"Es un alma vieja con ojos jóvenes, un corazón de época y una mente hermosa".
- Nicole Lyons
Un alma vieja es una persona que es joven pero que tiene una visión de la vida diferente a la de otras personas de su edad. Tienden a ser más adultos que los demás y esas personas son siempre muy sensibles y pueden sentir y entender mejor las cosas.
Si sientes que no puedes sincronizarte con la gente de tu edad y que a veces te malinterpretan, puede que estés un alma vieja.
En ese caso, probablemente sepas que encontrar a tu alma gemela puede ser una misión imposible y que en cada relación amorosa que tienes, siempre amas un poco diferente.
Y he aquí cómo:
Eres un poco anticuado cuando se trata de citas
Las cenas románticas, con velas y flores y música suave de fondo son sin duda lo suyo.
Simplemente no entiendes las citas modernas en las que la gente se acuesta con una persona una noche y con otra la siguiente.
Para ti, la comunicación, la honestidad y el amor verdadero son lo que realmente importa y lo anhelas. Algunos pensarán que eres un poco anticuado, pero no renuncias a tus principios.
Disfrutas más cuando estás solo
Puede que a la gente de tu edad le guste relacionarse con otras personas todos los días, pero tú prefieres quedarte en casa un viernes por la noche, relajándote con una buena película.
Simplemente necesitas algo de tiempo a solas para pensar en tu vida y reiniciar un nuevo día. Esto no significa que odies a la gente, pero valoras tu tiempo libre y no te gusta que nadie perturbe tu intimidad.
La comunicación es muy importante para usted
Cuando se está en una relación amorosa, se respeta mucho una comunicación buena y abierta porque se piensa que es la clave para una relación sana y satisfactoria.
Sabes que hablando puedes resolver hasta los problemas más difíciles y que tu pareja debe conocer tu forma de pensar. Por eso siempre estás abierto a hablar y no ocultas nada.
Crees que toda la gente es buena sólo porque tú eres así
Crees en el amor y en todo lo bueno que conlleva. Pero no puedes imaginar que alguien pueda hacerte daño si mantiene una relación amorosa contigo.
Y cuando eso ocurre te enfadas contigo mismo porque has confiado en la gente demasiadas veces y te han hecho daño todas y cada una de ellas.
No te importa el dinero
Para ti, las cosas materialistas no son lo más importante en la vida y valoras todas esas pequeñas cosas que realmente te importan.
Preferirías recibir una carta de amor de tu ser querido que un par de pendientes de diamantes porque la carta tiene un valor sentimental para ti.
Siempre estás dispuesto a querer a alguien por muy pobre que sea, porque para ti el amor es lo más importante. El dinero está ahí sólo para hacernos la vida más fácil y ya está.
No tienes sexo casual
Cuando decides acostarte con alguien, necesitas amar a esa persona con todo tu corazón para sentirte realmente bien durante ese acto.
Nunca podrías tener sexo con alguien al azar y al día siguiente comportarte como si nada hubiera pasado.
Eso es algo que juzgas y que realmente no puedes aceptar. Tiendes a centrarte en una sola persona a la vez y quieres hacerla sentir especial.
Admitirás que amas a alguien sólo si lo dices en serio
Para ti, el amor es algo sagrado y no te limitas a decirle a alguien que le quieres para llevártelo a la cama.
Lo dirás sólo cuando estés al 100% por ciento de tus sentimientos y cuando sientas que has encontrado a tu verdadera alma gemela.
Cuando creas que has encontrado a la persona adecuada, le confesarás lo que sientes porque no podrás guardártelo para ti.
No quieres vivir con alguien antes de casarte
Como estás chapado a la antigua, no quieres fingir que estás casado con alguien sólo para poder vivir juntos.
Quieres que eso ocurra cuando os convirtáis en marido y mujer para que ambos podáis aprender cosas nuevas el uno del otro en el momento adecuado.
Eso significa que os conoceréis durante más tiempo y que, gracias a ello, podréis tolerar algunas cosas.
Te tomas en serio el compromiso
Simplemente no crees en los engaños y te tomas en serio el compromiso. Es cierto que necesitas más tiempo para conocer a alguien, pero una vez que sientas que es de verdad, te comprometerás con él sin ningún problema.
Sabes que no estaría bien que tu pareja te mintiera, así que nunca harías algo así.
Si ves que tu relación no va a ninguna parte, la terminarás de una forma agradable pero nunca harías daño a otra persona.
No quieres cambiar las reglas de tus citas
Tienes tus propias reglas sobre las citas que te parecen buenas y no quieres modernizarlas.
Para ti, el objetivo de las citas es encontrar a alguien que entienda tus necesidades y te haga sentir bien.
Si tu pareja intenta cambiarte, simplemente romperás con ella porque no soportas que alguien te diga cómo sentir y qué hacer en el amor.