Apuesto a que nadie te advirtió sobre las secuelas de perder a una buena chica. Si a alguien se le ocurriera, te diría que fueras listo y le prestaras atención a ella y a todo lo que hace por ti.
Te dirían que nunca la dieras por sentada porque es una chica única y sólo la tendrás una vez en la vida.
Así que si usted juega que lejos, es algo te arrepentirás para el resto de tu vida.
Pero tú seguías a lo tuyo y de todas formas nunca escuchabas a los demás. Quién sabe qué pasaba por tu cabeza o qué tipo de razones o excusas se te ocurrían para sentirte mejor por maltratarla.
Lo único con lo que no contabas es que un ser humano no puede aguantar mucho.
Nunca contaste con su amor propio ni con que se alejaría una vez que se cansara de darte todo de ella sin recibir nada a cambio. Nunca pensaste que podrías perderla hasta que realmente la perdiste.
Cuando das por sentada a una buena chica, es exactamente cuando la pierdes.
Cuando no le das el amor que se merece, cuando le faltas al respeto, cuando dejas que sus esfuerzos pasen desapercibidos y cuando dejas que se sienta sola aunque se supone que te tiene a ti es cuando la pierdes.
Cuando pierdes a una buena chica, no pierdes sólo a esta persona, sino que pierdes mucho más.
Pierdes todas las oportunidades que podríais haber tenido y todo lo que ella hacía por ti. Y cuando la realidad finalmente te golpea, puede ser un poco abrumador, la verdad sea dicha.
Cuando pierdes a una buena chica pierdes a alguien que creía en ti
Ver, ella siempre estaba allí para animarte. Ella era la que ponía toda su fe en ti y la que nunca te dejaría rendirte.
Creía en ti, te empujaba hacia adelante y siempre estaba ahí para cogerte cuando te caías.
Nunca te dejó perder la fe en ti mismo y podrías haber sido mucho más con ella, pero lo echaste todo a perder.
Cuando pierdes a una buena chica, pierdes a alguien que confió en ti con todo su ser.
Te dio todo de sí misma. Confió ciegamente en ti y nunca pensó que pudieras traicionarla.
Ni por un segundo se detuvo a pensar que podrías usarla.
Es porque siempre creyó que la gente es tan buena como ella. Pero tú no eras bueno, al menos no para ella.
Todo lo que hiciste fue jugar con sus emociones. Y lo único que ella hizo fue confiar en ti con todo su ser. Esto le costó demasiado, pero al final consiguió verte tal y como eres.
Cuando pierdes a una buena chica pierdes a alguien que estaba dispuesta a darte su amor incondicional
Este tipo de amor no se ve a diario. El amor de una buena chica es algo diferente. Y cuando una buena chica decide amarte, lo hace de todo corazón.
Ella te ama incondicionalmente y sin contenerse nunca. Estaba dispuesta a hacer lo mismo por ti.
Pero se detuvo antes de que sacaras lo mejor de ella. Porque vio que no valías la pena.
Se dio cuenta de que sólo la romperás y sólo vas a tomar su amor y usarlo pero nunca darás nada a cambio.
Estaba dispuesta a amarte incondicionalmente, pero nunca le diste la oportunidad. Te la jugaste demasiado pronto.
Cuando pierdes a una buena chica ya no tienes a alguien que siempre estaba ahí para ti
Ahora, cuando mires a tu alrededor, no tendrás a alguien con quien puedas contar día y noche.
No tendrás a alguien que estuviera dispuesto a escucharte independientemente de lo que le hicieras.
No tendrás a alguien que se olvidaría de sus necesidades porque estaba demasiado ocupada centrándose en las cosas que tú necesitabas.
Porque cuando pierdes a una buena chica...simultáneamente pierdes a una chica que siempre estuvo ahí para ti cuando la necesitabas.
Cuando pierdes a una buena chica ya no tienes a alguien que nunca te abandonaría
En realidad planeaba quedarse. Quería estar ahí para ti y ni en un millón de años podría imaginarse renunciando a ti.
Sabes lo mucho que se esforzó y se quedó a tu lado incluso cuando cualquier persona cuerda se habría marchado hace mucho tiempo.
Siguió encontrando fe en ti en lugares donde a nadie se le había ocurrido buscar. Pero se cansó de que la rompiera constantemente alguien por quien se esforzaba tanto.
Se cansó de ser la única que nunca se rendía. Así que al final, ella también se rindió.
Cuando pierdes a una buena chica pierdes a tu mejor amiga
Cuando pierdes a una buena chica, no sólo pierdes a tu amante, sino también a tu mejor amiga.
Pierdes a tu amigo, a tu compañero de vida y a alguien con quien siempre podías contar.
Sabes bien que era ella, pero eres demasiado orgulloso o tienes miedo de admitirlo ahora.
No importa porque la vida te hará admitirlo al menos ante ti mismo con el tiempo. Y la vida también hará que te arrepientas de haber perdido a una buena chica.
Cuando pierdes a una buena chica acabas preguntándote si valió la pena todo por lo que la perdiste.
Cuando pase algún tiempo y la realidad se haga realidad, cuando te acuestes por la noche sin poder dormir, no podrás evitar preguntarte si todo esto ha merecido la pena.
Si todas las cosas que hiciste mal, si todo el egoísmo y descuido, tus sueños y metas valieron la pena perder a una chica como ella.
Te preguntarás si es la misma chica de antes. Te preguntarás si tiene a alguien que la trate bien y haga todas las cosas que tú no hiciste pero que deberías haber hecho por ella.
Tu instinto te dirá que cojas el teléfono y llames, pero algo te impedirá hacerlo.
Ese algo será darse cuenta de que las chicas como ella no consiguen estar solas durante mucho tiempo.
Se dará cuenta de que no la estará esperando porque otro ha hecho todo lo posible por conquistarla y quedarse con una chica como ella.
Para cuando te des cuenta de qué es exactamente lo que has perdido, ella estará con alguien que realmente la aprecia y la merece.