Masoquista, mocoso, conejito de cuerda, culito, pequeño, mascota, esclavo... Si te interesa el estilo de vida BDSM, probablemente algunos de estos términos te suenen. Tal vez te consideres perteneciente a uno de estos tipos de sumisas, o sientas curiosidad y te estés sumergiendo en el mundo de la sumisión. torcedura y la comunidad BDSM.
Para entender la sumisión un poco más a fondo, es útil explorar sus opciones. Hay varias formas de dividir a las sumisas en categorías, en función de varios elementos. Aun así, tenga en cuenta que estas categorías no son definitivas ni exclusivas.
Ser una sumisa no consiste en encajar en un determinado papel, sino en someterse de una forma que te haga sentir única. Aun así, la información sobre lo que hay ahí fuera puede darte una idea del tipo de sumisa que quieres ser y ayudarte a dar un paso para explorarlo.
Definición de los tipos de sumisas según los elementos del sadomasoquismo
Sumisa es un término amplio que se utiliza para describir a alguien que ha cedido el control a otra persona. Hay muchas formas de experimentar la sumisión, y depende del sumiso decidir lo que significa para él.
Antes de involucrarse en una relación D/s, es esencial tener un fuerte sentido de uno mismo. Cualquier relación sana depende de que todos los implicados se respeten a sí mismos, lo que es especialmente importante en una relación de intercambio de poder.
No todas las relaciones BDSM son iguales, y no todos los tipos de sumisos están dispuestos o son capaces de ciertas cosas. Veamos algunos elementos que definen Relaciones dominantes/sumisas.
1. Duración
La sumisión puede ser temporal o durar mucho tiempo. Algunas parejas D/s mantienen relaciones comprometidas y otras sólo se juntan para una escena. Para algunos, la práctica del BDSM se limita al dormitorio; otros giran totalmente en torno al intercambio de poder.
- Intercambio de energía a corto plazo
Tu sumisión o incluso la totalidad de la relación con tu pareja dominante puede tener lugar durante una escena. Una escena es un espacio en el que tienen lugar actos BDSM tras una cuidadosa negociación. Puede tratarse de actos sexuales, sadismo y masoquismo, juegos de rol u otras actividades planificadas.
Planificar una escena no es negociable si quieres practicar un BDSM saludable. Implica discutir y acordar lo que va a ocurrir, establecer normas y límites y dar el consentimiento.
- Intercambio de energía a medio plazo
Algunas personas permanecen en sus roles D/s sólo durante una escena, mientras que otras amplían el intercambio de poder a más aspectos de sus relaciones. Puede que decidas ceder el control de ciertos aspectos de tu vida a otra persona.
De la misma manera que una escena individual se negocia de antemano, es esencial una discusión cuidadosa y meditada para establecer las normas de cesión de poder sobre partes de tu vida a otra persona. Hay responsabilidades por ambas partes, y no es algo que deba tomarse a la ligera.
- Intercambio de energía a largo plazo
Algunas parejas D/s permanecen en sus roles a tiempo completo en lo que se denomina una relación de Intercambio de Poder Total (TPE). El sumiso confía al dominante el control de su vida 24 horas al día, 7 días a la semana. Suelen denominarse relaciones amo/esclavo o ama/esclava.
Hay que tomarse en serio este tipo de relación. Algunas personas preparan los contratos después de las negociaciones. Para cualquier tipo de relación BDSM, es importante establecer límitesEn la mayoría de los casos, el intercambio de poder es muy amplio, con límites, palabras de seguridad y necesidades.
2. Nivel de presentación
La forma en que elijas someterte no tiene nada que ver con la igualdad. En un relación sana de cualquier tipo, todos los implicados son apreciados y valorados. Una relación D/s sana funciona de la misma manera, siempre que tus elecciones sean consensuadas.
Sea sincero y realista consigo mismo para decidir qué tipo de presentación le conviene. ¿Qué necesitas para satisfacer tus necesidades emocionales y físicas? ¿Cuáles son tus límites? ¿A qué nivel de control puedes renunciar para obtener lo que necesitas de la relación?
- Fondo
Muchas personas prefieren este término porque no se identifican exactamente como sumisos. Es el mismo término que se utiliza en las relaciones homosexuales y tiene más o menos el mismo significado: la pareja que disfruta recibiendo.
A diferencia de la sumisa, que desea entregarse y someterse al control del dominante porque sí, la nodriza disfruta sobre todo de las sensaciones.. Actos como los azotes y los tirones de pelo o el subidón de ser mandoneado y dominado contribuyen a su placer.
Esta es la forma más común que la gente elige para condimentar la vida sexual de vainilla mediante la adición de algunos actos que consideran pervertidos.
- Sumisa sexual
Una sumisa sexual sólo disfruta de la dinámica D/s en el dormitorio pero lleva una vida vainilla. El intercambio de poder se produce en el dormitorio, donde este tipo de sumiso asume su papel. Fuera de este entorno, pueden tener personalidades vainilla o incluso dominantes.
A diferencia de un "bottom", un "sex sub" no lo hace sólo por las sensaciones. Aunque normalmente les excita la dominación, también disfrutan siendo controlados en la cama y obedeciendo a su dominante.
- Sumisa no sexual
El sexo no es un componente necesario de una relación D/s. Algunas personas disfrutan sometiéndose de otras maneras. Independientemente de que haya sexo o no, la negociación previa y el consentimiento son vitales.
La sumisión no sexual se practica a través de la servidumbre, la obediencia, la disciplina doméstica y los juegos de rol. La sumisión es en gran parte psicológica, y ceder parte o todo el control a un dom satisface las necesidades del sumiso.
- Esclavo consentido
Un paso más allá de un sumiso, un esclavo está bajo el control total de su Amo o Ama. El esclavo se considera una posesión que sólo existe para obedecer y complacer a su dominante.
Este tipo de acuerdo suele implicar un compromiso y supone la cesión total del poder. Se suscribe con cuidado y va precedido de negociaciones detalladas.
Emocionalmente, un esclavo se siente feliz cuando su Amo es feliz. Se someten al control de su Ama, confiando en que cumplirá su acuerdo, que suele ser a largo plazo.
3. Tipos de actos BDSM
Como en otros aspectos de las relaciones D/s, hay una gran variedad en los actos que se pueden practicar. A menudo incluyen elementos sexuales, pero no es un requisito. Algunas prácticas que se incluyen en dominio y la sumisión ni siquiera requieren contacto físico.
Por ejemplo, un estilo de vida fetichista conocido como findom, o dominación financiera, puede tener lugar totalmente en línea. El sumiso da dinero o regalos al dominante financiero, y la relación no tiene por qué implicar nada más.
- Intercambio de energía
Tenga en cuenta que el término para el elemento crucial de BDSM se llama potencia intercambio, en lugar de rendición de poder o algo por el estilo. Es importante tener esto en cuenta porque se supone que una relación D/s beneficia a todos los implicados en la misma medida.
Lo que cada persona obtiene de la relación no es lo mismo, pero debe tener el mismo valor para todos.
Intercambio significa dar o tomar una cosa de valor a cambio de otra, y en este sentido, el sumiso cede el control a cambio de liderazgo, orientación, toma de decisiones o cualquier otra cosa que necesite.
Si el dominante recibe más de lo que da, no está cumpliendo su función.
- Servicios
D/s no siempre implica sumisión sexual. Algunas sumisas disfrutan realizando actos de servicio, como tareas domésticas, cuidar de sus dominantes acicalándolas o dándoles masajes, cocinar y, en general, hacerles la vida más cómoda.
Es raro que un suplente sólo se haga útil de esta manera. Este tipo de sumisa suele disfrutar con la humillación y encuentra formas de experimentarla a través de estas acciones.
Además de la servidumbre, su dominante también puede esperar que estén sexualmente disponibles, lo que ilustra la idea de que las diferentes expresiones de sumisión no son mutuamente excluyentes.
- Sado-masoquismo
Los elementos del sadomasoquismo, como el dolor, la humillación, el bondage y los juegos de impacto, suelen formar parte de las relaciones D/s. Algunos de estos actos son también simple violencia. Algunos de estos actos también son simple y llanamente violencia, así que ¿dónde está el límite?
La distinción entre abuso y sadomasoquismo es el consentimiento. El consentimiento informado, en el que todos los implicados saben exactamente lo que consienten, los límites establecidos y un sistema de palabras de seguridad garantizan que el sumiso no esté realmente indefenso y que el dominante no se aproveche.
- Juegos de rol
Algunas personas practican el BDSM para cumplir una fantasía, sexual o no sexual. A menudo son ellos los que controlan la escena porque ésta se desarrolla principalmente para satisfacer sus deseos. A menudo les gusta la humillación y no servir a la pareja dominante.
Estos tipos de sumisiones incluyen: amantes de pañales para bebés adultos, feminización "forzada", juego de género, así como diversos escenarios como profesor/alumno, policía/criminal, etc.
La comunicación continua y el consentimiento, así como las palabras de seguridad, deben respetarse.
¿Cuáles son los distintos tipos de sumisas?
Dependiendo de los elementos de los que hayamos hablado, puede haber muchos tipos de sumisos. Algunos quieren obedecer, a otros les gusta el dolor, a otros les gusta que les cuiden y otros quieren ceder todo el control al dominante.
Diferentes tipos de subs prefieren diferentes tipos de doms, y viceversa - no todos los tipos de dominantes son buenos para todos los tipos de sumisos.
Este tipo de relación puede interesar a personas de cualquier sexo o sexualidad. Algunas personas que mantienen relaciones D/s sólo lo hacen por el intercambio de poder, y otras mantienen una relación sentimental. Hay monógamos y poliamoroso Relaciones BDSM.
He aquí algunos ejemplos de diferentes tipos de sumisas.
1. Servicio Sub
Este tipo de subalterno realiza sobre todo tareas domésticas y pasa la mayor parte del tiempo limpiando, cocinando y realizando tareas domésticas. Se podría decir que un subalterno de servicio cumple la función de una criada o un mayordomo.
Un sumiso de servicio disfruta ayudando a su dom sin necesidad de que se lo ordenen. No sólo disfrutan complaciendo a la gente y sirviendo a los demás, sino también siendo corregidos cuando cometen un error. Sus necesidades se satisfacen cuando son capaces de facilitar la vida de su pareja.
En el fondo, quien opta por convertirse en subcontratista de servicios quiere ser útil. La utilidad y el cuidado de sus compañeros de juego forman parte de su sumisión. Este tipo de sumisión no gira en torno a escenas: es todo un estilo de vida.
Los suplentes pueden desempeñar diversas funciones, y un suplente de servicio rara vez es sólo un suplente de tareas domésticas. La mayoría de las veces, también satisfacen las necesidades sexuales o emocionales de su dom, a menos que el dominante tenga más de un sub.
2. Esclavo
Un sumiso principiante ni siquiera debería plantearse adoptar este papel. La profundidad de la sumisión requerida en esta dinámica hace que sea fácil de abusar por alguien controlador que se hace pasar por dom.
Como en todo tipo de BDSM, todos los implicados deben saber exactamente en qué se están metiendo. La dinámica Amo/esclavo es sólo para practicantes experimentados que ya están familiarizados con lo que es el TPE (intercambio total de poder) y son conscientes de lo que implica.
Entre todos los tipos de sumisión, la esclava es la que más control cede. Disfrutan cediendo el control total de parte o de toda su vida cotidiana a su pareja dominante y dependiendo de ella para todo.
Aun así, no todos los aspectos de la vida de un esclavo están siempre incluidos en la dinámica 24/7. Dependiendo de la persona, puede haber cosas de las que tenga que ocuparse sola.
Esta dinámica específica de intercambio de poder suele incluir un contrato que define qué partes de la vida del sumiso están bajo el control de su pareja y qué libertades requiere.
3. Masoquista
Es el tipo de sumisa más conocido entre los no practicantes, aunque es uno de los más complejos. Un poco de dolor puede hacer que el placer sea más intenso incluso en las interacciones vainilla, pero un masoquista disfruta con distintos niveles de dolor.
Un masoquista puede disfrutar con juegos de impacto con azotes y fustas, bondage, humillación, juegos con los bordes, etcétera. La posibilidad de sufrir lesiones graves hace que estas prácticas sean arriesgadas, pero el papel de un masoquista es delicado también a nivel emocional y mental.
Este tipo de sumisión implica conocerse muy bien a uno mismo. La necesidad de dolor y otros aspectos del masoquismo tienen su origen en el subidón que experimenta el sumiso por la respuesta fisiológica de su cuerpo al dolor y cómo le afecta mental y emocionalmente.
Con frecuencia, esto permite al submarino vivir el momento, separado de los problemas cotidianos, y encontrar la libertad en él. Por esta razón, los masoquistas no suelen disfrutar de otros aspectos de la sumisión. Sólo son sumisos en el dormitorio o durante una sesión de juegos, al encontrar ya satisfechas sus necesidades.
4. Brat
Este es el papel más común para los nuevos fondos que acaban de empezar con el BDSM.
Un mocoso es juguetón, descarado y presiona a su dominante para llamar la atención y ganarse un castigo. Les gusta la fuerza y quieren ser dominados. Este tipo de sumiso necesita una pareja que pueda tomar el control y ponerlo en su lugar para satisfacer sus necesidades.
Les gusta el juego duro. Este tipo de sumiso se porta mal a propósito o actúa como un malcriado para provocar a su pareja a que lo domine. Un mocoso empuja hacia atrás y se resiste al dominante para sentir que el dominante merece sumisión.
Para un dom, un mocoso puede ser uno de los subtipos más difíciles y requiere mucha paciencia. El tipo de dom que disfruta jugando con mocosos se llama domador de mocosos. Tanto el mocoso como el domador obtienen placer de la lucha y del acto final de sumisión.
Una subcategoría de mocosos llamados masoquistas listillos utiliza la provocación verbal en lugar de otros comportamientos para incitar a su dom a darles lo que necesitan.
5. Pequeño
En papá domEl tipo de relación niña/niña ha hecho que este tipo de dinámica sea bien conocida. El dominante asume el papel de cuidador y el sumiso el de pequeño. No se limita a un dom masculino y una sub femenina o a relaciones heterosexuales.
Esta dinámica no siempre implica un juego de edades (actuar como más joven o más mayor que su edad real), pero puede ocurrir. Algunos pequeños no pretenden ser un niño, pero adoptan aspectos infantiles que incluyen en su comportamiento y en la relación.
El dom actúa en un papel de cuidador mayor. Esta dinámica puede incluir desde asegurar a la sumisa que es una buena chica hasta disciplinarla cuando la pequeña se porta mal. Esta dinámica puede ser completamente no sexual, o puede haber sexo de por medio..
Un sumiso en el papel de pequeño disfruta sintiéndose cuidado y olvidando momentáneamente el estrés de la vida adulta para disfrutar de placeres sencillos e infantiles. Algunos pequeños no quieren otra cosa que mimos y cuidados.
Una escena BDSM en la que participen niños pequeños suele implicar juegos, disfraces y actividades que los niños disfrutarían. Este tipo de sumiso encaja bien con un dominante más tierno y amable que disfrute cuidando de su sumiso.
6. Mascota
De forma parecida a las crías, algunos subs disfrutan asumiendo el papel de mascotas, siendo su dom su dueño y cuidador.
Los juegos con mascotas suelen incluir gatitos, perritos y ponis como personajes que adoptan los suscriptores. Esta dinámica no se considera un juego de rol: una mascota encarna al animal que ha elegido y entra en un espacio mental de sumisión conocido como espacio de mascota.
A los sumisos que juegan con mascotas les puede gustar la deshumanización y el exhibicionismo que implica este tipo de dinámica y la libertad sin sentido de la responsabilidad que conlleva.
El juego puede incluir caricias, mimos, adiestramiento y disciplina. También se incluyen diversos disfraces y complementos, como colas, correas, golosinas o jaulas.
Seguridad y consentimiento en el BDSM
Los principiantes que se interesan por el BDSM a veces tienen ideas equivocadas sobre lo que es. Pueden tener una idea vaga o una impresión completamente equivocada. La seguridad y el respeto mutuo son las piedras angulares de este estilo de vida.
He aquí algunos puntos importantes que debes tener en cuenta antes de iniciarte en el BDSM:
- Seguro, sano y consentido. El principio fundamental de unas relaciones BDSM sanas está contenido en este lema. Afirma que todas las actividades realizadas deben ser seguras y que todo el mundo puede dar su consentimiento y lo da.
- Palabra clave. Se trata de una palabra elegida antes de la escena que puede utilizarse para detener las actividades si éstas resultan excesivas para cualquiera de los implicados. Algunas personas utilizan el sistema del semáforo (verde para seguir, amarillo para reducir la velocidad y rojo para parar). Cuando no se puede hablar, se utilizan señales no verbales, como levantar la mano o pellizcar.
- Cuidados posteriores. Tomarse un tiempo después de una escena o de mantener relaciones sexuales para abrazarse, limpiarse, cuidarse y expresarse afecto mutuamente. Es una forma de relajarse después del juego, ya que muchas personas pueden experimentar sentimientos negativos después de una escena.
- Cincuenta sombras de Grey. Este libro/película no representa una imagen exacta y adecuada del estilo de vida D/s. Es la representación de una relación malsana y abusiva. La protagonista no elige explorar el BDSM por su cuenta, sino que se ve obligada a hacerlo. El personaje masculino es la representación de un sádico manipulador y no de un verdadero dom.
- Banderas rojas. Señales de que estás tratando con un maltratador y no con un dom:
1. Avergonzarte o presionarte para que hagas algo.
2. Quiere jugar sin una palabra de seguridad.
3. Hacerte consentir algo que no te gusta o reconsiderar un límite.
4. No da cuidados posteriores.
5. Le humilla fuera del juego.
6. Se enfada si no le obedeces.
¿Cuál es usted?
Esta visión detallada de los distintos tipos de sumisas ha ilustrado lo compleja que puede ser la identidad sumisa. Dependiendo de sus preferencias, necesidades y circunstancias, una sumisa puede necesitar cosas diferentes en momentos distintos. Por esta razón, una sumisa rara vez desempeña un solo papel.
Lo ideal es que la dinámica de intercambio de poder se base en la confianza mutua y en satisfacer las necesidades tanto del dominante como del sumiso. Una relación D/s no debe iniciarse a la ligera, sino con comunicación y consideración.
Si has encontrado algo que despierte tu interés en este artículo, mantente a salvo y disfruta del kink.