Quedé destrozado cuando me dejaste. Ese día quedará grabado en mi memoria para siempre.
Recuerdo que mi amiga me dijo que tu marcha era lo mejor que me podía haber pasado. Sus palabras me atravesaron el corazón.
¿Cómo pudo decir eso aunque quisiera consolarme? Ella sabía lo que significabas para mí y lo mucho que te quería.
De verdad. Te quería más que a nadie, más que a nada en este mundo. En realidad, tú eras todo mi mundo.
Creo que te quise desde el primer día que nos conocimos, aunque no quería admitirlo.
Nunca imaginé que un amor así pudiera sucederme. Me enamoré de ti tan ciega y locamente. En realidad, tú hiciste que me enamorara de ti tan profundamente.
Con esa estúpida sonrisa tuya, hiciste que me enamorara de ti a primera vista.
Dios mío, fui tan tonta e ingenua. Nunca podré perdonarme por haberte dejado entrar en mi vida. Siento que mi el corazón roto fue culpa mía.
Mucha gente intentó advertirme de que no estabas siendo sincero conmigo. Intentaron decirme que sólo me harías daño. Pero yo nunca dudé de tu amor. Siempre confié en ti y en tus sentimientos.
¿Por qué lo hice? Pensé que sólo estaban celosos. Que no me querían feliz.
Así que decidí no hablarles más. Pensé que querían separarnos y los borré de mi vida.
Pensaba que teníamos algo real y sincero y por eso me resultaba tan fácil luchar por ese amor. Estaba convencida de que eras mi alma gemela y de que estaríamos juntos para siempre.
Para siempre. Una palabra pequeña pero que significa mucho. Bueno, para algunas personas sí. Deberías buscar su significado en un diccionario porque, obviamente, no lo conoces.
Para siempre no significa hasta que llegue alguien mejor. Significa estar ahí para alguien por el resto de los tiempos. Estar con alguien hasta que la muerte os separe.
Mi error fue creyendo que me amabas y enamorarme tanto de ti. Mi error fue hacerte una prioridad cuando siempre fui tu última opción.
Mi mayor error fue apartar de mi vida a las personas que sólo se preocupaban por mí y querían ayudarme. Y todo por tu culpa. Perdonarte a ti mismo es realmente el tipo de perdón más difícil.
¿Lo ves? Todo se trataba de ti. Tú, tú, tú. Eras la única persona importante para mí. Eras mi todo.
Cuando volviste para pedirme una segunda oportunidad, porque obviamente comprendías lo que habías perdido, dijiste que me querías y que yo era importante para ti.
Lo siento pero me es imposible confiar en ti cuando nunca lo has demostrado.
Antes confiaba en tus palabras, pero ahora me doy cuenta de que las palabras sin acciones no tienen sentido. Ah, y sobre esa segunda oportunidad... No te la mereces y nunca la tendrás de mí.
Después de todo este tiempo, por fin he entendido a qué se refería mi amiga cuando decía que tu marcha era lo mejor que me podía pasar.
Me di cuenta de que en realidad me hiciste un favor dejándome y que debería agradecérselo.
Te quería demasiado y nunca sería capaz de dejarte, aunque en el fondo sabía que debía hacerlo. Sin embargo, pusiste fin a las cosas para los dos y me alegro de que todo haya terminado.
Me preguntaste si te odiaba. No. No te odio y nunca lo haré. Algún día te darás cuenta de que fui yo quien siempre estuvo a tu lado, pero ahora siempre será demasiado tarde para nosotros. Espero que seas capaz de perdonarte.