Es autosuficiente. Siempre ha sabido lo que necesita y lo que tiene que hacer por sí misma.
Nada le venía servido en bandeja de plata. Tuvo que ganárselo todo en la vida con su trabajo duro y su testarudez.
No tiene miedo de hacer las cosas por sí misma. Ha pasado por todo y eso le ha enseñado que la única persona en la que puede confiar es en sí misma.
No le resulta fácil abrirse a alguien y dejarse querer. Ella, que ha aprendido a hacerlo todo por sí misma y a no depender nunca de nadie, no puede imaginarse perdiéndose en un nudo de sentimientos confusos hacia otra persona.
Pero lo creas o no, ella puede amar y su amor es igual que ella -ferozmente independiente y ridículamente emocional.
Cuando ella se enamora, es algo que dura mientras tú no lo rompas haciendo algo egoísta y estúpido. Ella nunca será quien rompa su promesa de amarte.
Esto la está destrozando porque, por un lado, quiere dar todo de sí misma a alguien que se lo merezca, pero no quiere perder quién es. Verás, es muy difícil amarla, pero también vale la pena.
Tiene miedo de tropezar con alguien que no sea capaz de comprenderla y darle el espacio que necesita. Tiene miedo de volverse dependiente y de perder su verdadero yo, pero al mismo tiempo quiere dar a ese alguien especial todo de ella.
Quiere incluirlo en su vida. Quiere que unan sus caminos y luchen juntos. Aunque esto es aterrador como el infierno, ella lo quiere.
Su mente es el mayor problema aquí. Intenta acallarla. Intenta luchar contra su razón, que le dice que no necesita a nadie.
Le dice que ya está completa y que otra persona sólo puede arruinarla mientras su corazón lucha también por ganar. Su corazón, su lado emocional que es tan fuerte como el razonable, quiere que se rinda al placer, que se entregue al amor.
Entonces se encuentra a sí misma estrechándole, abrazándole, besándole, entregándose por completo a él. Nada más importa.
Su lucha de la razón y el corazón ha terminado. El corazón ha ganado. Ahora depende de su amor. Ahora depende de su tacto cariñoso y de sus palabras amables. Ahora está enamorada.
Es entonces cuando se vuelve vulnerable. Es cuando se pierde porque no tiene nada bajo control. Está completamente expuesta a ti. De repente es consciente de la situación en la que se encuentra.
Te ha dejado entrar. Ha confiado en ti y puedes herirla fácilmente. Así que se echa atrás. Ella construye este enorme muro emocional porque se ha dado cuenta de que está completamente desnuda, expuesta y a tu merced.
Tiene miedo. Ser sólo independiente o sólo emocional es imposible para ella. No puede elegir ser sólo una cosa y, sin embargo, es imposible ser sólo una.
Tiene que encontrar el equilibrio. Si es independiente, ansía el amor y cuando lo es, echa de menos su libertad.
Tiene que ser fiel a sí misma. Tiene que ser independiente y confiar más en sí misma. Sabe que sus decisiones son las mejores para ella.
Sabe que su mente nunca la engañará, pero no puede tener tanto miedo al amor. Tienes que demostrarle que existe un equilibrio entre ambos.
Tienes que hacerle ver que, aunque se enamore, no se perderá a sí misma. No perderá la capacidad de tomar sus propias decisiones.
Ayúdala a ser quien es y ayúdala a abrazar su lado emocional, porque esa es también su parte, no sólo su razón y su mente.
Es una mujer fuerte. Es una mujer emocional. Es la mezcla perfecta de ambas.