¿Quién iba a pensar que me sentiría tan agradecida por ti y por la forma en que me dejaste marchar? Después de todas las noches sin dormir y las lágrimas, casi parecía imposible, pero aquí estamos.
No importa, ahora veo la razón por la que tenía que suceder. ¡Gracias!
Gracias por hacerme fuerte. Cuando te fuiste, estaba destrozada y hecha pedazos. No tenía confianza en mí misma y pensaba que era inútil e indigna.
Nada ni nadie podía ayudarme. Así que me ayudé a mí misma. Dejé de dar a los demás poder sobre mí. Aprendí lo que se siente al pensar que yo misma soy suficiente.
Cuando sabes que eres suficiente, nada puede moverte. Estás decidido y eres capaz de aceptar todas tus partes: tu lado duro y tu lado blando.
Dejé de verme como alguien que debía ser perfecto y, en su lugar, me permití ser lo que soy, y el mundo no se detuvo.
Ahora sé lo que significa defenderte. Ya no soy tan ingenua como antes. He aprendido que la gente puede decir que te quiere y mentirte a la cara, decir que se preocupa por ti y luego dejarte.
Sentí vergüenza, pero ahora sé que le puede pasar a cualquiera; fuiste tú, no yo. Nadie debería sentirse avergonzado por ser abierto y confiado.
Gracias por dejarme ir porque nunca quise a alguien que no luchara por mí. Cada día, estoy agradecida por no estar atrapada en una relación falsa y sin amor.
¡¿Quién quiere un amor a medias?! Yo no. Prefería estar sola y dormir tranquila sabiendo que no había engañado a nadie. Yo no era la egoísta y la que buscaba atención. No estaba mintiendo para alimentar mi ego.
Me enseñaste que nada es irreparable: puedo cometer un error y luego volver atrás y convertirlo en algo valioso.
Cometer un error no es el fin del mundo aunque lo parezca.
Me enseñaste que no importa lo buena, guapa, inteligente, divertida o cariñosa que sea, para algunos no será suficiente. Ahora no me importa: me veo bien por mí misma y disfruto siendo buena, divertida e inteligente, y eso es todo lo que importa.
Gracias a ti aprendí que es imposible cambiar a otra persona. Lo mejor que puedes hacer es amarla, y a veces el amor no es suficiente.
Después de que me manipularan y mintieran, no me rendí. Superé los momentos más difíciles yo sola.
Sin ti, me di cuenta de lo que quiero de mi vida y qué tipo de amor necesito. Fue como una epifanía.
Por fin dejé de malgastar mi energía en cosas inútiles y en las personas equivocadas. En lugar de eso, empecé a hacer cosas que me hacían sentir feliz y viva.
Tengo una vida por delante y estoy agradecido porque ahora sé cómo detectar a la gente como tú. Es sin duda una de las cosas más útiles que conozco.
Me has hecho darme cuenta de lo preciosa y rara que soy.
Gracias por dejarme ir porque ahora puedo encontrar a alguien que sea perfecto para mí porque sé lo que estoy buscando.
Me mostraste la importancia de luchar por el amor sin hacerlo nunca. Me hice la promesa de que nunca haré que nadie se sienta tan poco importante.
Cuando me dejaste ir, me diste una oportunidad; una oportunidad de mejorar todo en mi vida. Una oportunidad para el amor verdadero y para estar con alguien que me acepte tal como soy.
Pero lo más importante que me has dado es la oportunidad de volver a enamorarme de mí misma.
Si no fuera por ti, nunca me habría dicho a mí misma "eres suficiente" y habría aprendido a quererme tal como soy.