuando me dé cuenta, empezaré a creer en ello también.
En 2025, me centraré en mi historia.
No quiero ser un personaje secundario en la historia de otro. Esta vez quiero ser la protagonista. Este año será especial porque me pondré en primer lugar.
Voy a elegirme a mí mismo. Voy a pensar sólo en positivo. Voy a aceptarme tal como soy.
Y cuando vuelva la vista atrás a finales de 2025, quiero decirme a mí misma que este año fue el año en que algo cambió de verdad.
Quiero saber que en ese año me propuse nuevas metas que pude alcanzar. Quiero sentir que hice realidad algunos de mis deseos y que me puse en el buen camino para volver a ser feliz.
Quiero sentir que ese año fue todo lo que había estado buscando y que por fin encontré la receta para una buena vida.
En ese año, quiero saber que por fin me he puesto a mí primero.