Para algunos de nosotros, llegará un momento en que conozcamos al amor de nuestra vida, al que no podremos tener durante toda nuestra vida. Al menos, no de la forma que desearíamos.
Alimentarán nuestro fuego, pondrán nuestro corazón a mil por hora. Será esa persona por la que sin duda nos lanzaríamos al vacío.
La persona con la que, cuando estamos con ella, nada más importa en el mundo que lo que hay entre las cuatro paredes que nos rodean. Nos desafiarán a nivel intelectual de formas que nunca hubiéramos imaginado.
Una persona, nuestra persona.
Tendremos una relación y un vínculo que la mayoría de la sociedad nunca entenderá. Sin embargo, casi siempre estamos agradecidos por tal privilegio. Será fascinante, estimulante, alucinante, por así decirlo.
Sin embargo, un día, esa experiencia única en la vida llegará a su fin. Nunca un cierre total, ni un final completo, pero un final al fin y al cabo. Algo cambiará, para uno o para otro, quizá incluso para ambos. Almas gemelas, sí, pero no amantes para toda la vida.
Juntos o separados, el vínculo interior permanecerá para siempre, sin que otro pueda colmarlo. Porque, francamente, sería imposible.
Seguiréis en contacto. Esencialmente siempre estaréis ahí el uno para el otro, sólo que no 100 por 100.
Partes de ustedes seguirán avanzando en la vida, superándose mutuamente de forma lenta y gradual.
Haz una pausa, aprecia este momento, congela el tiempo y recuerda la calidez que aportó a tu vida, y todas las sentidas pero desgarradoras lecciones que este hermoso amor te enseñó. Ahora avanza rápido.
Un día conocerás a alguien nuevo, alguien que es tu mejor amigo en todos los sentidos de la palabra, que te aporta felicidad y consuelo, así como un futuro brillante.
En el fondo de tu corazón sabrás que es ella. Esta es la persona con la que debes y con la que muy probablemente pasarás tu vida, feliz a pesar de todo.
Del mismo modo, hay algo desalentador en el aire, algo que no puedes identificar. Como una luz que te golpea. Tu persona.
No son ni podrán ser nunca esa persona fascinante, deslumbrante y sensacionalmente intelectual de tu vida, porque ya la has tenido. La persona de tu vida ha llegado y se ha ido, pero aunque "se haya ido", sigue estando presente en tu vida.
Así, estás atrapado parcialmente en tu mundo actual y parcialmente en el mundo en el que vive una parte intelectual de tu ser.
Así que debes decidir: ¿Pasas la duración de tu vida entrando y saliendo de este mundo intelectual que has creado con tu persona?
Tu fuego que alimenta, mariposa que da, salvaje y libre, persona única en la vida... ¿o creas un nuevo mundo? ¿Una vida segura, sana, feliz y apreciada, en la que tú y tu mejor amigo podáis crear juntos una vida plena y llena de sentido?
La elección correcta, la elección inteligente, es tu mejor amigo, dejando a tu persona de una vez en la vida, en el pasado. Esta no es una elección fácil, pero es la elección correcta para un feliz y saludable usted.
Verás, tu persona, es como una adicción. Una vez que cierras esa puerta, no puedes simplemente tirar la llave. Tienes que recordarte y elegir mantener esa puerta cerrada, diariamente.
Está bien sentir nostalgia. Es normal que algunos días te hagas preguntas y pienses en los "y si...". Pero recuerda que el hecho de que sea una vez en la vida no significa que sea para siempre.
La vida se crea a través de experiencias. Ésta en particular es especial. Te enseñará cosas sobre ti mismo que nunca imaginaste posibles ni verdaderas.
Sin embargo, también te enseñará si prestas suficiente atención a lo que no debes conformarte. Que sea una persona única en la vida no significa que lo sea para siempre.
Tu mejor amigo, ese es tu para siempre. Ese es tu oro. Eso, también, será una hazaña única en la vida, sólo que en una forma diferente.
por Jasmine P.