Cuando eras pequeña, veías y leías cuentos de hadas.
Viste cómo una bella princesa era rescatada por un príncipe fuerte, valiente e intrépido. Y los dos vivieron felices para siempre.
Y a medida que crecías, seguías viendo películas románticas. En todas ellas, la chica era inocente y sensible, mientras que el protagonista masculino era un tipo duro que venía a salvar el día.
Y ninguno de estos escenarios presentaba a un hombre como vulnerable, como si eso le hiciera débil.
Y con el tiempo, has adoptado este concepto de los roles de género como algo normal y natural, cuando en realidad es cualquier cosa menos eso.
Y en el fondo, eso es exactamente lo que querías para ti. Por supuesto, nunca esperaste que tu vida fuera un cuento de hadas: siempre supiste que no encontrarías a tu Sr. Perfecto.
Pero siempre estabas buscando a tu príncipe azul y siempre asumiste que éste era el único tipo de hombre que podía darte tu final feliz.
Querías tener a tu lado a ese hombre intrépido y duro, que sería el salvador que siempre has esperado.
Con el tiempo, has ido añadiendo diferentes cualidades a la personalidad de este tipo imaginario.
Te has imaginado cómo debería ser y cómo debería tratarte, pero la premisa siempre ha sido la misma.
Y la sociedad moderna ha apoyado sus opiniones. Todo el mundo insinuaba cómo debía ser un hombre de verdad.
Todo el mundo te diría que tiene que hacerte sentir como una mujer y que necesitas un hombre de verdad a tu lado.
Este hombre debe ser fuerte física y emocionalmente. Debe ser alguien en quien siempre puedas confiar y que siempre te cubra las espaldas, pase lo que pase.
Y todo esto es cierto: necesitas a alguien así. Pero esto no significa que este hombre no tenga emociones.
Esto no significa que este hombre no pueda estar triste, dolido o decepcionado. No significa que nunca llore y, desde luego, no significa que no luche contra sus propias inseguridades.
No significa que un chico sea menos hombre si tiene emociones, si permite que éstas le controlen de vez en cuando y si muestra y verbaliza esas emociones.
En cambio, lo convierte en un hombre digno de su tiempo y sus esfuerzos.
Si un hombre no tiene miedo de mostrarte su lado vulnerable, es una clara señal de que cree en ti.
Este hombre no teme que utilices sus secretos en su contra y no teme que te aproveches de sus debilidades.
Te cree hasta el punto de estar seguro de que puede mostrarte su verdadero yo, sin miedo a ser juzgado o ridiculizado.
Está seguro puede confiar en ti, pase lo que pase, y te considera una persona especial en su vida y por eso quiere que conozcas la esencia de su personalidad.
Este hombre es obviamente en contacto con sus emociones y significa que entenderá mejor a los tuyos. Significa que tendrá menos posibilidades de ser egoísta y egocéntrico porque probablemente sea empático.
Significa que es honesto y que nunca huye de sus sentimientos. Significa que te respeta lo suficiente como para no fingir que es alguien que no es.
Significa que tiene la confianza suficiente para mostrarte su verdadera cara y que no necesita que tú ni nadie a su alrededor le asegure que es un hombre de verdad...porque sabe quién es.
Aunque puedas pensar que este hombre es demasiado débil, créeme, no podrías estar más equivocado. Su fuerza se aprecia mejor en su vulnerabilidad.
Sólo te demuestra que es lo bastante fuerte como para reconocer sus emociones más profundas, afrontarlas por sí mismo y compartirlas contigo.
Y este es exactamente el tipo de hombre que necesitas en tu vida y el tipo de hombre que te hará sentir la mujer más feliz del mundo.
Aunque no lo parezca, este chico será tu roca para el resto de tu vida. Será tu mayor apoyo, independientemente de lo que te pase en la vida.
Este será el hombre en el que siempre confiarás y el hombre en el que siempre podrás confiar. El hombre que será tu puerto de paz y tu ancla.
Así que, por favor, deja de perseguir a los tipos equivocados.
Deja de ir detrás de chicos malos que te dan emoción y deja de engañarte pensando que uno de esos chicos es tu príncipe azul.
Deja de perseguir a tipos duros que no te muestran emociones sólo porque alguien te dijo que eso los hace hombres más grandes.
Porque créeme, no es así y nunca lo será.