En las citas modernas, las relaciones esporádicas están de moda.
Conoces a un chico, os enrolláis y seguís con vuestra casi relación sin ningún compromiso real.
Por un lado, puede ser un gran acuerdo.
Te diviertes con la persona que te gusta y satisfaces tus necesidades sexuales sin obligaciones.
Sin embargo, hay personas que no están hechas para este tipo de relación.
Y esta chica es una de ellas.
La verdad es que ha tenido su ración de relaciones NSA.
Sabe cómo funcionan y precisamente por eso ha decidido renunciar a ellas por completo.
1. Le trajo más cosas malas que buenas
Durante un tiempo, esta chica trató de hacer citas casuales hacer ejercicio.
Pensó que no tenía nada que perder y que podría pasar un buen rato.
Sin embargo, las cosas no siempre salían como ella deseaba.
De hecho, cuando lo ponía todo en una balanza, las relaciones esporádicas le traían muchos más días malos que buenos, muchas más lágrimas que sonrisas y mucha más tristeza que felicidad.
Aunque probablemente nunca lo admitiría en voz alta, lo cierto es que este tipo de citas le rompieron el corazón a esta chica más de una vez.
Le trajo numerosas noches sin dormir y océanos de lágrimas, dolores de cabeza y angustia.
Le trajo inseguridades, dudas y luchas internas.
2. Quiere más
El hecho es que esta chica quiere más de las relaciones y por fin no se avergüenza de admitirlo.
Durante mucho tiempo, se engañó a sí misma y a los demás pensando que las migajas de amor y atención que recibía eran más que suficientes.
Bueno, ahora ha entrado en razón y se ha dado cuenta de que tener un hombre que sólo es la mitad del suyo es conformarse con menos.
Se ha dado cuenta de que no quiere ser la amiga con derecho a roce de nadie.
En realidad, quiere un trato real, una relación del tipo "todo o nada".
No quiere estar con alguien temporal o conveniente.
No necesita un hombre que le llene el día mientras le deja el alma vacía, ni un tipo que le dé placer físico sin proporcionarle verdadera intimidad.
Esta chica se ha dado cuenta de que quiere un novio a tiempo completo, uno que sea su mejor amigo y compañero de fechorías.
Una relación que no tenga fecha de caducidad ni plazo.
3. Y sabe que se lo merece
Antes de pasar por este proceso esclarecedor, esta chica dudaba en verbalizar sus deseos, temerosa de estar pidiendo demasiado.
Temía buscar la perfección y que todo el mundo la considerara demasiado exigente cuando se trata de hombres.
Sin embargo, todo esto cambió una vez que vio lo que valía y comprendió que realmente se merece el tipo de hombre que desea.
Elevó sus estándares y decidió no rebajarlos por nadie.
4. Se niega a pasar desapercibida
En el mundo actual de las citas, las relaciones esporádicas son perfectamente normales.
De hecho, te llamarían rarito si quieres comprometerte enseguida o romántico insensato y sin remedio si crees en el romanticismo y buscas el amor verdadero.
Para ser honesta, esta fue una de las principales razones por las que esta chica se involucró en este tipo de relaciones.
Si todo el mundo podía hacerlo, ¿por qué no iba a intentarlo ella también?
Sin embargo, se dio cuenta de que no es como los demás y se cansó de intentar encajar en algo que se presenta como normal.
Está dispuesta a arriesgarse a ser una marginada o a quedarse sola para siempre antes que hacerse desgraciada volviendo a relaciones sin sentido que no pueden llenar su vacío.
5. No está hecha para ello
Después de un tiempo, esta chica llegó a un acuerdo con el hecho de que ella simplemente no está hecho para medios amores.
No tiene la capacidad de controlar sus emociones y no puede ordenarse a sí misma que no se enamore de alguien.
Cuando entra en una relación, lo hace hasta el fondo, incluso cuando sabe que no debe.
A pesar de todos sus esfuerzos, su mente no puede controlar su corazón.