Eres fuerte, independiente, feroz y segura de ti misma. Pero en algún momento de estos años, has aprendido que deberías sólo sea eso.
Has aprendido que el amor sólo está ahí para debilitarte, para hacerte vulnerable e inseguro, cuando en realidad, el amor es algo hermoso, y tú, al igual que todos nosotros, necesitas dejarlo entrar en tu vida.
No tienes por qué elegir. No hace falta que te sientes, escribas todos los pros y los contras de ambas partes y veas si te parece bien dejar que un chico te pague la cena por una vez.
Pero no eres la única que se siente así. Las mujeres han aprendido que o es una cosa o es la otra, nunca las dos a la vez. Si quieres ser fuerte, los hombres no pueden entrar en tu vida, ¿verdad?
Es una batalla constante en tu interior porque crees que desde el momento en que te enamoras y empiezas a depender de alguien, el hecho de que fueras capaz de cuidar de ti misma desaparece.
¿Y si encuentras un hombre fuerte e independiente a tu lado? Un hombre fuerte sabrá que necesitas tu tiempo a solas y tu espacio para convertirte en una mejor versión de ti misma.
Sabes que no le necesitas y que nunca saldrías con él si no te interesara de verdad. Pero si te enamoras, si estás luchando contra él y tratando de no pensar en el amor como el sentimiento más hermoso que todos experimentamos, entonces eres tú contra ti misma.
No estás luchando contra un poder extraño que intenta convencerte de que te enamores y te vuelvas dependiente. Esta vez, la fuerza contra la que estás luchando eres tú mismo, y te estás alejando de lo más natural que existe. Quieres librarte del amor, aunque esté abrumando tu cuerpo.
¿Por qué no tener ambos? Esa es mi pregunta. ¿Por qué no disfrutar del placer de ser uno mismo, de tener una mente y un cuerpo hermosos y no dejar que nadie te diga lo que tienes que pensar o sentir? ¿Por qué no tenerte a ti mismo y quiérete a ti mismo?
Además, ¿por qué no tenerlo? ¿De verdad crees que la única forma de amar a un hombre es renunciando al amor que sientes por ti misma? ¿Tan difícil es de creer que siendo una mujer que no requiere atención para vivir, no puedas enamorarte y entregarte a alguien incondicionalmente?
Llevabas mucho tiempo intentando elegir, pero nunca podías porque siempre te parecía mal. Ambos lados te hacían pensar "¿y si...?
Puedes tomar tus propias decisiones, hacer tus propios impuestos, vivir tu propia vida. No tirarás esto por la borda si te enamoras.
Te cuesta tanto tomar una decisión entre dos cosas que te resultan tan naturales.
No estás sola en esta mentalidad, tratando de proteger tu fuerza e independencia tras una fasada inabordable. Pero sigues siendo el mismo tipo de mujer que cree en el amor y considera que estar con alguien sería hermoso.
Sé sincera sobre todas esas veces que lloraste sola en tu apartamento, deseando y esperando que alguien viniera y estuviera ahí para ti, que te demostrara que eres especial y necesaria. Todas esas veces que querías que estuviera ahí, pero no te atrevías a pedírselo.
Seré la primera en decir que se puede ser independiente y aun así encontrar momentos en los que dependerás de otra persona, especialmente de tu pareja.
Puedes ser independiente y fuerte, cuidar de ti misma y todas esas otras cosas increíbles y aún así caminar al lado de un hombre que cuida de sí mismo y sólo te hace más fuerte por eso.
Puedes ser todas estas cosas increíbles y seguir enamorándote. Puedes volver a enamorarte y no tener miedo de renunciar a todo lo que eres por ello.
Eres tú mismo. Eres fuerte, independiente mujer que no necesita un hombre.
Pero el amor nunca te pregunta por eso. El amor simplemente sucede, y te muestra que la vida al lado de un hombre no es tan mala después de todo.
Por eso no tienes que elegir. Puedes ser fuerte por ti misma y aún más fuerte al lado de un hombre que te adora por todo lo que eres.