Cuando eres más joven, piensas que una mujer y una chica son básicamente lo mismo.
Ambas son palabras para designar a las personas de sexo femenino, y la única diferencia estriba en su edad o en su estado civil.
Pero, más adelante en la vida, te das cuenta de que no son sinónimos que puedan intercambiarse mutuamente.
Más adelante en la vida, te das cuenta de que no puedes tratar igual a una chica y a una mujer.
Hay una gran diferencia entre una niña y una mujer. Las mujeres viven su vida de forma diferente a las chicas. Te tratarán de forma diferente, pero también te exigirán un trato diferente.
Hay cosas que una chica aceptará y que una mujer de verdad nunca soportará.
Algunos chicos pensarán que estar con una chica es mucho más difícil que tratar con una mujer de verdad, pero esos son sólo chicos inmaduros que no saben nada de la vida.
Los hombres maduros siempre preferirán estar con una mujer que sabe lo que quiere y no tiene miedo de conseguirlo.
Las diferencias entre salir con una chica y salir con una mujer son numerosas pero la crucial es que las chicas quieren atención y las mujeres quieren respeto.
Las chicas suelen pedir validación y confirmación a través de los hombres. No pueden estar completas sin un hombre a su lado y por eso aguantarán mucho con tal de que no las dejes.
Una chica ansía atención y hará todo lo que esté en su mano para conseguirla. Aceptará tus juegos mentales y permitirá que entres y salgas de su vida a tu antojo, sólo porque piensa que es una forma de conseguir tu afecto.
Una chica tiene miedo de ser rechazada y eso hará que acepte algunas cosas con las que no está de acuerdo, sólo para mantenerte cerca.
Una chica piensa que su vida no tiene sentido sin un hombre en ella y no puede imaginarse estando sola.
Por lo tanto, una chica siempre te perdonará que le faltes al respeto. Ella no tiene suficiente amor propio y ella va a cambiar constantemente a sí misma sólo para mantener a su alrededor.
Hará cualquier cosa para mantener tu atención porque lo confundirá con amor.
Por otro lado, una mujer de verdad exigirá mucho más. Sabe lo que es el amor y sabe que no es posible que alguien la ame sin respetarla .
Sabe lo que quiere y lo que se merece. Una mujer no tendrá miedo de decirte lo que espera de ti.
Para una mujer de verdad, el respeto es mucho más que una palabra vacía. Cuando ella dice que exige respeto, significa que tú tienes que respetarla no solo como mujer, sino también como persona.
Es una persona completa con su integridad intacta y no permitirá que le faltes al respeto de ninguna manera posible.
Es una mujer que tuvo una vida plena antes de que tú entraras en ella y nunca esperará a que le des sentido a su existencia.
Si piensas jugar a juegos mentales con esta mujer, piénsatelo otra vez. Ella nunca permitirá que la manipules o abuses emocionalmente de ella.
En el momento en que vea que la estás utilizando o que tus intenciones no son sinceras, se alejará sin mirar atrás.
Una mujer de verdad nunca cambiará para conquistar a un hombre. Sabe quién es y no está dispuesta a cambiar para caerle mejor a un hombre.
No tiene miedo a estar sola y nunca soportará que la maltrates sólo para retenerte.
Conoce su verdadero valor y nunca se conformará con alguien que no la aprecie. Una mujer de verdad sabe que es digna y se asegurará de que tú también lo sepas.
Cuida su mente y su cuerpo por completo y nunca estará con alguien que no haga lo mismo.
Para ella, su energía y su tiempo no tienen precio y no piensa malgastarlos en alguien que no se lo merece .
Sí, ella pondrá mucho esfuerzo en la relación que tiene pero esperará que tú iguales ese esfuerzo.
Para ella, mentir y engañar nunca son opciones. Nunca debes intentar ocultarle nada, porque se dará cuenta.
Y nunca lo aguantará porque sabe lo que vale y nunca permitirá que la rebajes de ninguna manera, por mucho que te quiera.
Esta mujer no espera tu gratitud constante, pero lo que sí espera es que aprecies todo lo que hace por ti y por vuestra relación.
Puede que pienses que estar con una mujer es demasiado desafiante y exigente. Pero, aunque pide mucho, créeme...-ella es digna porque te dará mucho más.
