Es normal sentir pena para ti después de que tu ser querido se vaya. Sobre todo si habéis pasado mucho tiempo juntos y de alguna manera te has acostumbrado a él.
Cuando se va, no sabes cómo seguir adelante ni qué hacer para sentirte mejor.
Te sorprendes a ti mismo llorando y pensando en las cosas que podrías haber hecho de otra manera, pero en realidad, ya no puedes hacer nada al respecto.
Lo que tienes que hacer después de que ocurra algo así es sacudirte ese sentimiento de culpa y seguir adelante como te mereces.
Si crees que no puedes o si no sabes cómo, consulta estas formas probadas de dejar de sentir lástima por ti mismo después de que tu ser querido se vaya.
1. Aceptar lo ocurrido
Si quieres sentirte mejor, tienes que aceptar lo que pasó en primer lugar.
No puedes ignorar el hecho de que tu ser querido te dejó y que vuelves a estar soltero.
Una vez que finalmente aceptes que lo vuestro ha terminado, podrás seguir adelante.
Hasta que eso ocurra, probablemente llorarás hasta quedarte dormido cada noche y pensarás en las cosas que podrías haber hecho de otra manera en una relación.
Pero si quieres dejar de sentir lástima por ti mismo, tienes que cambiar tu forma de pensar.
Sólo entonces te librarás de los pensamientos negativos y podrás vivir la vida que te mereces.
2. Date tiempo para llorar
Perder al hombre que amas nunca es fácil. Gastarás muchas lágrimas y pensarás que nunca volverás a encontrar el amor.
Probablemente perderás tu autoestima y creerás que tú eres la antipática. Y todo esto es normal porque te estás dando tiempo para hacer el duelo.
Debes saber que puede ser un proceso largo y que gastarás mucha energía en arreglarte.
Pero lo más importante es que realmente mejora.
Sé que la lucha es real, pero cuando te dices a ti mismo que no tienes otra opción que defenderte y luchar, ya has recorrido la mitad del camino.
Y eso no es algo fácil de hacer, créeme.
3. No te culpes
Lo peor que te puede pasar es echarte la culpa de todo lo malo que ha pasado.
Sé que te sientes fatal cuando te quedas solo y cuando todo tu mundo se desmorona, pero en todo ese lío, aprenderás a ser más fuerte.
No debes culparte por el fin de tu relación porque no eras la única persona en ella.
No fuiste el único que hizo las cosas bien y mal. Así que, por favor, deja de hacerte eso.
Ya te cuesta bastante levantarte cada día y hacer tu trabajo; realmente no necesitas echar toda la culpa en ti mismo.
Véase también: Aunque se vaya, tú eres la que gana
4. Habla con tus amigos íntimos
No hay nada mejor que un par de buenos y viejos amigos cuando te golpea una crisis.
Sabes que te escucharán y que no te juzgarán por nada.
Sólo estarán ahí para ayudarte a superar tus problemas y darte el consuelo que necesitas.
Te sentirás mejor de inmediato y al menos sabrás que tienes personas en tu vida que darían su vida por ti.
Una vez que te abras a ellos, empezarás a sentirte mejor y te darás cuenta de que la vida no es tan mala después de todo.
5. Vive tu vida tan normalmente como puedas
Cuando tu ser querido se vaya, serás un desastre, pero no debes permitirte vivir así todos los días del resto de tu vida.
Nadie merece que renuncies a tu vida y a tus planes.
Está bien que te des tiempo para curarte, pero debes establecer unos límites y no traspasarlos nunca.
Cuando ocurre algo malo, hay que sobreponerse y no considerarlo un problema, sino un mensaje.
Y lo más importante es que te enfrentarás a situaciones como ésta muchas veces en tu vida, así que más vale que aprendas a actuar correctamente cuanto antes.
Y sí, vive tu vida con toda la normalidad que puedas porque es el mejor regalo que puedes hacerte a ti mismo.
6. Piensa en todas las cosas positivas que te esperan
Al final, depende de ti si te llevará mucho tiempo hacer el duelo o si superarás tus problemas rápidamente.
Pase lo que pase, tienes que pensar en el futuro y en todas esas cosas bonitas que te esperan.
Si te das la oportunidad de ser feliz, verás que la vida te sonreirá.
No se puede seguir haciendo lo mismo y esperar que algo cambie.
Si quieres un cambio en tu vida, tendrás que cambiar tu perspectiva. Sólo entonces empezarán a suceder cosas increíbles.
7. Date otra oportunidad
Si no tuviste suerte en el amor a la primera, no significa que nunca la vayas a tener. encontrar el perfecto.
Recuerda que las cosas buenas no ocurren de la noche a la mañana; tendrás que esperar a que ocurran.
Sin embargo, una vez que suceden y colman tu vida, te darás cuenta de que la espera ha merecido la pena.
Así que, si no tuviste suerte en el amor una vez en la vida, date siempre otra oportunidad porque es lo que te mereces.
Todos lo hacemos.
Sólo tenemos que darnos cuenta.