Que te rompan el corazón siempre es doloroso, de eso no hay duda. Pero si eres lo bastante listo, puedes convertir cada desengaño amoroso en una valiosa lección.
Y eso fue exactamente lo que hice. En lugar de lamentarme por mis relaciones pasadas, he permitido que cada una de ellas me enseñara algo sobre el romance, el amor, la vida y sobre mí misma. He aquí 7 cosas que he aprendido de mis relaciones fallidas.
1. Dejar el pasado en el pasado
La primera lección que aprendí de mis desamores es que hay que dejar el pasado en el pasado, donde pertenece. Algunas personas y algunas cosas simplemente no están hechas para durar y tienes que aceptarlo, por mucho que duela.
En lugar de pasarte el día pensando en cómo podrían haber sido las cosas, tienes que centrarte en sacar lo mejor de hoy. Tienes que centrarte en mejorar tu presente y tu futuro, sin permitir que las cosas o las personas del pasado te retengan.
2. Que soy el único que puede hacerme feliz
Lamentablemente, algunas chicas buscan una relación que las complete, pensando que el chico adecuado resolverá milagrosamente todos sus problemas y hará que su vida sea mejor. No lo hará.
Tú eres la única que puede hacerte verdaderamente feliz y no hay nadie en este planeta que pueda hacerlo por ti. Y lo mismo ocurre con hacerte infeliz y desgraciada.
Si eliges centrarte en todo lo negativo y en todo lo que te causó dolor en el pasado, nunca alcanzarás la felicidad completa.
3. Ponerme en primer lugar
Puedes llamarme egoísta, pero una de las cosas que cada una de mis relaciones anteriores me ha enseñado es a ponerme a mí primero. No hay hombre vivo que deba ser más importante para mí que yo misma.
Lo último que te digo es que debes ser egocéntrico o que debes desatender por completo las necesidades y los deseos de la persona que tienes al lado. Sólo asegúrate de no desatenderte a ti mismo en el proceso.
4. Que soy suficiente
Cuando entras en una nueva relación, quieres hacer todo lo posible para gustarle más a esa persona. Eso no significa que debas cambiarte a ti mismo por su bien o para que te quiera más.
Lo que mis relaciones fallidas me enseñaron es que nunca debo cambiar por nadie. Soy más que suficiente tal y como soy y cualquiera que no pueda aceptar mi verdadero yo no merece un lugar en mi vida.
Recuerda que perderte por atraer a un chico es lo peor que puedes hacer. Porque si te quiere de verdad, aceptará todos tus defectos y cualidades. Y nunca te hará sentir que no eres suficiente.
5. Que puedo hacerlo por mí mismo
Durante mucho tiempo pensé que necesitaba a un hombre para completarme. Pensaba que era mejor estar con cualquiera que estar sola.
Pero tras numerosos fracasos sentimentales, aprendí que nada de eso es cierto. Aprendí que puedo arreglármelas sola. Que mi soltería es una bendición que debo aprovechar de la mejor manera posible.
Aprendí que soy una mujer independiente que puede caminar sola por la vida sin necesidad de que ningún hombre me guíe. Aprendí que es mucho mejor estar soltera que con el hombre equivocado. Y que debo permanecer soltero hasta que llegue el hombre adecuado.
6. Que soy más fuerte que todo el dolor
Cuando te rompen el corazón y se rompe la relación en la que tanto has invertido, estás seguro de que tú también te romperás en pedazos. Pero a medida que pasa el tiempo, ves que no lo harás.
Con el tiempo, ves lo fuerte que eres en realidad y te das cuenta de todo lo que eres capaz de hacer. Y esto es exactamente lo que me han enseñado cada una de mis relaciones fallidas. Me hicieron ver mi fuerza y mi valentía. Me hicieron comprender que no existe ningún hombre que pueda doblegarme.
Me enseñaron que soy más fuerte que todo el dolor y más fuerte que todo lo que me ha estado oprimiendo. Más fuerte que mi pasado, más fuerte que todos los hombres que intentan hundirme.
A veces, incluso me enseñaron que puedo ser más fuerte que mis propias emociones y más fuerte que yo misma.
7. Que nadie te querrá hasta que te quieras a ti mismo
Lo último pero no menos importante que me enseñaron mis relaciones fallidas es la importancia del amor propio. Me hicieron darme cuenta de que desamar a la persona equivocada es un acto de amor propio.
Llegué a comprender que quedarte con alguien que no te merece significa que no te quieres lo suficiente. Significa que inconscientemente crees que mereces ese amor a medias que has estado recibiendo.
Mis relaciones fallidas me hicieron darme cuenta de que nadie puede apreciarme o respetarme hasta que yo misma lo haga. Que nadie puede quererme como yo quiero que me quieran hasta que aprenda a quererme a mí misma.