'¿Qué ha cambiado?' es el pensamiento que resuena en tu mente y no puedes acallar. Hace sólo unos meses, no estaba preparado para una relación.
No quería oír la palabra compromiso, y mucho menos estar plenamente en uno.
Sin embargo, ahora está preparado. Está listo para todo con ella, como nunca lo estuvo contigo y te da náuseas sólo de pensarlo. Simplemente no tiene ningún sentido.
Quieres una explicación. Intentas entenderlo todo, pero siempre fracasas.
Las preguntas se multiplican, pero lo que falta son respuestas, y usted parece incapaz de encontrarlas.
Sientes que te han traicionado y eso te saca de quicio.
Pasabas mucho tiempo con él, dándole todos los beneficios de novio y ni una sola vez le oíste llamarte novia. Él no era en etiquetas Simplemente no era de ese tipo.
De repente, no tiene problemas con las etiquetas. No tiene problema en publicar fotos con ella en las redes sociales. No tiene problema en cogerla de la mano y gritar que es suya.
No sabes qué hacer ni cómo comportarte.
Sientes que deberías llamarle y desahogar tu rabia y decepción. Pero algo te lo impide. Nunca has sido oficialmente nada. No tienes derecho a reprochárselo.
Quieres enviarle un largo mensaje, exigiéndole una explicación, diciéndole lo mal que te sientes y lo mucho que te duele esta situación. Pero antes de darle al botón de enviar, cambias de opinión.
No merece saber cuánto daño ha causado su comportamiento. No necesita saber que tiene el poder de hacerte tanto daño.
Recuerdas todos los momentos importantes que pasaste con él.
Los recuerdos no te dejan en paz. Tienes una imagen vívida en tu mente de cada vez que estuvisteis juntos, de cada cosa bonita que hizo, de cada beso y cada abrazo, y estás empeorando las cosas.
Vas incluso más allá y analizas sus textos y cada palabra que ha murmurado. Es como si estuvieras en modo autodestrucción y no tuvieras poder para ponerle fin.
Intentas encontrar sentido donde no lo hay.
¿Qué tiene ella que no tenga usted? ¿Qué hay dentro de ella que le hizo cambiar de opinión? ¿Qué le hizo querer una verdadera relación con ella cuando quería algo casual contigo?
Estuviste a su lado. Hiciste todo bien. No le asfixiaste, le diste espacio, nunca fuiste pegajoso y aún así la eligió a ella antes que a ti. Simplemente no tiene sentido.
Sientes que ella ocupó tu lugar.
Te sientes como si te hubieran robado. Después de todo el tiempo que pasaste con él, tú eras a quien debería haberse llevado de vacaciones, tú deberías haber sido la que sonríe mientras te besa la mejilla en esa foto.
Sientes que te han arrebatado delante de tus narices la vida a la que tenías derecho y no puedes hacer nada al respecto. Te sientes impotente y privado. La tristeza te consume.
Finalmente, llega ese momento de claridad.
Te das cuenta de que no podías ser tú. Tu lugar nunca estuvo a su lado porque nunca te hizo sitio. Siempre te mantuvo a distancia.
Siempre te dio migajas, pero nunca todo. Nunca dijo que tendríais una relación de verdad. Sólo se apuntó a casi. Sólo quería un pequeño papel en tu vida y nunca un papel principal.
Sabes que esto tenía que pasar y que no tenía nada que ver contigo.
No le culpes a él. No culpes a esa otra mujer. Por último, tampoco te culpes a ti mismo. Las cosas sucedieron porque dejaste que sucedieran. Él era algo que necesitabas.
Era alguien que necesitabas en ese capítulo de tu vida. Pero ahora es el momento de escribir otros nuevos. Él te hizo ver que nunca fuiste una chica de casi relaciones.
Te hizo darte cuenta de que necesitas más. Que necesitas a alguien que esté seguro de querer estar contigo.
Alguien que te tome de la mano y te lleve a su vida sin que tengas que pedírselo.
Hay claridad y paz en tu vida que necesitabas desde hace tanto tiempo.
Ni siquiera te diste cuenta de que esa relación inestable que tenías con él te perjudicaba. Nunca supiste a qué atenerte.
Estabas agobiado.
Usted sigue esperando para que las cosas fueran más reales. Querías más. No tenías paz y la felicidad era una noción que cambiaba debido a los días buenos y malos que pasabas con él.
Por fin estás tranquilo. La esperanza ha cesado. Sabes que no estabais hechos el uno para el otro. Sabes que él no era adecuado para ti.
Sabes que depende de ti crear tu felicidad. Ahora sabes que la próxima vez que entres en una relación, será real y nunca más casi.