Lo que más me sorprende del amor es la gente que deja atrás a otros, pensando que podrá encontrarse con la misma persona que dejó cuando vuelva.
Siempre estaba ahí para ti. Dios, se esforzaba tanto por hacerte feliz.
Te vio tal y como eras, pero siempre tuvo la esperanza de que hubiera algo bueno en ti, que viviera dentro de tu alma. Creyó que con sólo quererte podría hacer que ese bien aflorara a la superficie.
Durante tanto tiempo, ella estuvo abajo sólo para que tú pudieras estar arriba. Durante tanto tiempo, ella no se preocupaba por sí misma, sólo se preocupaba por ti.
Durante mucho tiempo, descuidó sus sentimientos para poder ocuparse de los tuyos. Hizo todo esto para demostrarte que la vida tenía otro lado, además del oscuro que tú veías.
Hizo todo esto porque creía en el amor.
Pasara lo que pasara, hiciera lo que hiciera, casi todas sus batallas fueron inútiles. Creía que luchaba por ti, pero en lugar de eso luchaba contra ti.
Vendiste tu alma al diablo. No te importaba nadie más que tú mismo.
Tú eras tu propia prioridad y dejaste de creer en días mejores hace mucho tiempo.
Nunca creíste de verdad en el amor, ¿verdad? Pero aún así hiciste lo que pudiste tirando de tu manipulador furtivo trucos para que se enamore de ti.
Necesitabas a alguien que estuviera a tu lado, necesitabas una isla de escape, necesitabas a alguien que creyera en ti, así que hiciste que se enamorara de ti. Pero no tenías intención de corresponderle, ¿verdad?
Esperó tanto tiempo para ver que el amor que te daba le era devuelto. Y podría haber esperado mil años más y aún así habría sido en vano.
Porque nunca fuiste de dar mucho. Todo lo que te importaba era tomar y tomar. Pensabas que te lo merecías todo.
Pero chico, no lo hiciste. Sólo recibiste su amabilidad, amor y atención porque ella creía que eras digno de ello.
Le llevó un tiempo ver que en realidad no lo eras.
Cuando te vio como realmente eras, se negó a creerlo. Cuando no mostrabas ningún rasgo de humanidad en ti, le echaba la culpa al momento.
Pensó que si se quedaba a tu lado sólo un poco más, si luchaba más por ti, las cosas cambiarían. Creía que había un momento para todo en este mundo y que vuestro momento juntos aún estaba por llegar.
Pero después de un tiempo, era obvio: el momento era oportunoeras tú quien estaba equivocado.
Dios, esta chica no quería otra cosa que amarte y ser amada por ti. Quería ese amor puro, el que da viento a tus alas y te hace sentir invencible.
Pero lo que hizo tu amor fue demostrarle que estaba al pie del cañón.
Cuando le diste la espalda, ella aún sentía ese inmenso amor hacia ti. Sería ingenuo pensar que una vez que te hubieras ido, ella estaría libre de eso.
Nadie deja de amar así como así. Ella invirtió tanto de su tiempo y puso tanto esfuerzo en ti que era imposible que siguiera adelante así como así.
Aunque fueras tóxico, seguías siendo amado por ella. No elegimos a quién le entregamos nuestro corazón. Bueno, en la mayoría de los casos no podemos.
Simplemente nos enamoramos y luego luchamos con todo el bagaje que conlleva enamorarse si nos enamoramos del chico equivocado.
Cuando te fuiste, ella estaba dolida. Todos sus sueños y esperanzas se hicieron añicos. Y se preguntó si todos sus esfuerzos habían sido en vano.
Se preguntó si todo su amor había sido en vano. ¿Se había entregado por completo al hombre equivocado?
Por otro lado, te fuiste sin pensártelo dos veces.
Te fuiste como si la mujer que dejabas pudiera encontrarse a la vuelta de cualquier esquina. Pero pronto verás lo equivocado que has estado.
Nadie más que ella se esforzará tanto por ti. Ninguna otra te amará sin contenerse, tan desinteresadamente y con tanta facilidad.
Ninguna otra te pondrá en un pedestal y se olvidará de sí misma. Ninguna otra se preocupará por ti aunque no te lo merezcas.
Y entonces te darás cuenta. Entonces te darás cuenta de la clase de mujer que tuviste en tu vida.
Seguro que lo intentarás con muchas otras, pero ninguna se esforzará tanto por hacerte feliz como ella.
Porque ninguno de ellos será capaz de amarte como ella lo hizo, y no serán capaces de amarte ni siquiera en tus días más oscuros.
Cuando te des cuenta de todo esto, será demasiado tarde. La mujer que dejaste atrás se habrá ido en cuanto desees que vuelva.
Claro que seguirá viviendo y respirando, pero no será la misma mujer que dejaste atrás.
Ya no será ingenua. Ya no se permitirá dar todo de sí a alguien que no la merece. Ya no se doblegará por alguien que no le dio nada a cambio.
Ella no te estará esperando, ¿sabes? Ella habrá seguido adelante para cuando te des cuenta de lo que tenías y perdiste.
Porque las mujeres como ella lo dan todo hasta el punto de darse cuenta de que sus esfuerzos son en vano. Y una vez que se dan cuenta, una vez que ven sus errores, entran en razón.
Lo que más me llama la atención son las personas que dejan atrás a otras, pensando que podrán encontrarse con la misma persona que dejaron cuando vuelvan.
La gente que se queda atrás sigue adelante. Aprenden de sus errores. Y una vez que lo hacen, no hay forma en este mundo de que vuelvan a ser como antes.
Pero pronto te darás cuenta por ti mismo.