Salir con alguien con ansiedad puede ser muy complicado, pero si quieres a esa persona, harás cualquier cosa por estar con ella. Verás, una relación con alguien así puede ser tan normal como el resto de relaciones que has tenido en tu vida si lo miras así.
Si lo conviertes en un problema, tendrás un problema. Pero si disfrutas de tu relación y actúas con la mayor normalidad posible, no habrá mayores problemas que tengas que resolver. Lo que tienes que saber es que salir con alguien con ansiedad puede ser lo mejor que te haya pasado nunca porque las personas así pueden amar incondicionalmente.
No tienen ningún problema en hacer un esfuerzo adicional por ti, y harían cualquier cosa por amor de verdad. Pero antes de que te enamores alguien con ansiedadhay un par de cosas que debes saber. No para estar preparado o algo así, sino para darte cuenta realmente de que la vida con esas personas puede ser una bendición si lo reconoces a tiempo.
1. La ansiedad no será el mayor problema en su relación
La cuestión es que, cuando salgas con alguien con ansiedad, no tienes que preocuparte de que sea el mayor problema. De hecho, no tiene por qué ser un problema en absoluto. Si comprendes a tu pareja y ves que está pasando por un mal momento, puedes estar a su lado.
No estoy diciendo que vayas a descuidarte y a volcarte por completo en tu pareja, pero darle apoyo y decirle que estás ahí significará mucho para ella. Su estado de salud mental ya es un gran problema en sus vidas, y seguramente no necesitan a alguien que empeore aún más las cosas. En lugar de eso, necesitan una pareja cariñosa y atenta, y si tienen a una persona así en sus vidas, serán las personas más felices del mundo.
Por lo tanto, mi punto aquí es que la ansiedad (o ansiedad en las relaciones) no es realmente un gran problema hasta que es grave y hasta que una persona no puede funcionar con normalidad debido a él.
2. La ansiedad no les hace débiles
Lo que más oigo últimamente es que personas con ansiedad son débiles. ¿Pero sabes qué? Eso es lo más loco que he oído hasta ahora. Hay mucha gente en mi vida que lucha a diario contra la ansiedad, y nunca diría que tienen un problema.
De hecho, parecen tan fuertes y alegres que es imposible decir que padecen alguna enfermedad mental. Por lo tanto, quien diga que la ansiedad debilita a las personas está 100% equivocado. Cuando tienes ansiedad, tienes una visión diferente de la vida. Luchas con los demonios que llevas dentro cada día y, a pesar de que todo tu mundo se está desmoronando, intentas ser la mejor versión de ti mismo.
Cuando tienes ansiedad, luchas como una leona cada día porque cada cosa que haces te cuesta mucho esfuerzo. Incluso cosas que parecen bastante normales para el resto de la gente son cosas que no quieres hacer porque no te sientes bien haciéndolas. Es una lucha constante, pero nunca te rindes. Nunca.
3. La ansiedad puede enseñarles lecciones
Aunque nunca lo hayas pensado de esta manera, la ansiedad puede enseñar a la gente algunas lecciones valiosas. Pueden aprender a encontrar un mecanismo de defensa o a funcionar haciendo cosas que antes no hacían. Incluso pueden aprender a actuar con calma en situaciones que antes les incomodaban.
Pueden aprender a funcionar bajo estrés sin perder la cabeza. Pero lo cierto es que, después de todo lo que han pasado, nunca volverán a ser los mismos. Serán más conscientes de las cosas que ocurren a su alrededor. Apreciarán la vida porque es una bendición, y se darán cuenta de que no deben darla por sentada.
Cuando salgas con alguien con ansiedad, aprenderás a valorar esas pequeñas cosas que todos damos por sentadas. Aprenderás a disfrutar de la vida de formas que nunca pensaste que lo harías. Empezarás a darte cuenta de que cada nuevo día es una nueva oportunidad para ser mejor persona. Verás que las personas así piden muy poco y que, de hecho, no necesitan nada grande para ser felices.
4. Necesitan tu amor y afecto todos los días.
Las personas con ansiedad necesitan un empujón extra. Eso significa que necesitarán que les digas que les quieres y que su enfermedad mental no es una carga para ti. Tienes que hacerles saber que, pase lo que pase, siempre estarás ahí y que no dejarás de quererles, ni siquiera en sus días malos.
Decirles que les quieres cada día puede hacerles sentir mucho mejor. Cosas tan pequeñas para ti significan mucho para ellos. Un beso, un abrazo, preguntarles cómo les ha ido el día... significan mucho para ellos. Así que, si quieres a tu pareja pero no sabes cómo comportarte porque sufre ansiedad, demuéstrale tu amor y afecto. Créeme, cuando vean que son importantes para ti, te entregarán su corazón y su alma.
Lucharán por tu amor por muy duro que sea. Esas personas no tendrán ningún problema en hacer un esfuerzo extra para mejorar vuestra relación porque tienen un corazón y un alma limpios. Simplemente tuvieron la mala suerte de conocer la ansiedad y ser su prisionero por una gran cantidad de tiempo. Las personas así son las mejores para enamorarse porque nunca se aprovecharán de ti. En lugar de eso, lo invertirán todo en una relación y harán todo lo posible para que funcione.
5. Se preocuparán demasiado, pero sólo una caricia tuya puede hacerles sentir tranquilos
Cuando salgas con alguien con ansiedad, debes saber que siempre piensa en lo peor que puede pasar. Si tienen problemas en el trabajo, pensarán que su jefe les despedirá. Si no aceptan la invitación de un amigo a tomar un café, creerán que su amigo dejará de salir con ellos.
Su cerebro trabaja al máximo todo el tiempo, e incluso cuando duermen, se despertarán continuamente si tienen un problema que resolver. En situaciones así, necesitarán tu ayuda. Cuando veas que están distantes y que te escuchan pero en realidad no están presentes, no seas duro con ellos. Diles que les comprendes. Diles que pueden contar contigo. Eso significará mucho para ellos y se sentirán mejor al instante. Una persona con ansiedad necesita tan poco para sentirse especial.
Sólo necesitan a alguien que les comprenda y sepa cómo se sienten. Sólo necesitan a alguien a quien contarle todo lo que les pasa por el alma. Así que, por favor, sé esa persona. Sé la persona que les ayude a llevar su carga y les ayude a establecer límites que no deberían cruzar.
6. La ansiedad no es algo que se pueda solucionar
Lo peor de salir con alguien con ansiedad es intentar arreglarlo. No puedes ser el terapeuta de tu pareja. No puedes arreglarla, pero puedes sostenerla mientras se arregla a sí misma. Puedes ser su apoyo y alguien con quien puedan contar cuando la tristeza les asalte de nuevo. Porque habrá muchos momentos de depresión en sus vidas, y tendrás que aprender a vivir con ellos.
Cuando se acepta a alguien, hay que aceptar todo lo que lleva consigo. De lo contrario, no es amor ni tiene sentido. Así que, hagas lo que hagas, no pienses que puedes controlar su enfermedad. No pienses que hay unas pastillas increíbles que tienen que probar o un terapeuta al que tienen que visitar.
Ya están controlados por su ansiedad, y lo último que necesitan es que les controles tú. Así que dales un respiro. Esté con ellos, pero no hablar de ansiedad. En lugar de eso, hablad de cosas felices, de cosas de las que estéis muy orgullosos. Hablad de vuestros planes juntos y de cómo los vais a conseguir. Eso os ayudará a tener una relación normal y relación felizy no hablarás de problemas todo el tiempo.
7. Estarán nerviosos y asustados por cosas que no han sucedido
Cuando salgas con alguien que sufre ansiedad, debes saber que se preocupará por cosas en las que tú ni siquiera piensas. Y el mayor problema es que su preocupación excesiva afectará a tu relación. Pero no es porque lo quieran, sino porque simplemente no pueden controlarlo. Y saben que pueden ser difíciles de manejar para alguien, pero esperan que la persona adecuada reconozca su amor.
Sólo quieren a alguien que sea capaz de entender por lo que están pasando y que intente ponerse en su lugar. Porque preocuparse demasiado por cosas que no son tan importantes y tener a alguien que no pueda entender por qué se sienten así es algo que no quieren que les ocurra. Tener que preocuparse por algo en lo que otros ni siquiera piensan es lo que les pasa cada día. Y vivir con esa presión es extremadamente difícil.
Así que, en medio de todo ese lío, sé alguien que les diga que les entiendes y que no pasa nada por sentirse así. Diles que no están locos por preocuparse demasiado, pero que intentarás ayudarles a relajarse un poco. Cuando vean que les ofreces tu ayuda, será más fácil, y quizá, pero sólo quizá, aprendan a relajarse y a disfrutar.
8. Aprender qué desencadena su ansiedad y evitarlo
Cuando sales con alguien que sufre ansiedad, no quieres hacerle daño. Por eso tienes que saber qué desencadena su ansiedad e intentar evitar esas cosas. Por ejemplo, si tu pareja sufre ansiedad social, no hace falta que la presiones para que vaya a reuniones sociales y esté con gente con la que te gusta hablar. No sabrá qué decir entre tanta gente y tú te sentirás mal por haberla llevado allí.
En lugar de eso, deja que ella decida cuándo quiere acompañarte. Así tendrá total libertad y todo será diferente. No tendrá la sensación de que tiene que ir a algún sitio, sino de que tiene la opción de ir a algún sitio contigo o de quedarse en casa. Tal vez si ese día se siente bien y no tiene ataques de pánico ni ansiedad extrema, pueda acompañarte.
Lo más importante es darle la oportunidad de decidir qué es lo mejor para ella. Créeme, le harás un gran favor y se sentirá bien con toda la situación. De ese modo, la estarás ayudando, por pequeño que te parezca. Para ella, es lo mejor que podrías hacer, y será la mujer más feliz del mundo por tener a alguien así en su vida.
9. Su objetivo no es parecer frío y distante.
Si tu pareja tiene ansiedad, debes saber que a veces parecerá distante y fría. Pero eso no es cierto. Las personas con ansiedad son las más cariñosas y afectuosas que conozco. Tienen mucho amor, pero no saben cómo demostrarlo. Por eso, otras personas que no tienen ni la mitad de amor que ellos pueden parecer personas con un corazón más grande y muchas emociones.
Pero la verdad es que los ansiosos sienten amor por todo el mundo, pero les cuesta mucho demostrárselo a los demás. Así que, cuando veas que tu ser querido no puede mostrar sus emociones de la forma adecuada, no seas demasiado duro con él por eso. Ya es muy difícil para ellos saber que tienen tanto que ofrecer pero no pueden expresarlo. En lugar de eso, apóyale y dile que le comprendes.
De hecho, intenta comprenderles porque te resultará más fácil ver cómo se sienten realmente. Demuéstrales que te das cuenta de todo por lo que están pasando y que quieres ser su apoyo siempre que lo necesiten. Ese será el mejor regalo que puedas hacerles porque por fin encontrarán a alguien que les entiende, aunque no tengan que explicarles nada.
10. No quieren que te compadezcas de ellos
Lo peor que puedes decirle a alguien con ansiedad es que te da pena. Entiendo que te preocupes por ellos y todo eso, pero decirles algo así les haría sentirse aún peor. Así que nunca digas algo así porque no les ayudará. En absoluto. En lugar de eso, elogia todas las cosas buenas que hagan, porque así sentirán que han hecho algo bueno.
Se sentirán útiles y su autoestima será mayor. No digo que les digas algo como "buen trabajo" cada vez que aparquen bien el coche o cuando se coman todo lo que hay en el plato. No son niños y no debes comportarte así con ellos. En lugar de eso, háblales como a un adulto y diles que deben seguir haciéndolo bien cuando hagan algo bueno.
Lo más importante de todo es que se sientan bien en su propia piel. Si están satisfechos con su vida, tendrán más energía para hacer las tareas de cada día con más facilidad. Si oyen de ti una sola palabra de apoyo, sentirán que han hecho lo más importante que se puede hacer. Así que, por favor, no te compadezcas de ellos porque sólo son humanos. Les hará daño y pensarán que son incapaces de hacer cosas buenas.
11. Su ansiedad no les define
Cuando salgas con alguien con ansiedad, tienes que saber que su ansiedad no les define. No puedes decir que son diferentes del resto de la gente sólo porque tienen una enfermedad mental. Son como tú y como yo, pero hay días en los que luchan un poco más que el resto de nosotros.
Hay días en los que sienten que van a agotarse por culpa de su trabajo o de sus problemas privados. Hay días en los que no se creen realmente dignos y capaces de resolver algunos problemas. Pero eso son sólo los días malos. En los días buenos, incluso sonríen como el resto de nosotros. Se ríen de todo lo malo que les pasa y creen que pueden hacer lo que haga falta para tener una buena vida. En esos días, nunca se diría que padecen una enfermedad mental.
En días así, están alegres, sonríen y se diría que son las personas más felices del mundo. Pero el problema es que detrás de su sonrisa hay mucho dolor. Sólo intentan ponerse una máscara de felicidad y ser, para variar, como el resto de la gente. Y como eso es muy difícil para ellos, emplearán mucha energía en ello. Pero merecerá la pena porque se sentirán muy vivos y será la mejor sensación para ellos.
12. Necesitan que les aceptes tal y como son
Las personas con ansiedad son conscientes de que hay días en los que serán diferentes al resto de la gente. Pero saben que esos días pasarán y que tienen que levantarse cada mañana y librar la batalla más importante: la de sus vidas. Ya se esfuerzan por actuar con la mayor normalidad posible, sobre todo si padecen ansiedad grave, y por eso necesitan que les aceptes tal y como son.
Eso significa que no necesitan que les digas qué hacer y cómo comportarse para sentirse mejor, sino que estés de acuerdo con cada decisión que tomen. Y si lo haces, significará mucho para ellos. Significará que su voz ha sido escuchada y que alguien les presta atención.
Verás, aceptar a alguien con ansiedad no es nada diferente de aceptar a alguien que no la tiene. Se trata de si la persona te cae bien o no. Si te cae bien, aceptarás cualquier cosa que le pase, y si no te cae bien, nunca podrás encontrar un punto medio con ella. Tan sencillo como eso.
13. Necesitan que les escuches
Si tu pareja sufre ansiedad, necesitará sobre todo que la escuches. Eso significa centrarte en lo que dice e intentar ayudarle con tus consejos. Si no puedes ayudarles o si ves que el tema es bastante delicado, no hace falta que les des ninguna respuesta, pero al menos estate ahí para escuchar lo que tienen que decir.
A veces, las cosas se ven diferentes cuando las dices en voz alta. De ese modo, captan el significado diferente y puedes darte cuenta de cosas que antes no podías. Así que, cuando tu pareja hable, escúchala. Probablemente te esté contando cosas que no puede contarle a nadie más, y te ve como una especie de salvador.
Créeme, les ha llevado mucho tiempo armarse de valor para abrirse a ti. Y si ya han hecho un esfuerzo por hacerlo, sé su apoyo y pregúntales cómo puedes ayudarles. Ellos te dirán si necesitan ayuda en ese momento o sólo a alguien que les escuche. Verán que eres alguien a quien pueden contárselo todo y serán completamente sinceros contigo.
14. No les obligues a hacer cosas que no quieren hacer
Vivir con ansiedad no es nada fácil, y eso es algo que debes saber si sales con alguien que la padece. Esas personas luchan literalmente todos los días y empujarlas a hacer cosas con las que no se sienten cómodas sólo empeorará las cosas. Así que, si no se sienten bien haciendo algo que a ti te gusta, puedes hacerlo tú solo.
Si les presionas, se pondrán nerviosos y les dará un ataque de pánico porque no sabrán qué hacer ni cómo actuar en una situación que es nueva para ellos. Así que, hagas lo que hagas, no seas tú quien les provoque estrés y presión adicionales. En lugar de eso, sé su puerto de calma, su persona con la que siempre puedan contar. Si ven que les entiendes y que les dejas decidir qué es lo mejor para ellos, lo apreciarán mucho.
Eso les demostrará lo mucho que les apoyas, y te querrán por ello. Y eso es lo que necesitan al final. Alguien que entienda que su enfermedad mental no es un gran problema y que, con sus fuerzas unidas, pueden resolver todos los baches del camino.
15. Tendrán colapsos mentales
Sí, tendrán crisis mentales y te dirán que lo sienten cada vez que les ocurra. Pero la verdad es que no pueden controlarlo. La ansiedad es algo que forma parte de ellos, pero aún no lo saben del todo. A veces se ponen nerviosos por las cosas más insignificantes, pero otras veces los grandes problemas no lo son tanto para ellos. Todo depende de su día y de la fase en la que se encuentren.
Cuando tienen un colapso mental, actuarán como alguien a quien ya no reconoces, pero eso no es culpa suya en absoluto. Simplemente no pueden afectarlo, y lamentan que tengas que ver todo lo que les pasa. Saben que podrías marcharte porque están hechos un desastre, pero por otro lado, les encantaría que te quedaras y libraras esa batalla con ellos.
Sólo quieren ver que te preocupas y que quieres ayudarles permaneciendo ahí y siendo el muro en el que pueden apoyarse.
16. Serán las personas más cariñosas que tendrás en tu vida
Al salir con alguien con ansiedad, aprenderás muchas cosas importantes. Aprenderás a apreciar la vida y tu salud. Aprenderás que un hombre sano tiene 1000 deseos, pero uno enfermo sólo tiene uno. Y te darás cuenta de que la vida puede convertirse en la peor de las pesadillas en una sola noche.
Pero lo más importante es que aprenderás a respetar a la persona que lucha contra la ansiedad. Te sentirás muy orgulloso de la persona que vive contigo, intentando ser la mejor versión de sí misma cuando está contigo mientras todo su mundo se desmorona. Verás que las personas con ansiedad en realidad luchan cada día por tener un día lo más normal posible.
Y estarás tan orgulloso de ellos, por su fuerza, su energía, su positividad que de alguna manera sacan a relucir. Estarás orgulloso de ellos porque, con todos sus problemas, pensarán en ti y en tu bienestar. Sacrificarán cosas que significan mucho para ellos, para que tú te sientas mejor. ¿Y sabes por qué? Porque te quieren y porque ven todo lo que haces por ellos.
Eso es algo que nunca olvidarán, y pensarán lo afortunados que fueron de tenerte en sus vidas. Y lo que es más importante, nunca darte por sentado.
17. Se emocionan por las cosas más insignificantes
Las personas con ansiedad pueden emocionarse mucho por las cosas más insignificantes. Lloran cuando ven una película triste o cuando leen un libro triste. Sienten todo muy intensamente, y por eso parecen alguien que llora por todo. Pero eso no les hace débiles.
Eso sólo significa que fueron demasiado fuertes durante demasiado tiempo. Son muy empáticos y pueden sentir el dolor ajeno. No necesitan preguntar a alguien si está bien porque pueden darse cuenta con sólo mirarle a los ojos. Si tienes personas así en tu vida, debes saber que cuentas con personas que sabrán cómo te sientes en cada momento y que verán que tu lucha es real.
Harán cualquier cosa para que te sientas mejor porque saben lo que se siente al estar triste o deprimido todo el tiempo. Las personas con ansiedad son los mejores amigos y compañeros sentimentales porque el amor es la emoción más importante de todas. Cuando aman, se entregan por completo. Lo quieren todo o nada.
Siempre serán los que harán un esfuerzo adicional en una relación. Siempre te demostrarán cuánto te quieren y te aprecian, y nunca te darán por sentado.
