Todos y cada uno de nosotros reprimimos nuestras emociones hasta cierto punto. Se ha vuelto socialmente aceptable ir por ahí con cara de perra porque así no te tachan de "llorón" o de histérico. Esto ocurre sobre todo en el caso de los hombres, porque desde muy pequeños se les ha enseñado a "ser hombres" y a no mostrar nunca sus verdaderas emociones. Emociones como la ira y la felicidad son completamente aceptables, pero cuando se trata de tristezaSi no lo hacen, su corazoncito se apaga y ni siquiera se molestan en pensar cuál es la causa.
¿Es usted una de esas personas que reprimen sus emociones? Si no estás seguro, entonces lee con atención y haz un autoanálisis para ver si realmente lo eres, porque si esto es cierto para ti, entonces reprimir tus emociones puede convertirse en algo muy peligroso para tu salud mental y física.
1. 1. Falta de sueño
Esas noches son las peores, cuando estás tumbado en la cama, mirando al techo o moviéndote nervioso porque tu cerebro está ardiendo y no te deja dormir. No hay nada peor que la falta de sueño. Es peligroso porque es perjudicial para todas tus relaciones, para tu trabajo y también para tu salud mental y física. El sueño es crucial para nuestro sistema inmunitario.
2. Malas relaciones
Por supuesto, reprimir tus emociones e intentar ocultárselas a tus amigos y a tu pareja es algo que arruinará esas relaciones. No puedes seguir discutiendo o siendo pasivo-agresivo sólo porque no sabes cómo manejar tus emociones correctamente. En lugar de esconder esas lágrimas, en lugar de esconder el hecho de que has sido herido hasta los huesos, estás atrapado en relaciones con personas que se aprovechan de ti, que no son genuinas y todo es por el hecho de que no estás siendo honesto acerca de cómo te sientes y eso es extremadamente peligroso.
3. 3. Hipertensión arterial
Un estudio realizado en la Universidad de Stanford demostró que reprimir las emociones puede provocar problemas cardiovasculares, lo que se traduce en hipertensión. Por supuesto, esto no tiene por qué ocurrirle a todas las personas que reprimen sus emociones, pero es posible que usted corra un alto riesgo.
4. Depresión
Ocultar tus emociones a las personas que te rodean suele tener su origen en un problema interior más profundo. En la mayoría de los casos, una persona que reprime sus emociones piensa que no es digna de sentirlas, puede que le hayan enseñado a una edad muy temprana que la ira, la tristeza o la felicidad excesiva es algo malo y que debe mantenerse alejada de estas emociones. Debido a esto, las personas suelen desarrollar una depresión de alto funcionamiento, que es muy peligrosa para la mente y el cuerpo.
5. Buscas escapatoria
Teniendo en cuenta que tus emociones siguen ahí, las muestres o no, puede que adquieras el hábito de escapar de la realidad en cualquier momento. Para ello, te refugias en tu cabeza, en tu habitación, en tus libros o, simplemente, no hablas con la gente que te rodea (parece que ni siquiera eres capaz de oírla). Al escapar de la realidad, acabas por no enfrentarte nunca al mundo que te rodea.
6. Problemas digestivos
Debido al estrés por el que estás pasando, acabarás teniendo problemas digestivos que muy probablemente te lleven a un aumento excesivo de peso. Muchas personas se lanzan a 'comer compulsivamente' para 'llenar el agujero' que llevan dentro. La mayoría de ellas ni siquiera son conscientes de la razón por la que lo hacen. Recurren a la comida como única salvación.
7. Recurrir a las adicciones
El más peligroso de todos los síntomas de las emociones reprimidas son las adicciones. Las adicciones dan ese momento de satisfacción en el que te sientes completo. Te sientes completo mientras tomas tus adicciones. Esto incluye el alcohol y las drogas, por supuesto, que no aportan nada bueno a tu cuerpo. Tengo una amiga que una noche probó unas drogas y a la mañana siguiente se me acercó diciéndome que esa era la única felicidad que había sentido en su vida y que quería ser siempre feliz y ese fue el momento en que se convirtió en drogadicta. De la noche a la mañana. De la noche a la mañana. Así que no os toméis vuestras adicciones a la ligera, id a buscar ayuda porque cosas así son realmente peligrosas.