Sí, sólo puedes convertirte en una mujer fuerte.
La vida se vuelve dura. Se vuelve devastadora para algunos y aún peor para otros. Es entonces cuando se forjan los verdaderos y fuertes guerreros y se muestran sus verdaderas habilidades.
A través de los retos y las dificultades, las mujeres se construyen a sí mismas a prueba de balas. Como ya se ha dicho, nadie nace así.
Cada una de las mujeres que ves y admiras por su fortaleza, ha pasado por un infierno y ha vuelto para convertirse en la mujer que es hoy.
Dicen que todo tiene un precio. Bueno, esto es más que cierto y cada mujer fuerte lo sabe, cada una de ellas pagó el precio.
Las mujeres fuertes resurgen de las cenizas de sus vidas y despliegan sus alas en el momento perfecto. Eso es lo que las hace diferentes.
En el momento en que deben volar, lo hacen. Mientras otros permanecen encadenados al suelo, asfixiándose en su propia tristeza y autocompasión, ellos aprovechan el momento y simplemente vuelan hacia lo desconocido.
No es un movimiento fácil de hacer, pero es el que distingue a las de acero de las blandas. Es un movimiento que da a luz a la mujer fuerte en la que todas queremos convertirnos.
Esto es qué define a una mujer fuerte. Esto es en lo que todos tendemos a convertirnos.
1. No se esconden de sus sentimientos
Aceptan todo lo que les pasa por la cabeza y el corazón. Ya sea un caos total o un orden perfecto, encuentran la manera de manejarlo. No hay lugar para el pánico ni para la autocompasión.
Sólo hay espacio para encontrar soluciones a los problemas.
Toda mujer fuerte sabe que reprimir los sentimientos lleva a acabar en un estado aún peor del que ya se estaba.
Es más fácil y mucho más sabio enfrentarse a lo que hierve dentro lo antes posible.
2. Nunca dudan de sí mismos
Nunca están perdidas. Es imposible que una mujer así se quede atascada en un sitio sin saber qué hacer a continuación. Una mujer fuerte siempre tiene un plan de respaldo y siempre sabe qué hacer a continuación.
La fórmula de su éxito es la confianza. Simplemente creen que pueden conseguirlo todo y confían en su propio criterio.
Nada puede derribarles ni hacerles dudar de las decisiones que ya han tomado. Todos deberíamos pensar así, ¿no?
3. Son honestos, a veces francos
Las mujeres fuertes no encuentran en la mentira ni siquiera una opción que puedan utilizar. Siempre te dirán la verdad, pase lo que pase.
Aunque la verdad no sea exactamente lo que quieres oír, te la servirán porque, al fin y al cabo, mereces saberlo para poder tomártelo de forma constructiva y mejorar.
Una mujer fuerte nunca te hará daño a propósito ni te mentirá sólo para hacerte sentir mal.
Una mujer fuerte quiere para ayudarte a mejorar y unirte a su club lo antes posible.
4. Saben cuánto valen
Saben cuánto están dispuestos a conseguir. Saben de lo que son capaces y de lo que no.
Pero quizá el factor más importante de la conciencia de su propia valía sea el hecho de que nunca se compararán con otra persona.
Las mujeres fuertes sólo se tienen a sí mismas para juzgar y valorar y a nadie más.
No les intimida el éxito de nadie porque, en cambio, se centran en el suyo propio.
5. Saben perdonar
Una mujer fuerte no malgastará su energía en guardar rencor y estar enfadada con alguien.
Ella simplemente no tiene tiempo para ocuparse de cosas infantiles. Es lo suficientemente madura como para ser la mejor persona y perdonar incluso cuando no es culpa suya.
No dejes que su naturaleza indulgente te engañe. Eso no significa que puedas salirte con la tuya con una mujer así. No puedes mentirle y no puedes aprovecharte de ella.
Sabe perdonar, pero eso no significa que no sepa castigar y protegerse. Si la traicionas, no tendrás otra oportunidad de volver a hacerlo.
6. No quieren atención, quieren respeto
La atención es para los inmaduros. Las mujeres fuertes exigen respeto e igualdad. Una mujer fuerte nunca suplicará por algo que quiere.
Lo conseguirá por sí misma. Si fracasa, se las arreglará sola, pero nunca suplicará por ello.
Nunca dan explicaciones ni exigen respeto. Si una persona no la respeta, verá que no hay lugar para ella en la vida de esa persona y simplemente se marchará.
7. Siempre guardan un recuerdo del momento que les hizo fuertes
O momentos... no importa; la cuestión es que nunca olvidan las luchas y el dolor que les forjaron para convertirse en el guerrero que son ahora.
Si no fuera por el dolor y las pérdidas, nunca se habrían convertido en lo que son.
Están agradecidas por cada cosa que les ha pasado en la vida. Una mujer fuerte nunca olvidará de dónde viene ni quién es.
8. Admira a todas las mujeres fuertes hasta que te conviertas en una
No tiene sentido sentir celos de estas mujeres. Sólo puedes admirarlas y, sobre todo, aprender de ellas.
La forma en que actúan, la forma en que luchan por sí mismos es impresionante.
Hacen que parezca tan fácil conseguir esa determinación y actitud, pero no lo es en absoluto.
Respétalos porque han recorrido un largo camino para llegar a ser lo que son. Algún día, espero que tú también lo hagas.