Cuando me dejaste por primera vez, extrañamente, no tenía esperanzas de volver a ser tuya ni de intentar reconstruir nuestra relación.
No me malinterpretes, eso no significa que no te echara de menos, es sólo que me hiciste tanto daño que nunca pensé en darte otra oportunidad, a pesar de que me todavía te quería.
En lugar de romperme la cabeza pensando en cómo reconquistarte, puse toda mi energía en intentar superar el trauma que me causaste y sobreponerme al hecho de que el hombre al que entregué todo mi corazón estaba dispuesto a hacerlo añicos sin pestañear.
Me concentré en encontrar la manera de dejar de amarte.
Para ser sincero, en el fondo pensaba que nunca lo conseguiría.
Creí que nunca me libraría de esa mezcla insana de amor, odio, nostalgia y repulsión que sentía cada vez que cruzabas por mi mente.
Y francamente, eso era prácticamente todo el tiempo.
Estaba convencida de que nunca podría encontrar la fuerza en mí misma para perdonarte por aplastarme.
Estaba segura de que nunca podría olvidar todo lo que me hiciste y todo el dolor que me causaste.
Sin embargo, al cabo de un tiempo, poco a poco, me sorprendí a mí misma avanzando, sin ni siquiera ser consciente de ello.
Me di cuenta de que estaba herir y curar al mismo tiempolo que supuso un enorme progreso.
Con el tiempo, paso a paso, dejaste de existir dentro de mí. En contra de todas mis expectativas, te convertiste en parte de mi doloroso pasado.
Así que supongo que me equivoqué. No sé si creía que te quería más de lo que en realidad te quería o si me consideraba emocionalmente más débil de lo que en realidad era, pero el hecho es que, de alguna manera, conseguí dejar de quererte.
Sin embargo, definitivamente tenía razón en una cosa: nunca te perdoné y no pienso hacerlo.
Seguí adelante, pero eso no significa que haya olvidado el infierno por el que me hiciste pasar.
Por suerte para mí, ya no me consumen el resentimiento y el odio.
Sin embargo, que no me pase cada segundo de mi día deseando que caigas muerto, no significa que te haya perdonado.
Que te haya superado no significa que de repente me haya vuelto amnésica y todos los problemas y traumas que me causaste se hayan borrado por arte de magia.
Eso no quiere decir que haya conseguido borrar todos los días que pasé llorando por ti, todas las noches en vela en las que luché por respirar y todos los momentos en los que quise morir.
El hecho de que dejó de amar no borra el hecho de que cambiaste la esencia de mi ser para siempre.
No anula el hecho de que me dañaste irreparablemente y nunca podré ser la misma chica que era antes de que irrumpieras en mi vida.
No significa que te quiera de vuelta o que esté bien con todo el mal que me trajiste.
Eso no hace que tus fechorías sean aceptables ni que seas menos imbécil.
Que yo siga adelante no implica que quiera todo lo mejor para ti o que no desee que el karma te dé lo que te mereces.
Eso no significa que tenga mi bendición para que encuentre su felices para siempre y, desde luego, no significa que le desee una larga y próspera existencia.
Verás, el que yo decida seguir con mi vida no te da amnistía por todos tus pecados y no cambia el hecho de que me hiciste mal.
Sólo significa que fui lo suficientemente sabio como para darme cuenta de que quedarme en un sitio, mientras tú estás ahí fuera viviendo tu vida como si nada hubiera pasado, sería lo peor que podría hacer.
Así que no, no quiero que tengas la conciencia tranquila.
No quiero que pienses que tienes derecho a una vida tranquila, sólo porque yo encontré la forma de recomponer la mía.
Llámame mala persona, pero espero que pases el resto de tus días atormentado por cada una de mis lágrimas.
Que nunca dejarás de lamentar todo lo que me hiciste pasar. Que experimentarás todo el dolor devastador que me hiciste sentir.
Esto puede hacer que me parezca a ti, o incluso peor, pero Espero que nunca seas capaz de perdonarte a ti mismo por tratarme como lo hiciste y finalmente perderme para siempre.
Espero que la culpa y el remordimiento te sigan allá donde vayas, mientras respires, porque es la única forma de que se haga justicia.