Es verdad. Te echo de menos. Pero eso no significa que te quiera de nuevo en mi vida.
Aunque eche mucho de menos tus brazos que me daban calor en las noches frías, sé que estaré mucho mejor sin ti. Sé que será difícil olvidarte y que habrá muchas noches sin dormir, pero esa tortura acabará dando sus frutos.
Aunque ahora esté roto, aprenderé a levantarme de nuevo. Me levantaré y viviré mi vida al máximo, pero esta vez sin ti.
Ya no te necesito cuando la vida se pone dura, para llamar a tu número y que me cuentes otra mentira. Ya no quiero ser adicta a ti.
No quiero acudir a ti cada vez que me siento bien por algo, para contarte todos los detalles. Ya no quiero que seas la persona más importante de mi vida.
Tuviste tu oportunidad, pero la desperdiciaste y no pienso darte otra oportunidad de hacerme daño. Volver contigo significaría darte una bala extra para matarme porque fallaste la última vez.
Y puede que durante mucho tiempo no me pusiera en primer lugar, pero ahora quiero hacer un cambio drástico. Por fin quiero empezar a tratarme como me merezco y quiero sentirme bien por ello.
Pero hay noches en las que me siento sola y lo único que quiero es que me digas algo dulce para calmarme. Quiero que vuelvas a abrazarme con tus manos tóxicas porque, por muy tóxicas que sean, siguen siendo las manos a las que estoy acostumbrada.
Te imagino viniendo a decirme que cometiste un error y que me necesitas más de lo que has necesitado a nadie en tu vida.
Entonces me sorprendo susurrando tu nombre y de repente despierto de un sueño más y me digo que realmente no te necesito y que esto, lo que siento ahora, es sólo un agrio recuerdo tuyo. Entonces me doy la vuelta y vuelvo a dormir.
No hay más de tus cosas. Destruí hasta el más mínimo recuerdo tuyo. He creado una vida totalmente diferente sin ti y estoy muy orgullosa de ello.
No digo que ya no haya sitio para nadie en mi vida, pero esta vez elegiré sabiamente a las personas que entren en ella.
Pero lo más importante es que he seguido adelante. He superado todos tus insultos, todos tus desprecios y todas tus decepciones.
Ahora soy mucho más fuerte, desde que pasé por tantas cosas desagradables contigo. En cierto modo, me has enseñado a levantarme cuando la vida me da una bofetada.
Así que, lo creas o no, quiero darte las gracias por ello. Si no me hubieras roto, nunca habría sabido lo fuerte que era.
Sé que tendré crisis de conciencia de vez en cuando y sé que tal vez quiera que vuelvas pero, sobre todo, sé que te echaré muchísimo de menos.
Sin embargo, eso no me hará volver con el hombre que me trató como una mierda. Te superaré con un trago fuerte, mientras las manos de otro hombre recorren mi cuerpo.
Te borraré de mi sistema y cuando eso ocurra, seré la mujer más feliz del mundo.
Lo único que temo son esas noches solitarias en las que sólo pienso en ti, en las que siento nostalgia. En esas noches, sólo hablaré de ti a la luna porque sé que guardará mi secreto.
Le admitiré que todavía te echo de menos y que una parte de mí probablemente te echará de menos para siempre.