¡Esta vez renuncio! Renuncio a todo lo que representas. Renuncio a tu casi amortus mensajes que no significan nada, tus abrazos y besos que son falsos. Llevo demasiado tiempo librando esta batalla pero ya no puedo más.
No puedo ser valiente por los dos. No puedo amar por los dos y no puedo ser la única que lo intente.
Estoy cansada de tus señales contradictorias. Estoy cansada de noches sin dormir esperando a que vuelvas a casa. Estoy cansada de perder mi paz interior por tu culpa. Estoy cansada de ponerte siempre en primer lugar y de no recibir nunca el amor que merezco.
No soy el tipo de persona que suele rendirse, pero esta vez, me rindo contigo. Me rindo con nosotros. Renuncio al amor que una vez tuvimos, si es que a eso se le puede llamar amor.
Estoy cansada de que no me hagas tu prioridad. Estoy cansada de que no me pongas en primer lugar y de que pienses que sólo soy buena para un tiempo determinado, pero no para siempre.
Estoy cansada de que pienses que no soy una mujer perfecta y, sobre todo, estoy cansada de tus intentos de cambiarme. ¿No ves que no estoy dispuesta a cambiar?
¿No ves que no soy un desastre sino un hermoso desastre? Y para tu información, seguiré así todo el tiempo que quiera.
No quiero escuchar a mis amigos diciéndome que estoy haciendo un gran error al elegirte a ti. No quiero que me digan que te han visto con otra mujer aunque me hayas dicho que estabas haciendo horas extras.
No quiero que me digan más la clase de hombre que eres y que acababa de hacer de mi vida un caos contigo.
Estoy cansada de sus historias de que estar contigo es sólo una pérdida de tiempo y que merezco mucho más de lo que puedes darme.
¿No ves que estoy cansada? ¿No ves que mi corazón ya no late más fuerte cuando estás cerca?
¿No ves que tus besos y abrazos no significan nada para mí?
Ya no siento amor. Lo que siento ahora es indiferencia y debo admitir que me duele.
Duele pasar tanto tiempo con alguien pensando que es el hombre de tus sueños pero al final, cuando no puedes moverte de debajo de sus garras, darte cuenta de que todo lo que te vendió en nombre del amor, era cualquier cosa menos eso.
Me niego a creer que soy difícil de amar. Sé que soy la mujer más fácil de amar, pero sólo si tengo a mi lado al hombre adecuado.
Me niego a cambiar por un hombre que nunca me hizo sentir lo suficientemente buena. No quiero cambiar por alguien que siempre pensó que yo no era digna y el que siempre se insinuaba a otras chicas sólo para tener a alguien en caso de que me perdiera.
Realmente no tiene ningún sentido luchar por el amor que sólo uno de nosotros siente. Dejo de luchar por el hombre que me ignora cada vez que le demuestro mi amor.
Eso no es lo que merezco. Merezco mucho más que eso y no me conformaré con menos de lo que merezco nunca más.
Una de las peores partes de esta relación fue aferrarme a algo a lo que ya no podía aferrarme.
Y lo peor de todo fue que pensé que contigo me había tocado la lotería, pero la dolorosa verdad fue que toqué fondo.
Y si no lo hubiera hecho, quizá aún estaría ahí fuera, luchando por ti y por lo que queda de nuestro amor.
Pero ahora, más que nunca, estoy segura de que estoy tomando la decisión correcta al dejarte marchar. Por fin me libero de esa carga que he llevado sobre mis hombros durante tanto tiempo.
Esta vez, me doy por vencido contigo porque tú te diste por vencido conmigo hace mucho tiempo.