He oído que eres echándome de menos como un locoque estás tratando de ponerte en contacto conmigo. He oído que lo sientes y que quieres retractarte de todo.
Que no puedes encontrar a nadie como yo, que fui lo mejor que te pasó. Y sin embargo, que me apartaras fue lo mejor que me pasó.
Buscarás mis ojos y la forma en que te miraron. Buscarás los océanos de azul en los que solías perderte, buscarás esos océanos para ahogarte de amor.
No supiste cuidarlos, provocaste tormentas y olas que me ahogaron de pena, pero te dejaron seco.
Hiciste que mareas de dolor expulsaran el aire de mis pulmones, sin importarte si podía respirar. Sin importarte si podía sobrevivir. Buscarás mi mirada llena de amor, pero nunca la encontrarás.
Buscarás mis brazos y la forma en que te tocaron. Los buscarás para curar tus heridas y masajear tu cuerpo cansado y destrozado.
Los buscarás para sostener tu rostro, para calentar el tuyo en las frías noches de invierno. Los buscarás cuando estés herido y no haya nadie para ayudarte.
Los buscarás una vez que seas viejo y no haya nadie que te vuelva a poner de pie. Los buscarás una vez que estés magullado y no haya nadie que bese esos moratones.
Buscarás mi cuerpo y la forma en que te abrazaba. Lo buscarás cuando las noches se vuelvan frías y oscuras.
Lo buscarás una vez que la soledad te golpee y tu cama parezca enorme y aterradora.
Buscarás mi cuerpo y la forma en que respondió a yoy lo tiraste en el momento en que no lo necesitabas.
Buscarás mi mente y la forma en que te respetó. Cuando te ascienden y no hay nadie para celebrarlo contigo.
Cuando vuelves a caer y no hay nadie que crea en ti, no hay nadie que te muestre su apoyo.
Lo buscarás una vez que te des cuenta de que siempre tuve razón y de que puedes hacerlo. Lo buscarás una vez que veas mi nombre en tus poemas, una vez que veas trozos de mí en tus palabras. Pero eso será todo lo que quede de mí, sólo mi nombre.
Buscarás mi corazón y la forma en que te amó. Lo buscarás en cualquier otra mujer, pero no estará ahí.
Ninguna mujer conoce la lucha que tuviste, ninguna mujer te amó en tus momentos más bajos. La única mujer que lo hizo, la alejaste.
Me alejaste, dijiste que nos habíamos distanciado y que no podías ver tu futuro conmigo. Qué fácil olvidaste que no habría habido futuro si yo no te hubiera sacado de tu pozo de desesperación.
Olvidaste que fui yo quien te empujó todo el tiempo, que fue mi amor el que curó tus heridas.
Me buscarás, pero nunca me encontrarás. Me alcanzarás, pero no habrá nada a lo que agarrarse.
Gritarás mi nombre, pero no habrá nadie que lo oiga. Llorarás con el corazón, pero no habrá nadie que lo vea.
Tuviste tu oportunidad, tuviste tu oportunidad. Simplemente no supiste apreciarme, no supiste amarme.
No sabías que podías amarme a mí y a ti al mismo tiempo. En cambio, te elegiste a ti mismo, te amaste a ti mismo.
Me buscarás, pero nunca me encontrarás. Me cansé de darte segundas oportunidades y me cansé de entregarme a personas que no me merecen.
Estoy harto de no recibir más que dolor y migajas de amor. He terminado contigo.