Cuando piensas en el amor, inmediatamente piensas en otras personas de tu vida, ¿verdad?
Establecer relaciones con otras personas es muy importante, pero ¿alguna vez te has parado a pensar en tu relación contigo mismo?
Seamos sinceros. Llevas más tiempo contigo mismo. Lo sabes todo sobre TI. Nadie puede acercarse a esto, ni en un millón de años.
Pero, ¿refleja esto su relación consigo mismo?
¿Intentas comprender mejor las decisiones subconscientes que has tomado o estás tomando ahora mismo en la vida? ¿Vas por la vida prestando más atención a los demás que a ti mismo?
Tienes que ser consciente de quién eres REALMENTE. Tienes que pensar de dónde vienes y aceptarlo, aunque no te guste.
Tienes que poner mucha energía en comprender cómo los acontecimientos de tu pasado te han convertido en lo que eres ahora.
Tienes que pensar en tus virtudes y tus defectos, y amarlos todos. Si hay algo en ti que cambiar, no hay mejor momento que éste para hacerlo.
Tu relación contigo mismo tiene que basarse en que conectes con las partes más profundas de tu mente y tu alma.
Mantener una conversación sincera contigo mismo sobre dónde has estado, cómo te ha cambiado y hacia dónde te diriges te cambiará las reglas del juego.
Nada te ayudará a triunfar en la vida como tener una relación increíble y sincera contigo mismo.
Si reprimes constantemente tus pensamientos y deseos sinceros, saldrán a la luz de la peor manera posible, afectando a toda tu vida.
Si no eres capaz de cuidarte de verdad, serás incapaz de expresarte en tus relaciones con los demás.
Cada vez que te gusta alguien y quieres formar un vínculo sincero, habrá un enorme agujero en él. Siempre faltará esa parte, algo que te impedirá sentir que todo es perfecto.
Nunca estarás en paz con alguien sin establecer una conexión genuina y fuerte con lo más profundo de tu propia personalidad.
Si prestas mucha atención a formar una relación firme y sana contigo mismo, tus otras relaciones también florecerán.
Cuando aprendas a comprenderte, te será más fácil expresarte, junto con tus necesidades y deseos.
Esto facilitará mucho la comunicación con otras personas.
No sólo podrás defender todo aquello en lo que crees, sino que también apreciarás la relación de tu pareja consigo misma.
Te enseñará cómo quieres que te traten, pero también a apreciar la forma en que los demás quieren o necesitan ser tratados.
No hay absolutamente nada más que pueda llenar este vacío de conocerte y amarte a ti mismo, por mucho que intentes encontrarlo.
Si simplemente no sabes cómo empezar a establecer una conexión más profunda con tu yo subconsciente, hay muchas cosas que puedes probar.
Crea rituales en tu vida cotidiana que te dejen espacio y tiempo para pensar en lo que ocurre en tu vida a un nivel más profundo.
Toda buena relación requiere tiempo y esfuerzo, así que no esperes que ésta sea de otra manera.
Si tu vida es muy ajetreada, tendrás que fijar un horario concreto para mantener esta relación.
No tiene por qué ser algo espiritual por definición, como la meditación.
Puede ser una lista de pequeñas cosas a lo largo del día que te ayuden a mantener una relación estupenda contigo mismo.
Puede hacerlo mientras toma café o durante su ritual de limpieza de la piel por la mañana y por la noche.
No importa cuándo ni cómo lo hagas, sólo asegúrate de ser sincero contigo mismo.
Otra cosa que puedes hacer después de superar el nivel de principiante y empezar a darte cuenta de verdad de qué va tu personalidad es darte un capricho.
Haz todas las cosas que te ayuden a liberarte del estrés cotidiano, en las que nada de lo que hagas esté en correlación directa con tu bienestar actual.
Sí, hacemos muchas cosas para mejorar nuestra vida en general, y la mayoría de esas cosas pueden ser duras y llevarnos mucho tiempo en el día a día.
Lo que tienes que hacer es encontrar un lugar y un momento para desprenderte de todo lo que te ata a la persona que eres en el trabajo o en cualquier otra función que desempeñes en tu vida.
No necesitas distanciarte ni huir, sino profundizar en tu mente y tu alma.
Aprende sobre las pequeñas cosas que hacen que TÚ seas quien eres.
Todo lo demás vendrá rodado una vez que te conozcas a ti mismo y empieces a apreciar y amar a esa persona.